TU DICES, Cuando Jesús nació como hombre, mantuvo la condición de Hijo de Dios que disfrutaba en su existencia prehumana. Su nacimiento no fue el fruto de una concepción por simiente o esperma humano de ningún descendiente de Adán, sino que se debió a la acción del espíritu santo de Dios. (Mt 1:20, 25; Lu 1:30-35; compara con Mt 22:42-45.) Jesús confesó que era hijo de Dios a la edad de doce años, cuando dijo a sus padres terrestres: “¿No sabían que tengo que estar en la casa de mi Padre?”. Ellos no captaron el sentido de estas palabras, pues quizás pensaron que llamaba a Dios “Padre” como lo hacían los israelitas en general. (Lu 2:48-50.)
Tras su resurrección de entre los muertos a vida de espíritu Jesús fue “declarado Hijo de Dios” (Ro 1:4), “declarado justo en espíritu”. (1Ti 3:16.)
Mi pregunta es cómo es que cuando volvió al cielo tras su resurrección siguió siendo considerado Hijo de Dios?
el Verbo pasó a ser el Hijo unigénito cuando Dios engendró a su Hijo en el vientre de María, introduciéndole así en el mundo (Heb.1:6-8). Por lo tanto, esa doctrina de que el Cristo ya era el Hijo unigénito de Dios antes de nacer como hombre es falsa, ya que él pasó a ser el Hijo unigénito de Dios solamente cuando vino al mundo en forma de hombre. ¡Antes de venir al mundo en forma de hombre él EL VERBO DIVINO (el Logos) DE DIOS (Jn.1:1), llamado también EL ÁNGEL (Mensajero) de IEVE ), y fue este Verbo divino quien se hizo carne y vivió entre nosotros (Jn.1:14).
Observemos bien lo que dicen esos pasajes. María fue concebida del espíritu santo, ¿qué significa eso?, ¿que el espíritu santo en forma de hombre se acostó con María y ella concibió con el esperma del espíritu santo?, ¡¡pues claro que no!!, decir eso sería una estupidez y una blasfemia espantosa, sencillamente lo que ocurrió es que el espíritu santo, es decir, el poder del Altísimo, hizo que María concibiera de forma milagrosa, el ser humano que iba a ser engendrado en el seno de María procedía del poder de Dios, ¿pero de quien era el esperma que Dios puso en la matriz de María?, ¿era el esperma del espíritu santo?, ¡¡¡pues claro que no!!!, ese esperma solo podía ser de un HOMBRE, y obviamente solo podía proceder del esperma de José, el padre humano de Jesús, sencillamente Dios tomó esos genes de José y de forma milagrosa los introdujo en la matriz de María, por eso es que los primeros cristianos creían que Jesús era el hijo de José:
Luc 3:23 Jesús mismo al comenzar su ministerio era como de treinta años, hijo, según se creía, de José, hijo de Elí,
TU DICES, Primogénito:
De acuerdo con las Santas Escrituras, hubo un tiempo en que Dios estuvo solo. En su amor, quiso compartir el don de la vida y convertirse en padre, aunque no como los humanos. Con su ilimitado poder creativo, Jehová formó una persona viva e inteligente, un espíritu, “el principio de la creación por Dios”, a quien conocemos por el nombre de Jesucristo (Revelación [Apocalipsis] 3:14; Proverbios 8:22). Por haber sido creación directa de Dios cuando no había nadie más, a Jesús correctamente se le llama “hijo unigénito” y “el primogénito de toda la creación” (Juan 1:14; Colosenses 1:15).
Lógicamente, al ser la primera creación, Jesús no podía ser el Creador, “el único Dios” (1 Timoteo 1:17). No obstante, el Padre le concedió muchos privilegios. Por ejemplo, lo utilizó para crear “todas las otras cosas”, lo que incluye a los ángeles. A estos también se les llama “hijos de Dios” por haber recibido de Jehová la vida (Colosenses 1:16; Job 1:6; 38:7).
Después de haber preparado la Tierra para el ser humano, el Creador dijo: “Hagamos al hombre a nuestra imagen”, por lo visto dirigiéndose a Su primogénito (Génesis 1:26; Proverbios 8:22-31). Esto significa que Jehová creó también a su primer hijo humano, Adán, mediante la criatura espiritual que llegaría a convertirse en Jesús (Lucas 3:38).
Eso de que Dios estuvo solo en algún tiempo, no lo dicen las escrituras por ningún lado y referente a Apoc. Por consiguiente, el Verbo de Dios es el principiador u originador de toda la creación (Colosenses 1:16), es decir, que él es la causa o motivo de la creación de Dios, pues fue precisamente el Cristo quien al principio fundó los cielos, y la tierra es obra de sus manos (Heb.1:10-11), por lo tanto, él es el PRINCIPIO U ORIGINADOR DE LA CREACIÓN DE DIOS (Ap.3:14). Esa enseñanza de que el Verbo fue creado al principio no encaja con Juan 1:1, donde se dice bien claro que el Verbo YA EXISTÍA en el principio, es decir, antes de que fueran creados los cielos y la tierra, el Verbo ya existía.
TU DICES, Aunque Jehová ha demostrado su amor de múltiples maneras, hay una que se destaca sobre las demás. ¿A cuál nos referimos? Al hecho de que enviara a su Hijo a sufrir y morir por nosotros. Podemos afirmar, sin temor a equivocarnos, que se trata de la mayor muestra de amor de toda la historia. ¿Qué nos da tanta seguridad?
La Biblia llama a Jesús “el primogénito de toda la creación” (Colosenses 1:15). Pensémoslo detenidamente: el Hijo de Jehová existió antes que el universo físico. Entonces, ¿cuánto tiempo estuvieron juntos Padre e Hijo? Según cálculos científicos, la edad del cosmos asciende a trece mil millones de años. Sin embargo, incluso si esta cifra fuera correcta, no bastaría para abarcar la existencia del Hijo primogénito de Jehová. ¿Qué hizo Jesús durante tantos millones de años? Servir gustoso a su Padre en calidad de “obrero maestro” (Proverbios 8:30; Juan 1:3). Jehová y su Hijo trabajaron juntos para formarlo todo, disfrutando de momentos llenos de dicha y emoción. ¿Quién de nosotros, entonces, puede hacerse una mínima idea de la fuerza de un vínculo que ha existido por un período tan inmenso? Es patente que los unen los lazos afectivos más firmes que pueda haber.
Con todo, Dios envió a la Tierra a su Hijo para que naciera como humano, lo que implicó tener que privarse por algunas décadas de la estrecha relación con él en el cielo. Desde allí lo observó con gran interés durante todo su crecimiento hasta que llegó a ser un hombre perfecto. Cuando se bautizó, tenía unos 30 años, y el Padre habló personalmente en aquella ocasión desde las alturas y dijo: “Este es mi Hijo, el amado, a quien he aprobado” (Mateo 3:17). En vista de que Jesús cumplió fielmente todas las profecías y todo lo que se le había pedido, su Padre tuvo que sentirse muy complacido (Juan 5:36; 17:4).
Ahora bien, ¿cómo se sintió Jehová el día 14 de Nisán del año 33 E.C. al ver que Jesús era traicionado, que era arrestado por una turba furiosa, que recibía burlas, que le escupían y le daban puñetazos, que lo flagelaban hasta dejarle la espalda hecha jirones, y que lo clavaban de pies y manos en un poste donde sufrió terribles humillaciones públicas? Sí, ¿qué sentimientos le causó que su Hijo amado clamara a él en su agonía, exhalara su último suspiro y, por vez primera desde el principio de la creación, dejara de existir? (Mateo 26:14-16, 46, 47, 56, 59, 67; 27:26, 38-44, 46; Juan 19:1.)
El dolor que la muerte de su Hijo debió causarle a Jehová, quien tiene profundos sentimientos, nos resulta imposible de expresar. Lo que sí podemos saber es por qué permitió Jehová que ocurriera, por qué estuvo dispuesto a aguantar tal sufrimiento. El Creador nos revela algo maravilloso en Juan 3:16, un versículo tan importante que ha sido llamado el Evangelio en miniatura: “Tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que ejerce fe en él no sea destruido, sino que tenga vida eterna”. Los motivos de Jehová se resumen en una sola palabra: amor. Nadie jamás ha demostrado un amor tan grande.
David, tendrían tanto sentido éstas palabras si al que envió Jehová fue a otro como él, que siempre según tú ha existido?
"La Palabra"
Primero que nada, por favor lee: ( Juan 1:14.) ¿Por qué se le da a Jesús el título de “la Palabra” o el Logos? Por la función que ha desempeñado desde que fueron creados los demás seres inteligentes. Jehová usó a su Hijo para dar información e instrucciones a los demás hijos espirituales, así como para transmitir su mensaje a los seres humanos. El hecho de que Jesús es la Palabra, o Vocero de Dios, queda claro en lo que les dijo a un grupo de judíos: “Lo que yo enseño no es mío, sino que pertenece al que me ha enviado. Si alguien desea hacer la voluntad de Él, conocerá respecto a la enseñanza si es de Dios o si hablo por mí mismo” (Juan 7:16, 17). Jesús siguió llevando el título de “La Palabra de Dios” aun después de haber regresado a la gloria celestial (Rev. 19:11, 13, 16) Mi pregunta es: por qué no volvió al mismo estado de igualdad que tenía con Dios?
Piensa por un momento en lo que implica ese título. Aunque Jesús es la criatura más sabia que existe, no confía en su propia sabiduría y por eso solo transmite lo que su Padre le comunica. Tampoco dirige la atención a sí mismo, sino a su Padre (Juan 12:50) No te parece curioso ese hecho?
¿Que necesidad tenía él de estar consultando todo el tiempo con Dios, y además de llamarle continuamente Padre? ¿ Es que quería confundirnos con algún propósito que no hemos descubierto?
La verdad, que personalmente pienso que triste sería privarnos de conocer estas dos personas, cada una en su posición es grande, y que lamentable es que hayan personas que anulen la maravillosa personalidad de Cristo, y que nos priven de apreciar el sacrificio que tanto Padre cómo Hijo estuvieron dispuestos a hacer por todos nosotros.
Si te paras a pensar la Biblia es un libro armonioso, nada contradictorio, por lo tanto cuándo encontramos una idea en algún texto debemos esperar que armonicen con el resto.
Eso sí tenemos que ser humildes para reconocer cuando algo no es como esperábamos o pensábamos.
Vuelvo y te repito que lo que dice Colosenses 1:15 al llamar a Cristo es el PRIMOGÉNITO DE TODA LA CREACIÓN, y esa palabra, “primogénito”, no significa de ninguna manera que él fuera el primer ser nacido de la creación, porque resulta que la misma palabra, “primogénito”, también aparece en Éxodo 4:22, donde IEVE dice que Israel es su PRIMOGÉNITO, y con el mismo nombre se dirige a la tribu de Efraín, sin embargo Israel no fue el primer pueblo nacido en la tierra, ni Efraín fue la primera tribu de Israel en nacer. En Jeremías 31:9 IEVE dice: “Efraín es mi primogénito“, pero Efraín no fue el primer nacido de la familia de José, sino el segundo, ya que el primero fue Manasés. Ahora bien, en Jeremías 31:20 Dios mismo explica lo que quiere decir con la palabra “primogénito”: “¿No es Efraín hijo precioso para mí?, ¿no es niño en que me deleito?”. Es en el sentido de preeminencia que Efraín era el primogénito de Dios (Gén. 48:17-20). Y en el salmo 89:27, hablando de David, IEVE dice: “yo también te pondré por primogénito, el más excelso de los reyes de la tierra“, con lo que da entender, no que David haya sido el primer rey que ha existido (ni siquiera en Israel), sino que sería el más grande, así como Efraín era el primogénito de Dios, por ser la tribu más querida para el Señor. Por lo tanto, cuando en Colosenses 1:15 Pablo dijo que el Cristo es el PRIMOGÉNITO de toda la creación, no estaba diciendo que él fuera el primer ser nacido de toda la creación (como falsamente lo han traducido), sino que el Cristo es el PREEMINENTE O SOBERANO SOBRE TODA LA CREACIÓN, EL REGIDOR DE LA CREACIÓN, es decir, aquél en el cual el Padre se deleita y elige para gobernar sobre toda la creación, ya que todas las cosas por medio del Cristo fueron hechas, y él es antes de todas las cosas, por lo tanto, él tiene el derecho de primogenitura sobre todo lo creado, ya que por medio de él fueron creadas TODAS las cosas (Jn.1:3, 10, 1Co.8:6, Col.1:15-17, Heb.1:1-2)Si el Cristo fuera parte de la creación, entonces resulta que ÉL SE HABRÍA CREADO A SÍ MISMO, ya que esos pasajes bíblicos dicen que por medio de él fueron creadas TODAS las cosas, ¡no solo una parte!, pero si todas las cosas fueron creadas por medio de él, entonces él no puede formar parte de lo creado, a no ser que él se hubiera creado a sí mismo, lo cual es un absurdo.
En el texto griego resulta que existe la palabra “protoktistos“ que significa “el primero en ser creado”, esta palabra es la que Pablo hubiera utilizado si él hubiera enseñado que el Cristo fue el primer ser creado por Dios, entonces Pablo habría dicho lo siguiente: “El PROTOKTISTOS (el primero creado) de la creación”, en lugar de decir: “el PROTOTOCOS (primogénito) de la creación”.
Referente al porque se le llama Vocero, Palabra de Dios, es por la sencilla razón de que esa iba a ser una de sus funciones, pero eso es simplemente uno de sus muchos sobre-nombres que se le da a Jesús, pero su nombre original no es vocero ni palabra, si no, IEVE (Jehova), el es el IEVE-HIJO, el IEVE menor, ese medio que el Dios Padre utilizó para tratar con la humanidad, la soledad nunca ha sido de Dios, si no de Satanás (el destructor), en la biblia siempre usted verá esa dualidad, esa pluralidad, como menos iba a estar Dios sólo, si El siempre ha querido que estuviésemos acompañados, en pareja.