ORACIÓN
Que maravilloso es tener los brazos abiertos, cuando hay tantos mutilados. Mis
ojos ven, cuando hay tantos sin luz. Mi voz canta, cuando hay tantos que
enmudecen. Mis manos trabajan, cuando hay tantos que mendigan.
Es maravilloso ir a casa, cuando hay tantos que no tienen a donde ir. Es
maravilloso vivir, amar, soñar, sonreir, cuando hay tantos que lloran, que odian
y revuelven en pesadillas, y tantos que mueren antes de nacer.
Es maravilloso tener un Dios en quién creer, cuando hay tantos que no tienen
consuelo ni tampoco fe.
Es maravilloso tener tan poco que pedir y tanto que agradecer.
¡Señor! Danos un corazón grande para amarte y fuerte para luchar.
Gracias te doy Padre mio, por este precioso amanecer en el cuál nuestro
espíritu turbado del día anterior despierta ya fortalecido por Ti, que estos
recuerdos que traigo me sirvan para no continuar en los mismos errores.
Padre, Dios Todopoderoso y Eterno, te ruego de todo corazón que me concedas
tu santa bendición, que sea la cruz, el cruce de nuestras materias y que todo lo
malo que quiera venir hacia nosotros sea devuelto de donde venga.
Muchas gracias por todo lo que recibo de Ti sin merecerlo, en el nombre de Jesús,
amén.
|