El Sistema Solar: actualización
Ejemplos los hay varios, pero uno de los más claros es el esquema mental que hemos aprendido sobre el Sistema Solar.
Martes 30 de Julio del 2013
Por: Ronny Ugarte Quirós.
Una de las cosas más curiosas en cuanto al conocimiento humano es que a menudo cuesta que a nivel popular una idea científica fehacientemente demostrada cale en el público y termine por aceptarla. Pero también sucede que, una vez que la misma por fin es abrazada como parte de la cultura popular, cuando nuevos descubrimientos obligan a cambiar la imagen tan duramente construida por una reformada o incluso totalmente nueva, de nuevo cuesta mucho que la gente se adapte a esas nuevas ideas, por más que tengan la sanción de la ciencia oficial.
Ejemplos los hay varios, pero uno de los más claros es el esquema mental que hemos aprendido sobre el Sistema Solar. Si bien las generaciones más jóvenes están aprendiendo uno más actualizado, eso no se cumple en todos los sistemas educativos, y además eso deja por fuera a la inmensa mayoría de personas que no están pendientes de las novedades astronómicas y que han vivido con la imagen tradicional, es decir, un Sistema Solar con nueve planetas, uno de ellos con anillos, un cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter que se asemeja a un campo minado lleno de pedruscos de todos los tamaños, en densa formación, y alguno que otro cometa proveniente del espacio exterior.
Lo cierto es que esa imagen tiene poco de precisa al tenor de nuestros actuales conocimientos, y quisiera invitarlos durante esta semana a la aventura de actualizarnos todos en cuanto al sistema estelar del cual formamos parte.
Empecemos por barrer la casa: Nuestro Sistema Solar no tiene nueve planetas, sino ocho, siendo el más lejano Neptuno.
Plutón ya no es reconocido como planeta, sino que forma parte de una familia de planetas enanos conocidos como plutoides, de los cuales se han detectado tres más, y de uno se tenía ya conocimiento, aunque anteriormente se le clasificaba como asteroide.
Es mucho más grande que los límites de la órbita de Neptuno. De hecho, se calcula que tiene un diámetro de al menos un año luz, lo que significa que la luz del Sol, a 300 mil kilómetros por segundo, tarda todo un año en llegar hasta los confines últimos del Sistema Solar. Y de esos confines provienen los cometas.
No sólo Saturno tiene anillos. También los tienen Júpiter, Urano y Neptuno.
Se especula seriamente sobre la posibilidad de que exista al menos un planeta adicional por descubrir, y quizá hasta una estrella oscura, hermana del Sol, con la cual formaría un sistema estelar doble.
A todo esto nos referiremos a partir de mañana.