Alma es ese Aspecto de Dios por virtud del cual Él es capaz de
individualizarse a Sí mismo. La palabra “individual” significa indiviso.
La mayoría de la gente parece pensar que significa “separatividad”
pero está en un error. “Individuo” quiere decir indiviso, y Dios tiene
el poder de individualizarse a Sí mismo.
Todos somos, en realidad, una individualización de Dios. Sólo Dios
puede individualizarse a Sí mismo en un número infinito de unidades
de conciencia, y, sin embargo, no estar separado en forma alguna.
La materia no puede ser individualizada. Sólo puede ser
desmenuzada. Así que tu verdadero ser –el Cristo Interno,
el hombre espiritual el “Yo Soy” o la chispa Divina, como
es llamado en diferentes formas – es una individualización
de Dios. Eres la Presencia de Dios allí donde te encuentras.
Bien puede el hombre ser comparado con una bombilla eléctrica.
La corriente eléctrica está presente en todas las partes del
circuito, pero brilla –o podría uno decir figuradamente que se hace
auto-consciente- en la bombilla. Así la Mente Divina se hace
auto-consciente en ti.
Cuando eres llamado a llevar a cabo alguna tarea o asumir alguna
responsabilidad que parece demasiado grande para ti, realiza
que eres uno con Dios y la tarea se convertirá en
“Nuestra cuestión” en vez de “mi cuestión”.
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