Que nadie te
detenga en realizar tus sueños,
en dar un
paso, en experimentar de nuevo.
Que nadie te
detenga en expresar sentimientos,
en alzar las
alas y realizar alto vuelo.
Que nadie te
detenga ante quitarte el miedo,
a tomar
valor y luchar día y noche con consuelo.
Que nadie te
detenga por llorar por dentro,
por
sentir, iluminar y pisar firme de
contento.
Que nadie te
detenga para llegar a buen puerto,
para hacer
realidad aquello que fue sólo deseo.
Que nadie te
detenga en alzar tu alto vuelo,
en decidir,
comenzar, reintentar, nuevo acceso.
Que nadie te
detenga en encender tu ilusión,
en abrir las
puertas hacia la vida y el amor.
Que nadie te
detenga por ser como es tu son,
por
acompañar la vida a tu ritmo y tu impresión.
Que nadie te
detenga, no, que nadie sea pasión,
pues la
pasión pasa y queda vacío y gran desilusión.
Que nadie te
detenga, que nadie rompa tu candor,
que nadie
vaya en tu contra, pues dale su adiós.
Que nadie te
detenga, que nadie rompa tu amor,
pues con el
corazón tierno, fracasa el temor.
Autora: Rosa
Mª Villalta Ballester