El momento de la verdad ha llegado. Wimbledon 2018 echará a rodar en unos días pero la pelota ya está en el aire para todos los amantes del tenis, que sueñan con cómo puede evolucionar el torneo atendiendo a su cuadro. Serena Williams se verás las caras con una de las mejores del mundo en tercera ronda mientras que se producirán duelos de alto voltaje ya desde primera ronda. No hay camino fácil hacia la gloria; descubrimos lo que tendrán que afrontar las grandes favoritas del evento para llegar a la final.

Primer cuadrante

Reto mayúsculo para Simona Halep el que se le presenta en el torneo londinense. Se espera que la rumana tenga una plácida primera semana, comenzando ya las hostilidades en octavos de final donde se vería las caras con Johanna Konta o Elise Mertens. La británica es una consumada especialista sobre hierba que ya le derrotó el pasado año en cuartos de final. Simona podrá ir cogiendo ritmo con un inicio asumible ante Kurumi Nara y la rusa Anastasia Pavlyuchenkova como potencial contrincante en tercera ronda. En este cuadrante jugará la española Lara Arruabarrena contra Ana Bogdan, y en caso de ganar se enfrentaría a la cita Pavlyuchenkova.

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El número 1 del mundo ya está en Wimbledon y este sábado pasó por los micrófonos de todos los medios de comunicación para mostrar sus impresiones antes de medirse el próximo martes en primera ronda a Dudi Sela. Doble campeón del torneo, cinco finales en total, pero mucho tiempo desde la última vez que el nombre de Rafa Nadal se hizo grande en el All England Club. Este año el objetivo de salir campeón tampoco será fácil, pero el balear llega con la mentalidad muy saneada y con ganas de regalarse una nueva oportunidad sobre la hierba.

“Me siento bien, para mí Wimbledon siempre es un torneo muy especial. Me siento muy feliz cada vez que regreso cada temporada. Está claro que, de cara a la preparación, no es una buena noticia haber tenido que saltarme el torneo de Queen’s, pero ya no tengo 20 años, nunca más los voy a tener. A veces hay que tomar este tipo de decisiones en el calendario”, reflexionó el de Manacor.

"Las cosas se van a ir viendo según pasen los días. Cada día para mí es una prueba y me voy encontrando mejor, lo cual es un objetivo para llegar lo mejor posible al torneo. Aun así, tendría que ir mejorando”, añadió Nadal. Él sabe que aquí las condiciones serán muy diferentes al polvo de ladrillo, pese a que este año han cortado el pasto todavía más alto. Sin embargo, para un Nº1 del mundo es imposible no ponerse los objetivos lo más alto posibles.

“Las expectativas siempre son altas aquí. No diré que estoy aquí simplemente para jugar el torneo porque no es así, estoy aquí para intentar obtener un gran resultado. Pero también sé que Wimbledon es uno de esos torneos en los que aterrizas sin saber muy bien cómo estás jugando, cuáles son tus impresiones en la hierba. Conozco bien esa sensación, no es algo nuevo. Llegar a la final sería fantástico, hace siete años que no llego tan lejos aquí, pero no estoy pensando en esto ahora mismo. Lo que sí sería muy bonito será enfrentarme aquí a Federer”, señala

Y hablando de Federer, de Nadal y de Wimbledon, difícil era que no saltase sobre la mesa el recuerdo de aquella final de 2008, justo hace diez años. “Aquel partido supone uno de los días más emocionantes de toda mi carrera. Fue una victoria que me causó un gran impacto, tanto en mi tenis como en mi vida personal”, confesó el español.

Sin embargo, el comentario más esperado y noticiable que dejó Nadal fue su postura acerca de la próxima convocatoria de la Laver Cup. “Es algo muy complicado de decir ahora mismo. La Laver Cup es una competición que me encanta, el año pasado disfruté muchísimo y resultó ser un gran evento. Pero claro, este año España está en semifinales de la Copa Davisjusto la semana de antes, así que es complicado responderte ahora y decirte si estaré o no estaré. Todavía tengo mucho tiempo por delante para reflexionar y tomar una decisión. Ahora mismo mi máxima prioridad es Wimbledon, después será la gira americana y después el Us Open. Después, evidentemente, la Copa Davis es un buen objetivo”, concluyó.