Crea en mi oh Dios un corazón limpio
y renueva un espíritu recto dentro de mi”. Salmo 51:10.
Cuando desperté esta mañana, me quedé
meditando en mi lecho acerca de que
cosa es lo más importante para mi en este día.
Será acaso hacer un buen trabajo?
Será luchar y luchar para ser reconocido?
Acaso es mantener mi apariencia
para que todos los que me rodeen puedan alabarme?
Seguí pensando y pensando, acerca
de lo más importante y de pronto,
mi mente fue sacudida por las palabras
de un verso que la noche anterior había
leído. Una oración hecho por un hombre
que había sido casi destruido por su pecado.
El Rey David, oró con angustia de alma
y quebranto de espíritu y dijo: Oh Dios
crea en mi un corazón limpia y
renueva un espíritu recto dentro de mi.
Mi mente se aclaró, me levante inmediatamente
de la cama y levante mis manos al cielo para decirle al Padre.
Eso..Oh Padre, eso es lo más importante en
este día para mi.. Crea en mi oh Dios
un corazón limpio y renueva un espíritu
recto dentro de mí. Hoy, me decido a
pedir un corazón limpio y un espíritu recto.
Tener un corazón limpio es disfrutar de la
obra de Cristo aplicada a mi corazón y un
espíritu recto es el espíritu que no se desvía
tras las vanidades y placeres de este mundo,
más su conexión perfecta esta en Dios su
creador. .
Si hoy camino por la vida con un
corazón limpio y un espíritu recto dentro de
mi, entonces tendré una vida limpia y una
vida recta. Ingredientes esenciales para
desenvolverme manteniendo el equilibro
en un mundo sucio y totalmente torcido.
Nuevamente dirijo mi voz al cielo para decir
como el salmista, Crea en mí un corazón limpio
y renueva espíritu recto dentro de mí. Eso
cambiará la perspectiva de la vida.
“Padre celestial. Hoy tengo que caminar en
medio de mundo lleno de influencias
negativas, secularismo, materialismo,
farisaísmo e incredulidad. Úngeme con
el aceite fresco de tu Espíritu y crea en
mí un corazón limpio y renueva un espíritu recto dentro de mi.
Poseé con tu gracia y amor cada facultad
de mi ser. Que los pensamientos que
fluyan de mi mente hoy, las palabras
que se desprendan de mis labios, los
pasos que marquen mis pies y mis
hechos sean hoy la demostración viva
de un corazón limpio y un espíritu recto dentro de mi.
He sido oprimido y estrechado por toso
lados, pero en ti he encontrado la limpieza
y la rectitud que mi alma necesita hoy.
Con un corazón limpio y un espíritu recto
dentro de mí enseñaré a los transgresores
tus caminos y los pecadores se convertirán a ti. Amen.