El ser humano tambien tiene alas
Las alas
de los seres humanos no son visibles, nuestras alas pueden crecer o no,
algunos las desarrollan, otros no las dejan crecer, las ocultan o las
ignoran. Al contrario de lo que muchos piensan, éstas no se sitúan en
nuestra espalda, sino en nuestra mente, nuestro corazón, nuestra
mirada, tacto, olfato, oído y gusto, esos siete sentidos que dan forma
a lo que fuimos, somos y seremos.
Igual que
esas alas, la personalidad de cada uno se ha de cultivar con el paso de
los años, lo mismo ocurre con el cariño, que ni con la llegada de la
muerte desaparece. Aunque una persona se vaya y nuestros cinco sentidos
no la puedan captar, aún nos quedan esos dos que sí lo pueden hacer, es
cierto que no se puede probar lo que estoy diciendo pero sí sentir.
Aquellas
personas que no dejaron desarrollar esas alas, son incapaces de sentir,
de sentirse, su vida es plana y sus logros materiales. Nunca serán
recordados por mucho tiempo porque no fueron capaces de dejar huella.
Pero aquellas personas que no sólo volaron sino que nos hicieron volar
con su compañía, esas sí que serán eternas en nuestro recuerdo, vivo
recuerdo.
Aunque muchas lágrimas bañen el tuyo, lo único que saldrá a flote es el tremendo amor que te tengo