|
De: Porque77 (Mensaje original) |
Enviado: 10/03/2014 22:16 |
¿ EL EVANGELIO ... O LAS BIBLIAS ? ¿QUÉ NOS MANDÓ PREDICAR JESUCRISTO? ¿CUAL ES EL CAMINO VERDADERO?... ¿Qué mandó predicar Jesucristo? ¿las leyes del viejo testamento? ¿las cartas atribuidas a Pablo? ¿las biblias impuestas por las religiones? ¿o el Evangelio?... Jesucristo nos mandó predicar el Evangelio por todos los pueblos del mundo... El Evangelio así nos dice: "Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado". (Marcos 16:15-16). "Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin". (Mateo 24,11-14). "Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado.......". (Mateo 28,19-20). Esto nos mandó Jesucristo, que los cristianos fueran por todas las naciones enseñando todas las cosas que Él había mandado. Y esto es lo que Él había mandado que se predicara: "predicad el evangelio a toda criatura"... "será predicado este evangelio del reino en todo el mundo". El Evangelio es lo que nos predicó Jesucristo y luego lo siguieron predicando los apóstoles y cristianos de los primeros siglos. ¿Pero qué pasó después?... Los pueblos del mundo que recibían el Evangelio se llenaban de amor por el Evangelio de Jesucristo, pues el Evangelio mandaba misericordia, perdón para los que cometían faltas y reparto de bienes con igualdad entre todos los cristianos. Pero estas enseñanzas del Evangelio no eran bien recibidas por los poderosos dictadores que, llenos de codicia, querían vivir mejor que los demás e imponer sus leyes a los demás. Los jefes religiosos de los imperios no querían los misericordiosos mandamientos del Evangelio, ellos querían dominar sobre los demás, y entonces buscaron otras leyes que les justificaran en sus deseos de poder y su codicia. No tardaron en encontrarlas, pues las leyes del viejo testamento estaban en sus manos, muchos judaizantes del imperio romano las conocían. Entonces, los emperadores de Roma y los obispos sometidos a ellos volvieron a imponer a los pueblos las leyes del viejo testamento, llamándolas "leyes de Dios"..., y así es como volvieron a imponer estas leyes a los pueblos cristianos. Desde que los emperadores de Roma del siglo IV (Constantino y sus descendientes) tomaron poder sobre las Iglesias cristianas, los jefes religiosos del imperio dejaron ahogado, desplazado y mal entendido el Evangelio de Jesucristo. El Evangelio mandaba que no se hicieran guerras, que no se matara a las personas, que no se hicieran esclavas a las personas y que se repartieran todos los bienes entre los pobres. Los emperadores y los poderosos de Roma y de otros imperios, no querían estas enseñanzas del Evangelio, y por eso se hicieron pasar por cristianos para dominar sobre las Iglesias cristianas, pero abandonando los misericordiosos mandamientos de Jesucristo. En ellos se volvió a cumplir el ejemplo del joven que tenía muchas posesiones y abandonó a Jesús. Y es que Jesús le había dicho a aquel joven (para todos los hombres que tenían muchas posesiones): "Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme. Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones" (Mateo 19:16-22) Jesucristo también había enseñado a sus discípulos lo siguiente: "Sabéis que los jefes de las naciones las tiranizan y que los grandes las oprimen con su poderío. Entre vosotros no debe ser así, sino que si alguno de vosotros quiere ser grande, que sea vuestro servidor; y el que de vosotros quiera ser el primero, que sea el servidor de todos; de la misma manera que el hijo del hombre no ha venido a ser servido, sino a servir y dar su vida en redención de muchos". (Mateo 20:25-28) Los emperadores de Roma y de otros imperios de terror no soportaban esta enseñanza del Evangelio. Ellos no querían repartir sus bienes ni sus privilegios con sus semejantes. Desde entonces, buscaron religiosos que cambiaran la Ley del Evangelio por la ley del viejo testamento, y desde entonces ya no se volvió a vivir el verdadero cristianismo, pues se volvieron a justificar la desigualdad, los castigos terribles y las penas de muerte. Más tarde, se impondrían inquisiciones terribles y sistemas de terror tan espantosos que dejaron espantado al mundo. Desde aquellos tiempos de los grandes inquisidores y sus sistemas de terror, el mundo ha conocido grandes religiones que han justificado siempre la desigualdad (que unos sean muy ricos y otros sean esclavos o muy pobres) diciendo que "al reino de los cielos no se va por rico o por pobre, sino por bueno"... ¿Es que acaso se puede ser bueno siendo uno rico mientras sus hermanos viven en la miseria? Desde aquellos tiempos, se justificaron las guerras contra los enemigos llamandolas "guerras santas"... Se justificaron las penas de muerte... ¿Cuándo Jesucristo, los apóstoles o los primeros cristianos impusieron penas de muerte? Estas leyes de guerras, de penas de muerte, esclavitud y desigualdad, se habían vivido en los tiempos en que los pueblos vivían las leyes del viejo testamento. Jesucristo abolió todas las leyes del viejo testamento que no eran misericordiosas. Los judíos no recibieron la Ley como Jesucristo la enseñaba y por eso mandaron que le crucificaran (Jesucristo fue torturado y crucificado causándole muchísimo dolor). Y es que aquellos judíos ya no conocían la verdadera Ley de Dios: "No matarás". Los primeros cristianos iban predicando el Evangelio y su Ley era la misericordia y el perdón para todos. Y ya que el mundo no quiere recordar la Ley de Dios y los mandamientos de Dios como los enseña Jesucristo, nosotros, como homenaje a Jesucristo, volvemos a recordalos: "todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque ésta es la ley y los profetas". (Mateo 7:12) Jesús enseña la Ley en preceptos a un joven rico: "Entonces vino uno y le dijo: Maestro bueno, ¿qué bien haré para tener la vida eterna? El le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno sino uno: Dios. Mas si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos. Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso testimonio. Honra a tu padre y a tu madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme. Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones" (Mateo 19:16-22) Los dos mandamientos más grandes de la Ley de Dios enseñados por Jesucristo: "Entonces los fariseos, oyendo que había hecho callar a los saduceos, se juntaron a una. Y uno de ellos, intérprete de la ley, preguntó por tentarle, diciendo: Maestro, ¿cuál es el gran mandamiento en la ley? Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. En estos dos mandamientos pende toda la ley y los profetas". (Mateo 22:34-40) Jesucristo es Dios que se hizo Hombre, y su enseñanza (la misericordia y el perdón) es la enseñanza que nos devuelve la verdadera Ley de Dios que realmente había recibido Moisés. Y es que el pueblo de Israel había recibido la Ley en tiempos de Moisés, pero pasados los años, los escribas la habían cambiado y aumentado con muchos preceptos de hombres. Los profetas así nos dicen: "...mi pueblo no conoce el juicio de Yavé. ¿Cómo decís: Nosotros somos sabios, y la ley de Yavé está con nosotros? Ciertamente la ha cambiado en mentira la pluma mentirosa de los escribas" (Jeremías 8:7-9). "Ay de los que dan leyes inicuas y de los escribas que escriben prescripciones tiránicas para apartar del tribunal a los pobres y conculcar el derecho de los desvalidos de mi pueblo, para despojar a las viudas y robar a los huérfanos" (Isaías 10,1-2) "Y la tierra se contaminó bajo sus moradores; porque traspasaron las leyes, cambiaron los mandamientos, quebrantaron el pacto sempiterno" (Isaías 24:5-6). Y Jesucristo, recordando las palabras del profeta Isaías, también les dijo a los escribas y fariseos que estaban enseñando mandamientos de hombres: "Hipócritas, bien profetizó de vosotros Isaías, cuando dijo: Este pueblo de labios me honra; Mas su corazón está lejos de mí. Pues en vano me honran, Enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres". (Mateo 15,7-9 Comprendiendo estos sentimientos de Jesucristo en cuanto a la Ley de Dios, entonces podemos leer el Evangelio y comprenderlo más fácilmente.
|
|
|
|
MANDAMIENTOS ABOLIDOS POR JESUCRISTO
Muchas religiones nos dicen que Jesucristo no había venido a abolir nada de las leyes del viejo testamento, pero esto es un error porque Jesucristo sí abolió muchas leyes del viejo testamento, como podemos ver en los siguientes versículos del Evangelio: Mateo 5:31-48, Mateo 12:1-8, Mateo 20:25-28, Juan 5:8-11, Juan 5:16-18, Juan 8:3-11 y todo el contexto del Evangelio.
Entonces, ¿cuál es la Ley que Jesucristo no vino a abolir?... La Ley que Jesucristo no vino a abolir es la verdadera Ley de Dios, que es la Ley que Él mismo nos enseña en el Evangelio y que así nos dice:
"todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque ésta es la ley y los profetas". (Mateo 7:12) Jesucristo nos dice que ésta es la Ley y los profetas. Entonces, no hay que dudar. Jesucristo es Dios, y su Ley es la verdadera Ley de Dios, y ésta es la Ley que Jesucristo no vino a abolir y es la Ley de la que no ha pasado ni una jota ni una tilde. Ahora bien, del viejo testamento Jesucristo sí que abolió muchos mandamientos, como también lo enseña el Evangelio. Ahora vamos a recordar algunos de esos mandamientos abolidos. "También fue dicho: Cualquiera que repudie a su mujer, dele carta de divorcio. Pero yo os digo que el que repudia a su mujer, a no ser por causa de prostitución, hace que ella adultere; y el que se casa con la repudiada, comete adulterio". (Mateo 5:...) Los judíos de aquel tiempo habían escrito en la ley del viejo testamento que podían separarse de las mujeres por muchos motivos cuando se cansaban de ellas, pero Jesucristo deja abolidas estos mandamientos. Estos mandamientos estaban escritos como ley de Dios en el viejo testamento y Jesucristo los deja abolidos. "Además habéis oído que fue dicho a los antiguos: No perjurarás, sino cumplirás al Señor tus juramentos. Pero yo os digo: No juréis en ninguna manera; ni por el cielo, porque es el trono de Dios; ni por la tierra, porque es el estrado de sus pies; ni por Jerusalén, porque es la ciudad del gran Rey. Ni por tu cabeza jurarás, porque no puedes hacer blanco o negro un solo cabello. Pero sea vuestro hablar: Sí, sí; no, no; porque lo que es más de esto, de mal procede". (Mateo 5:...) Los judíos tenían costumbre de jurar en muchos casos, y así lo dejan escrito en las leyes del viejo testamento... El Señor deja abolidos estos preceptos sobre los juramentos. LA LEY DEL TALIÓN ("Ojo por ojo, y diente por diente") ABOLIDA POR JESUCRISTO "Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente. Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra; y al que quiera ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa; y a cualquiera que te obligue a llevar carga por una milla, ve con él dos. Al que te pida, dale; y al que quiera tomar de ti prestado, no se lo rehúses". (Mateo 5:...) Los judíos tenían la costumbre de aplicar la ley del Talión (la ley de la venganza) en sus juicios (ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie, quemadura por quemadura..., etc.), y así lo dejan escrito en las leyes del viejo testamento (Éxodo 21:24-25). El Señor dejó abolida esta ley del "ojo por ojo y diente por diente" porque era una Ley que no contemplaba el perdón ni la misericordia. "Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo. Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen...." (Mateo 5...) Los judíos, en muchos casos degollaban o ahorcaban a sus enemigos, y no solamente a ellos, sino que luego, como nos dicen las leyes del viejo testamento, entraban en los pueblos vencidos y en muchos casos también degollaban a los niños y a las mujeres..., diciendo que era mandato de Dios. Jesucristo dejó abolidas estas leyes del viejo testamento y nos manda que amemos a nuestros enemigos. Nadie está obligado a ser cristiano, pero los verdaderos cristianos no deben hacer guerras ni matar a sus enemigos. La puerta ancha por la que entran muchos es perseguir y matar a los enemigos. La puerta estrecha por la que no quieren entrar muchos es la misericordia y el perdón, y siempre recordar el mandamiento de Jesucristo: "Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen...." Nos dice el Viejo testamento: "Si un hombre cometiere adulterio con la mujer de su prójimo, el adúltero y la adúltera indefectiblemente serán muertos. (Levítico 20:10) "Y la hija del sacerdote, si comenzare a fornicar, a su padre deshonra; quemada será al fuego". (Levítico 21:9) No es eso lo que hizo Jesucristo con la mujer adultera en el Ejemplo del Evangelio: "Entonces los escribas y los fariseos le trajeron una mujer sorprendida en adulterio; y poniéndola en medio, le dijeron: Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en el acto mismo de adulterio. Y en la ley nos mandó Moisés apedrear a tales mujeres. Tú, pues, ¿qué dices? Mas esto decían tentándole, para poder acusarle. Pero Jesús, inclinado hacia el suelo, escribía en tierra con el dedo. Y como insistieran en preguntarle, se enderezó y les dijo: El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella. E inclinándose de nuevo hacia el suelo, siguió escribiendo en tierra. Pero ellos, al oír esto, acusados por su conciencia, salían uno a uno, comenzando desde los más viejos hasta los postreros; y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba en medio. Enderezándose Jesús, y no viendo a nadie sino a la mujer, le dijo: Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te condenó? Ella dijo: Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques más"(Juan 8). Con esta enseñanza, Jesucristo dejó abolidos los mandamientos del viejo testamento que mandaban matar a las personas por diversas causas. Hasta aquí hemos recogido algunos ejemplos de mandamientos del viejo testamento que Jesucristo abolió, pero la discusión que mantuvo Jesucristo con los judíos por causa de la ley es mucho más amplia y a esta discusión está dedicada una gran parte del Evangelio. Jesucristo nos enseñó la verdadera Ley de Dios. Jesucristo abolió muchas leyes del viejo testamento, y para comprobar esto, se pueden leer los siguientes versículos del Evangelio: Mateo 5:21-48, Mateo 12:1-8, Juan 5:8-11, Juan 5:16-18, Juan 8:3-11 y todo el contexto del Evangelio. SOBRE LA LEY DEL DÍA DE REPOSO DEL VIEJO TESTAMENTO: Nos dice el viejo testamento: "Estando los hijos de Israel en el desierto, hallaron a un hombre que recogía leña en día de reposo. Y los que le hallaron recogiendo leña, lo trajeron a Moisés y a Aarón, y a toda la congregación; y lo pusieron en la cárcel, porque no estaba declarado qué se le había de hacer. Y Yavé dijo a Moisés: Irremisiblemente muera aquel hombre; apedréelo toda la congregación fuera del campamento. Entonces lo sacó la congregación fuera del campamento, y lo apedrearon, y murió, como Yavé mandó a Moisés". (Números 15:32-36). No es eso lo que nos mandó Jesucristo: "En aquel tiempo iba Jesús por los sembrados en un día de reposo; y sus discípulos tuvieron hambre, y comenzaron a arrancar espigas y a comer. Viéndolo los fariseos, le dijeron: He aquí tus discípulos hacen lo que no es lícito hacer en el día de reposo. Pero él les dijo: ¿No habéis leído lo que hizo David, cuando él y los que con él estaban tuvieron hambre; cómo entró en la casa de Dios, y comió los panes de la proposición, que no les era lícito comer ni a él ni a los que con él estaban, sino solamente a los sacerdotes? ¿O no habéis leído en la ley, cómo en el día de reposo los sacerdotes en el templo profanan el día de reposo, y son sin culpa? Pues os digo que uno mayor que el templo está aquí. Y si supieseis qué significa: Misericordia quiero, y no sacrificio, no condenaríais a los inocentes; porque el Hijo del Hombre es Señor del día de reposo". (Mateo 12:1-8) "Jesús le dijo: Levántate, toma tu lecho, y anda. Y al instante aquel hombre fue sanado, y tomó su lecho, y anduvo. Y era día de reposo aquel día. Entonces los judíos dijeron a aquel que había sido sanado: Es día de reposo; no te es lícito llevar tu lecho. El les respondió: El que me sanó, él mismo me dijo: Toma tu lecho y anda" (Juan 5:8-11) "Y por esta causa los judíos perseguían a Jesús, y procuraban matarle, porque hacía estas cosas en el día de reposo. Y Jesús les respondió: Mi Padre hasta ahora trabaja, y yo trabajo. Por esto los judíos aun más procuraban matarle, porque no sólo quebrantaba el día de reposo, sino que también decía que Dios era su propio Padre, haciéndose igual a Dios". (Juan 5:16-18)
Jesucristo no había venido a abolir la Ley, pero la verdadera Ley de Dios, pues, como nos enseña el Evangelio y como hemos visto, Jesucristo sí que abolió los mandamientos de penas de muerte, guerras y esclavitud del viejo testamento.
|
|
|
|
JESUCRISTO, que ES DIOS que SE HIZO CARNE, dio la vida por sus hijos enseñándoles los mandamientos que en verdad habían sido dados por Él mismo desde siempre y para siempre, y dejando anulados los mandatos del Antiguo Testamento que no eran más que mandatos de hombres.
Pero después, el imperio romano en el siglo IV, con sus biblias, volvió a imponer al mundo los escritos del Antiguo Testamento que contenían los mandatos que Jesús había anulado, e impusieron la creencia de que Dios había dado esos mandatos. Así, la confusión volvió al mundo.
Si los cristianos fueran fieles a lo que enseña el Evangelio, comprenderían que los mandamientos que en verdad fueron dados por Dios desde siempre y para siempre, son los mandamientos que Jesús nos enseñó cuando predicó el Evangelio. Y entonces habría menos confusión en el mundo.
|
|
|
|
|
Esto es lo que habían hecho los hombres codiciosos con la Ley de Dios, habían abandonado La Ley de la paz dada por Dios desde el principio y se habían entregado a las leyes de la guerra escritas en el viejo testamento... Jesucristo nos volvió a entregar la verdadera Ley de Dios, pero los hombres codiciosos después de Jesucristo se volvieron de nuevo a las leyes de muerte del viejo testamento que Jesucristo había abolido con la enseñanza del Evangelio y con su dolor cuando le crucificaron... El Mundo con sus armas y sus ejércitos preparados para la guerra (para servir a la Bestia) puede sufrir grandes enfrentamientos armados que pueden traer mucho dolor a los pueblos de la tierra... Sólo Jesucristo (las enseñanzas misericordiosas del Evangelio) puede salvarnos de este gran desastre que amenaza a las naciones... |
|
|
|
De: Rolmen
|
Enviado: 01/08/2017 10:11 |
Dice María Laura: LOS QUE NO GUARDAN LA LEY DE CRISTO, NO ESTÁN BAJO LA GRACIA NI TIENEN GRACIA
LOS QUE NO GUARDAN LA LEY DE CRISTO, NO ESTÁN BAJO LA GRACIA NI TIENEN GRACIA (misericordia)
No están bajo la gracia los que no guardas los mandamientos que el Señor Jesús manda guardar, porque la Gracia vino por Jesucristo, y Él nos enseñó los mandamientos que se deben guardar para entrar en la vida, porque Él mismo lo dijo:
Mateo 19 Mas si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos. 19:18 Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso testimonio. 19:19 Honra a tu padre y a tu madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo. 19:20 El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? 19:21 Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme. 19:22 Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones. 9:23 Entonces Jesús dijo a sus discípulos: De cierto os digo, que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos. 19:24 Otra vez os digo, que es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios. Entonces, están muy equivocados los que piensan que no tienen mandamientos que guardar, porque Jesús, cuando predicó el Evangelio, enseñó los mandamientos del Evangelio para que se guardaran, no para que se olvidaran ni se ignoraran.
|
|
|
|
CONDENACIÓN DE LA GRAN BABILONIA DEL TIEMPO DEL FIN Las señales que nos entrega esta profecía nos hacen pensar que nos avisa de los acontecimientos que el mundo ha vivido, está viviendo y vivirá en este año (2017) y en los años próximos que se pueden suceder si Dios quiere. Para muchos grupos religiosos, esta profecía de la Gran Babilonia se refiere a la religión de los emperadores de Roma, los cuáles impusieron su religión desde el siglo IV, religión a la que llamaron "cristiana" . Esta religión de los emperadores de Roma fue un imperio terrible en los tiempos de la Edad Media y siglos posteriores, pues impuso sistemas de terror y de inquisiciones que dejaron aterrorizado al mundo..., pero aquel poder religioso ya cayó y con él también cayó su poder babilónico... En estos últimos siglos han aparecido otros imperios mucho más poderosos que aquel viejo imperio de Roma, y en fin, cada religión quiere ver en sus enemigos el imperio profetizado de la Gran Babilonia... Pero la profecía aún está presente esperando que los hombres de buena voluntad encuentren el sentido de todas sus señales para poder descubrir quién es la gran Babilonia y el porqué de su destrucción que parece muy próxima. |
|
|
|
¿QUÉ MANDAMIENTOS DEBEMOS SEGUIR LOS CRISTIANOS PARA ENTRAR EN LA VIDA?
(Tema de Laura)
El Señor Jesús así nos dijo:
Mateo 7:12 todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque ésta es la ley y los profetas.
Jesús también nos enseña los mandamientos de la Ley de Dios que debemos guardar para entrar en la vida, pues a un hombre que le pregunto a Jesús por los mandamientos que debemos guardar para entrar en la vida, Jesús le dijo así:
Mateo 19:16-22 Mas si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos. Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso testimonio. Honra a tu padre y a tu madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme. Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones.
A los hombres codiciosos que se hacen dueños de muchas posesiones les cuesta muchísimo entregar sus riquezas a los pobres. Igualmente les cuesta mucho cumplir con los demás mandamientos de Jesús, y entre ellos el que les manda: "NO MATARÁS".
|
|
|
|
¿QUÉ MANDAMIENTOS DEBEMOS SEGUIR LOS CRISTIANOS PARA ENTRAR EN LA VIDA?
(Tema de Laura)
El Señor Jesús así nos dijo:
Mateo 7:12 todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque ésta es la ley y los profetas.
Jesús también nos enseña los mandamientos de la Ley de Dios que debemos guardar para entrar en la vida, pues a un hombre que le pregunto a Jesús por los mandamientos que debemos guardar para entrar en la vida, Jesús le dijo así:
Mateo 19:16-22 Mas si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos. Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso testimonio. Honra a tu padre y a tu madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme. Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones.
A los hombres codiciosos que se hacen dueños de muchas posesiones les cuesta muchísimo entregar sus riquezas a los pobres. Igualmente les cuesta mucho cumplir con los demás mandamientos de Jesús, y entre ellos el que les manda: "NO MATARÁS".
|
|
|
|
...
Las cartas atribuidas a Pablo fueron torcidas por los indoctos, como nos dice el apóstol Pedro: "...Pablo, según la sabiduría que le ha sido dada, os ha escrito, casi en todas sus epístolas, hablando en ellas de estas cosas; entre las cuales hay algunas difíciles de entender, las cuales los indoctos e inconstantes tuercen, como también las otras Escrituras, para su propia perdición. Así que vosotros, oh amados, sabiéndolo de antemano, guardaos, no sea que arrastrados por el error de los inicuos, caigáis de vuestra firmeza. Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo". (2ª Pedro 3:15-18 Como puedes ver, el apóstol Pedro te dice que si no quieres ser confundido por las cartas torcidas de Pablo, que crezcas en el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. Esto es lo que dejó escrito Pedro sobre las cartas de Pablo, que los indoctos las torcían y por eso debemos crecer en el conocimiento de Nuestro Señor Jesucristo, esto es, el Evangelio... Y el mismo Pablo, sintiendo que sus cartas podían ser torcidas o mal interpretadas para predicar cosas contrarias al Evangelio, también nos dice: "Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente. No que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y quieren pervertir el evangelio de Cristo. Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema. Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema". (Gálatas 1:6-9). Pablo también nos avisa que tengamos cuidado con las cartas atribuidas a él: "no os alborotéis tan fácilmente, perdiendo el buen sentido, ni os alarméis con motivo de ciertas inspiraciones o afirmaciones ni por carta como si fuera nuestra..... Nadie os engañe en ninguna manera".(2ª Tesalonicenses 2:2-3). ------------------------------------------------------------------------------------------------------------------ FORNICACIÓN no tiene que ver con los temas sexuales sino con la idolatría...... Jesucristo no predicó nada en contra de la sexualidad, ni en contra de los deseos sexuales, pues Jesucristo, que es Dios, centró todo su mensaje en la misericordia, en el amor, en el perdón y en el reparto de los bienes con igualdad. Ahora recordaré la Ley de Dios y sus misericordiosos mandamientos para que puedas comprobar que Jesucristo no dijo nada en contra de la sexualidad ni de los deseos sexuales siempre que se viva todo con misericordia, esto es, siguiendo siempre la misericordia. La verdadera Ley de Dios es la que Jesucristo nos enseñó en el Evangelio, que así nos dice: "todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque ésta es la ley y los profetas". (Mateo 7:12) Jesús también enseña los verdaderos mandamientos de la Ley de Dios que debemos guardar para entrar en la vida y que así nos dicen: "Mas si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos[/SIZE]. Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso testimonio. Honra a tu padre y a tu madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme. Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones. Entonces Jesús dijo a sus discípulos: De cierto os digo, que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos. Otra vez os digo, que es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios" (Mateo 19:16-24)
A los hombres codiciosos que se hacen dueños de muchas posesiones les cuesta muchísimo entregar sus bienes a los pobres. Ellos no quieren el camino de la misericordia y prefieren imponer sacrificios y esclavitud a los pobres. Por eso, Jesucristo también les dijo: "... si supieseis qué significa: Misericordia quiero, y no sacrificio, no condenaríais a los inocentes" (Mateo 12:7 ) "Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo". (Mateo 22:34-40) El Señor no mandó que se mate a las personas que cometen faltas, sino que se les perdone, pues el Evangelio así nos dice: "Entonces se le acercó Pedro y le dijo: Señor, ¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí? ¿Hasta siete? Jesús le dijo: No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete". (Mateo18:21-22) "Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; mas si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas". (Mateo 6:14) Como puedes ver, Jesucristo no habló nada en contra de los deseos sexuales naturales que Dios ha puesto en las personas. Vivir los deseos sexuales naturales que Dios ha puesto en las personas mayores de edad es vivir con misericordia, y no debemos olvidar que lo que Dios quiere es la misericordia: "... si supieseis qué significa: Misericordia quiero, y no sacrificio, no condenaríais a los inocentes" (Mateo 12:7 ) Para las personas mayores de edad es un sacrificio no poder vivir sus deseos sexuales. Y Dios no quiere sacrificios. Lo que Dios quiere es misericordia. ...
|
|
|
|
De: Porque77 (Mensaje original)
|
Enviado: 10/03/2014 23:16 |
¿ EL EVANGELIO ... O LAS BIBLIAS ? ¿QUÉ NOS MANDÓ PREDICAR JESUCRISTO? ¿CUAL ES EL CAMINO VERDADERO?... ¿Qué mandó predicar Jesucristo? ¿las leyes del viejo testamento? ¿las cartas atribuidas a Pablo? ¿las biblias impuestas por las religiones? ¿o el Evangelio?... Jesucristo nos mandó predicar el Evangelio por todos los pueblos del mundo... El Evangelio así nos dice: "Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado". (Marcos 16:15-16).
=========================
Jesucristo mandó predicar sólo el Evangelio, pero muchas religiones que dicen ser cristianas, se empeñan en predicar todo lo escrito en las biblias, y enseñan a sus seguidores que todo en las biblias es palabra de Dios o inspirado por Dios. Se olvidan que Jesús anuló muchos mandatos del Antiguo Testamento porque no eran más que mandatos de hombres.
|
|
|
|
JESUCRISTO SE ME HA MANIFESTADO Y ME HA AMADO... (Visiones y manifestaciones del Señor)
Un día, ya muy cansado de buscar la verdadera enseñanza y los verdaderos mandamientos de mi amado Señor Jesucristo, se me manifestó el Señor en una visión: "El Señor, con mucho amor, puso sus manos sobre mis hombros, y así me sentí amado y bendecido por Él por unos momentos... Enseguida sentí que detrás de mí se acercaba mucha gente. Yo miré, y vi los campos llenos de gente que venía con odio y con rabia buscando a Jesucristo para matarlo... Era como si el mundo entero se hubiera vuelto loco de odio contra Jesucristo. Yo estaba en un puente, y la parte baja del puente terminaba en los campos donde venia el mundo en manifestación contra Jesucristo... En la parte alta del puente había un palacio donde entró Jesucristo con los amigos que le acompañaban, y se cerró la puerta.
|
|
|
|
Dios dio una ley sencilla a su pueblo en tiempos de Moisés para que vivieran en paz. Una ley de misericordia el Evangelio.
Pero los escribas falsos del pueblo la cambiaron por falsedad. El Señor a través de los profetas como Isaías nos dice que su pueblo no conoce el juicio de yhave me Su ley. Y ahora en estos tiempos pasa exactamente lo mismo el mundo no conoce la Ley de Jesucristo que es el Evangelio. |
|
|
Primer
Anterior
2 a 13 de 73
Siguiente
Último
|