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Socio-Política: Flujos de información y poder
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De: Marti2 (Mensaje original) |
Enviado: 12/04/2014 06:00 |
Entrevista a Julian Assange, editor jefe de Wikileaks asilado en la Embajada de Ecuador en Londres desde junio 2012
Asilado en la Embajada de Ecuador en Londres desde junio 2012, el
australiano fundador de Wikileaks, Julian Assange, figura como objetivo
de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de EE.UU. en lo que llama un
cronograma de cacería humana, según confirmaron recientes revelaciones
de Edward Snowden. La inculpación: haber difundido secretos del
Departamento de Estado a los que tuvo acceso Wikileaks, reivindicando
una Internet y un periodismo libres. En las líneas que siguen, Assange
expresa sus puntos de vista a un cuestionario formulado por ALAI
respecto a temas como globalización y gobernanza de Internet; vigilancia
y seguridad ciudadana; transparencia gubernamental y rendición de
cuentas, y la vigilancia ciudadana sobre las autoridades.
ALAI: Internet comenzó su fase de expansión rápida en un contexto
global marcado por la "guerra contra el terror", por el aumento de las
restricciones y violaciones de los derechos humanos, especialmente la
privacidad, y la intensificación de la vigilancia estatal. A tu juicio,
¿cuáles son las principales consecuencias de este contexto sobre la
evolución de Internet?
Julian Assange: Internet no sólo
representa una tendencia, sino varias. Con Internet, la vigilancia
masiva ha penetrado en el núcleo de la sociedad humana internacional y a
la alianza de inteligencia liderada por Estados Unidos, “Cinco
ojos”[1], le ha dado poderes de vigilancia sobre casi todos los seres
humanos y organizaciones a nivel mundial. Pero el régimen mundial de
comunicaciones creado por Internet también significa que la organización
y el comercio son más baratos, más rápidos y no están sujetos a límites
geográficos clásicos. En el pasado, el reto para los movimientos por la
justicia social era lograr consensos y organizarse de manera eficiente
para poder competir con las entidades que acumulan coherencia
organizativa en razón de su tamaño y capacidad de coerción -como las
grandes corporaciones y los gobiernos-. En un mundo donde "el código es
ley", el ámbito legislativo no se limita a los gobiernos ni a sus
puntales empresariales. Esto está conduciendo, en forma incipiente, a un
mercado libre de semi-Estados: redes fluidas de asociación que tienen
potestades de tipo estatal, por ejemplo sobre la moneda, la recopilación
de inteligencia, las comunicaciones y las influencias.
ALAI:
La información siempre ha sido a la vez víctima y arma de guerra, pero
esto ha aumentado de manera exponencial en la era de la sociedad de la
información: manipulación de hechos, campañas mediáticas alineadas,
periodistas arrimados a las tropas, ataques dirigidos a medios de
comunicación y periodistas, etc. Sin embargo, Internet ofrece también
oportunidades sin precedentes para contrarrestar esta manipulación de la
información (como el propio Wikileaks lo demostró al quebrar la censura
y revelar imágenes de la cruda realidad de las guerras en Afganistán e
Irak). ¿Cómo se podría mantener esta perspectiva y desarrollarla más?
JA: Se podría desarrollar esta perspectiva mirando el flujo de información en un contexto de relaciones de poder.
El flujo de información no es un fenómeno neutro. Se relaciona con el
movimiento del poder a través de una sociedad. Para la autodeterminación
-ya sea como grupo o como individuo- se necesita tener información
veraz. El proceso de ser libre y de liberarse es el proceso colectivo e
individual de asimilar nueva información sobre el mundo y de actuar
sobre ella. Este mismo proceso es uno de los fundamentos de la
civilización. En las comunidades, significa que tenemos que tener la
posibilidad de comunicar entre nosotros mismos, de transmitir nuestros
conocimientos y recibir los de los demás. La información es fundamental
para nuestra posición de poder frente al mundo que nos rodea. Un público
bien informado es un público empoderado y es un público libre.
Los grupos de poder centralizado tratan de actuar en contra de esto. Un
público más libre significa una autoridad central menos potente, y las
autoridades centrales siempre buscan mantener o hacer crecer su poder.
El poder tratará de controlar o influir en los flujos de información con
el fin de consolidar su propia posición de poder. Intentará ocultar la
información a las mayorías, restringiendo su acceso a una pequeña elite
que así tendrá capacidad de organizarse con rapidez y dejar fuera de
juego a los demás; y tratará de dar a las mayorías información falsa, de
manera que cuando éstas intenten actuar por su propio interés,
tambaleen.
Los medios de comunicación no son sino flujos de
información estructurados. Un medio es una estructura sobre la que fluye
la información, normalmente respaldada por una tecnología que determina
sus propiedades. Dependiendo de las propiedades de un medio, éste puede
ser más o menos democrático en su accionar.
En el pasado, hemos
tenido formas de medios de comunicación que favorecen el poder
centralizado –como medios de-uno-a-muchos, tal el caso de la radio y la
televisión, lo que se llama los "mass media" en la teoría de la
comunicación. Debido a que son centralizados, son fáciles de controlar
y, por lo mismo, fácilmente doblegados por otros grupos de poder. Por
esta razón decimos que estos medios de comunicación son inherentemente
propensos a traicionar su propósito declarado.
Pero hay otras
formas de medios de comunicación susceptibles de ser más honestos.
Internet permite un montón de diferentes formas de comunicación
de-muchos-a-muchos. Es más difícil de controlar por parte de los grupos
de poder, aunque hay serios esfuerzos en marcha.
Hay campañas de
astroturfing[2] en Internet, y todo tipo de información errónea,
desinformación y propaganda sucia. Pero estas cosas han existido
siempre. En comparación con el empoderamiento de las comunidades que
Internet permite, las ventajas que presenta para la manipulación de la
información son menores. La propaganda está en desventaja en Internet.
Hay muchos aspectos de Internet que no están suficientemente
descentralizados, como su infraestructura física, por ejemplo. Eso hace
que sea más vulnerable a la vigilancia masiva, si bien no ofrece mayor
ventaja al Estado en el plano de las relaciones públicas, la propaganda o
la desinformación. La muestra de ello es el hecho que, si bien la NSA
tiene predominio en el nivel de la infraestructura -puede escuchar casi
todas las comunicaciones electrónicas que atraviesan Internet- sin
embargo, está perdiendo la batalla de relaciones públicas en todo el
mundo.
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De: Marti2 |
Enviado: 12/04/2014 06:02 |
ALAI: Este contexto también incluye una nueva fase del militarismo
estadounidense en el escenario mundial, donde la guerra cibernética se
ha convertido en un elemento estratégico de la guerra. ¿Cuáles son las
principales amenazas de esta situación para que Internet siga siendo una
infraestructura abierta y globalmente interconectada? ¿Qué se podría
hacer para defender a Internet como una zona de paz?
JA: En
lugar de pensar en cuan nefasto es para la humanidad mundial militarizar
el software, EE.UU. está escalando una carrera mundial de armas
electrónicas. La red es compleja e interactúa con nuestras sociedades de
manera compleja. La militarización de un espacio tan complejo es
temeraria. Los firewalls para las organizaciones ya existen, pero lo que
vendrá luego serán los firewalls para los Estados, a medida que éstos
traten de introducir mecanismos similares a la preservación de la
integridad territorial.
La defensa de Internet supondrá -por
supuesto- la creación de un marco jurídico que sea vinculante para los
Estados, y que establezca Internet como un campo inviolable. Pero todos
sabemos que los Estados no suelen cumplir con la ley. Así que también
será necesario rediseñar Internet e implementar reformas técnicas ("el
código es la ley"). En la base de este esfuerzo estará la criptografía.
Necesitamos datos cifrados desde la capa de transporte para arriba. En
fin de cuentas, será la matemática la que pone límites a las
superpotencias, como también fue la matemática que permitió la creación
de éstas a través de los monopolios de armas termonucleares.
ALAI:
¿Cuáles consideras que son los aspectos más relevantes de las
revelaciones de Edward Snowden y de sus repercusiones? ¿Qué
implicaciones tienen para el futuro de Internet? ¿Qué pasos podrían dar
los países en desarrollo para proteger del espionaje a sus
comunicaciones?
JA: Los documentos que Edward Snowden
divulgó contienen muchos detalles técnicos que son de gran valor para
los desarrolladores de software, activistas de la privacidad e
individuos cuya vida y seguridad dependen de la integridad y la
seguridad de su software y hardware. Allí radica el valor indudable para
las comunidades de expertos que construirán la próxima generación de la
tecnología para garantizar privacidad. En WikiLeaks hemos estado
sistematizando nuestra propia experiencia con la información de los
documentos develados para mejorar nuestras prácticas, y nuestros
técnicos y desarrolladores de software han estado dedicados a mejorar
una serie de tecnologías de punta, mejoras que en su debido tiempo
beneficiarán al usuario común.
Pero la cosa más importante que
el Sr. Snowden ha hecho es despertar a la civilización mundial a la
comprensión de que la vigilancia masiva es real. Hace un año, los
periodistas no hubiesen publicado que la NSA estaba vigilando la
Internet entera. Varios periódicos se negaron -para su descrédito- a
dedicar espacio al asunto. El Sr. Snowden estaba lejos de ser el primer
denunciante de la NSA para alertarnos sobre esto, pero él fue quien
finalmente colmó el vaso con pruebas documentales actuales y
autenticadas por las dimensiones de la cacería que lanzó el gobierno de
EE.UU.
El hemisferio sur tiene que proteger a sus poblaciones de
la vigilancia. En América Latina, casi todas las conexiones a la
Internet mundial pasan a través de cables de fibra óptica que atraviesan
Estados Unidos. Esta es una cuestión de soberanía y de competitividad
económica. Los países necesitan formar alianzas industriales para crear
la infraestructura física alternativa para Internet, para que sus
comunicaciones no tengan que atravesar las fronteras de un vigilante
depredador del calibre de Estados Unidos, el Reino Unido o sus aliados.
También deben considerar el fortalecimiento de su propia
infraestructura, mediante la regulación del sector de los proveedores de
Internet, de manera que sea obligatorio aplicar un fuerte cifrado de
datos en los enlaces de comunicación.
Los países que valoran su
soberanía deberían anular sus contratos con empresas estadounidenses, y
rechazar las donaciones de infraestructura y tecnología subvencionada de
superpotencias como China y Estados Unidos. No deben utilizar hardware
de encriptación controlada por EE.UU., debido a que ese hardware tiene
una larga historia de “puertas traseras”. Deben hacer obligatorio el uso
de hardware y software libre, cuyo código fuente esté abierto para que
cualquiera lo pueda examinar, y deben apoyar financieramente a los
desarrolladores y comunidades de desarrollo con el fin de fomentar los
bienes comunes de software, a escala mundial, en tecnología segura y
fiable, que todos los países pueden utilizar.
Ellos deberían
liderar el camino, al adoptar leyes progresistas de libertad de
expresión y protección de datos, y abandonar cualquier política de
vigilancia del estilo de la NSA que hayan implementado. Los países en
donde no se invade la privacidad de los clientes serán lugares
atractivos para las empresas de Internet preocupadas por la privacidad
que buscan alejarse de los Estados Unidos. El Sur global puede atraer a
empresas y promover el crecimiento de sus sectores de Internet en la
medida en que se diferencien de las prácticas perjudiciales de los
Estados Unidos y sus aliados en las esferas de la inteligencia.
En el ámbito internacional, deben tratar de desarrollar un consenso para
prohibir el uso de armas de vigilancia masiva contra la población.
Tiene que adoptarse un marco internacional que permita llevar ante la
justicia a los Estados que practiquen la vigilancia masiva. Ningún país
puede aspirar a competir con EE.UU. en materia de vigilancia masiva;
debido a su posición geográfica de "araña en el centro" de los flujos de
telecomunicación, más bien hay que matarla de hambre. Ellos deben
tratar de aprovechar sus posiciones en los comités internacionales para
influir en la adopción de estándares web en la dirección correcta. A
EE.UU. no se le debe permitir que menoscabe los estándares de cifrado y
de comunicaciones para aumentar su acceso. Todas las normas impulsadas
por EE.UU. o sus aliados deben ser consideradas como sospechosas. Otros
países deberían presionar diplomáticamente a Estados Unidos y a las
demás potencias en espionaje, y tratar de emprender acciones legales
contra esos países por la violación de los derechos de privacidad de sus
propios ciudadanos.
ALAI: Mientras que las tecnologías
digitales amplifican enormemente las posibilidades de que los Estados y
las corporaciones practiquen la vigilancia y la recopilación de datos,
también pueden, como Wikileaks ha puesto de manifiesto, aumentar la
posibilidad de vigilancia de la ciudadanía sobre las autoridades
públicas. ¿Cuáles serían tus recomendaciones en cuanto a la legislación y
las políticas públicas en este la materia?
JA: Fundé un
amplio programa de reforma legislativa en Islandia en 2009 y 2010,
orientado precisamente para este propósito. Se le llamó el IMMI (siglas
en inglés) -la Iniciativa Islandesa de Medios Modernos-, y gran parte de
ella surgió de las ideas que habíamos tenido en el curso de nuestro
trabajo sobre la creación de un refugio para los servicios de Internet.
Fue diseñado para proporcionar la mejor protección posible para los
editores, periodistas honestos y empresas de Internet y para dar un
impulso a un sector de internet islandés, al atraer inversiones e
innovación. Incluye leyes innovadoras de protección de la fuente, la
protección de archivos, y leyes que impiden intentos de demandar
injustamente desde otra jurisdicción. La propuesta completa se encuentra
disponible en línea (https://immi.is/).
Todo lo que necesita es que algún país pequeño implemente algo parecido
a la IMMI, y la presión debido a la competencia atraerá a las empresas
de Internet a invertir en la jurisdicción. En la actualidad, ningún país
es visto como el "faro de la colina" en materia legislativa respecto a
la instalación de los servicios de Internet, pero en adelante los países
que adopten reformas legales del estilo del IMMI serán vistos no sólo
como líderes mundiales, sino como el mejor lugar para instalar una
empresa de Internet de alta tecnología.
ALAI: Internet ha
demostrado que tiene un gran potencial para ampliar el acceso a la
información y al conocimiento, y para facilitar la participación
democrática, la transparencia, el intercambio de información y la
expresión pública. Pero esto está ahora bajo amenaza, entre otras cosas,
debido al creciente control corporativo, junto con los intentos de
legislar restrictivamente sobre la "piratería" y la propiedad
intelectual (como los proyectos de ley SOPA y PIPA en EE.UU., o la
negociación de acuerdos internacionales tales como ACTA o el TPP[3]).
¿Cuáles serían los aspectos más fundamentales a considerar, para evitar
este tipo de amenazas y garantizar que Internet siga desarrollándose
como un espacio público abierto?
JA: El aspecto más
fundamental a tener presente está en el plano conceptual. El concepto de
"propiedad intelectual" está enfrentando tiempos difíciles en los
últimos años, debido a que es antagónico a la idea misma de internet.
Ciertos sectores establecieron grandes centros de poder antes de
Internet, todos ellos basados en el concepto de "propiedad intelectual".
Ahora ese concepto se está volviendo cada vez más difícil de sostener,
de la misma manera en que una vela pierde lentamente su cohesión. Estos
lobbies temerosos han impulsado una explosión de legislaciones para
hacerse con el control de los conductos de Internet, cerrando
determinados flujos de información, tratando de evitar que los
monopolios de la información se disuelvan. Estas propuestas vienen del
mundo empresarial, pero son acogidas por ciertos gobiernos que buscan
pretextos para extender su control sobre Internet.
Pero el
problema inmediato es el TPP y la propuesta de globalizar las leyes
restrictivas estadounidenses de "propiedad intelectual" a través de los
acuerdos comerciales mutuos. Los países del TPP representan más del 40 %
del PIB mundial. Su intención geopolítica es un bloque “comercial”
dominado por EE.UU. para arrinconar a China. Por ejemplo, Ecuador, como
país del Pacífico, aún no es parte del TPP, pero, si se aprueba ese
tratado, tendrá el efecto de hacer que la interpretación radical de
EE.UU. sobre leyes de propiedad intelectual, se convierta en norma
permanente en ese hemisferio. Ecuador -como país que aún está en vías de
adoptar plenamente Internet- tendrá mucho que perder si queda rodeado
por un marco legal que ofrece ventajas comerciales a los intereses
estadounidenses. Si el TPP pasa, los mismos intereses intentarán
utilizar ese impulso para imponer esas normas en Europa también, a
través de la asociación EE.UU. – UE: el TTIP. Los aspectos tradicionales
de la propiedad intelectual –las trabas a la cultura, a la medicina y
otros elementos que son esenciales para la realización humana- no son
las únicas ramificaciones posibles de este escenario. Podemos esperar
que a la ley de PI cada vez más se la utilice abusivamente fuera de ese
ámbito para poner en entredicho la soberanía de Internet en América
Latina, como también en la costa asiática del Pacífico. En octubre
pasado divulgamos un borrador reciente del capítulo de Propiedad
Intelectual del TPP, y esto ha tenido una influencia que ha galvanizado a
la oposición al TPP. Ya se ha ralentizado su paso por la legislatura en
los EE.UU. Además del activismo frente a la vigilancia de la red y la
producción de alternativas de tipo "el código es la ley", asegurar la
derrota de ese tratado es la meta más importante en torno a la que
podemos encauzar la energía y el esfuerzo de forma más eficaz en este
momento.
Julian Assange es editor Jefe de WikiLeaks.
Notas:
[1] NdE La llamada Alianza “Cinco Ojos” es un programa conjunto de
vigilancia de Estados Unidos, Reino Unido, Australia, Nueva Zelandia y
Canadá. Las últimas revelaciones de los documentos de Snowden dan cuenta
de propuestas explícitas en el seno de este grupo para explotar
Twitter, Facebook, YouTube y otras redes sociales como plataformas
secretas para la propaganda, con el propósito de “usar las técnicas en
línea para hacer que algo suceda en el mundo real o virtual” incluyendo
“operaciones de información (influencia o perturbación)”. (Fuente: The
Intercept).
[2] Astroturfing: (originalmente referido a una
marca de césped artificial) es un neologismo inglés que refiere a una
técnica de relación pública y cabildeo, donde una organización o
corporación poderosa crea un supuesto movimiento de base para dar la
falsa impresión del apoyo popular a sus tesis.
[3] SOPA Proyecto
de ley de cese a la piratería en línea; PIPA Proyecto de ley contra el
robo de la propiedad intelectual; ACTA Acuerdo Comercial
Antifalsificación; TPP Acuerdo Estratégico de Asociación Trans-Pacífico.
Alainet
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