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♦ 「 cαяdιиαl del ғυeԍσ 」: ღ Blessés← [Libre]
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Le escuchó entre sollozos mientras Brisa hablaba, tranquilizándolo nuevamente con su voz
suave, el niño esnifando ocasionalmente, sus labios curvados en una mueca de llanto. Ella
fue acercándose un poco, extendiéndole la mano, y el niño le miraba y volvía su mirada a
la mano extendida. "Te parece si volvemos para buscar a tus papás?" volvió a verla,
empezando a creer sus palabras, y dudoso empezó a acercarse lentamente, estirando su
mano para alcanzarla, pero se detuvo a medio camino. "P-pero... su mascota..." se
recogió un poco, recordando la imagen del grief de Brisa "E-es muy grande... me da
miedo..." se cubrió con el abrigo, temblando. Luego de un rato se descubrió un poco "M-
e comerá...?" sus ojos se llenaron de lágrimas nuevamente.
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Frunció su ceño mirandolo -Lei... te aseguré que nadie te haría daño, verdad? -sonrió mirandolo dulcemente.
escondiendose en su propia campera se veía muy tierno. Se acercó a él, de rodillas, quedandose a su lado mirandole desde su misma altura.
Acarició la cabeza cubierta del niño y su sonrisa no se borraba. Agarró una manga de la campera para limpiar un poco su rostro, siempre con
movimientos sutilez, y suaves, dejando algo más que una piel más limpia, más una sutil caricia -Sabes guardar promesas? Lei? -sonrió y le
estrechó su dedo meñique- Te prometo que no voy a lastimarte nunca....-susurró sonriendo. Esperando que el pequeño haga lo mismo.
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 Cuando se asomó se encontró con la chica aún más cerca, arrodillada a su pequeña altura, siempre sonriéndole.
El niño le veía triste, y se estremeció un poco cuando sintió la mano cálida acariciarle a través del abrigo, relajándose
enseguida a la caricia. Así mismo, lentamente fue limpiándole el rostro del lodo que llevaba, de las lágrimas que
empezaban a detenerse. El niño se mantenía calmo, salvo por las inhaladas fuertes que daba para tranquilizarse,
empezando a tenerle confianza a Brisa.
"Sabes guardar promesas? Lei?" asintió levemente algo confundido al principio, intercambiando miradas entre el
rostro de la chica y su menique extendido "Te prometo que no voy a lastimarte nunca...". Las palabras de la chica
se oían muy sinceras y sentía que sí podía confiar en ella. Hasta dónde llegará ese 'nunca'?
Asintió levemente, y decidió formar la promesa, extendiendo tímidamente su meñique, entrelazándolo al fin con el
de la chica. Sonrió levemente por el acto, ya más tranquilo, aunque aún se veía algo dudoso
".. si los encontraremos, verdad...?"
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Sonrió entrelazando como pudo su dedo con el del menor. Como pudo, pues los tamaños no se comparaban. Se pudo de pié lentamente mirando al niño con amor- Vamos a hacer lo posible por encontrar a tus padres... mm? Como se llaman ellos? -Preguntó para sacar charla al pequeño, sabía que generalmente el silencio les pondrian nerviosos, aunque no le conociera completamente. Antes de dar un paso hacia donde habian venido, miró al cielo. Sabía que Cler estaría esperandola sobre la copa de los arboles, y que posiblemente fuera una amenaza para la tranquilidad de Soleil -Queres que te alze Lei? -se inclinó para mirarlo de cerca- Tu pie está bien? -sus manos se acercaron suavemente hasta las axilas del niño, con el fin de alzarlo y llevarlo a cuestas, sin embargo primero esperó que el niño le respondiera. |
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Siguió a Brisa con ojos grandes y atentos, aunque algo hinchados por lo que había llorado. "Vamos a hacer lo posible por encontrar a tus padres... mm?" él asintió, respondiéndole a su pregunta "Mi mamá se llama Claire y y mi papá se llama Maurice...", pero la chica al parecer estaba ocupada viendo hacia arriba y no le atendió. El grief aún seguía rondando el lugar...
Ya cuando la chica volvió su atención se inclinó hasta su nivel, tomándolo bajo sus hombros para cargarlo. El niño se movió un poco, y simplemente negó con la cabeza, frunciendo el ceño levemente haciendo un puchero. Según él era un rostro decidido. "Yo estoy bien, yo soy valiente!" al parecer lo que la chica le dijo si le aumentó la confianza... "Uhm..." el niño parpadeó un par de veces frunciendo el ceño en profunda concentración, y decidió que sería mejor ir de la mano con ella. Al parecer su valentía no llegaba a tanto.
El ruido de la lluvia aumentando cada vez más, y el sonido del aleteo del grief eran ensordecidos por el follaje de los árboles, y lo único que se podían escuchar eran sus voces y sus pasos a través de la maleza. El niño se aferró más a la mano de Brisa, mientras en el bosque cada vez se dificultaba más poder observar. El lugar estaba tan oscuro que ni la persona más orientada podría orientarse sin ayuda de alguna luz, y no sería raro que en ese momento estuvieran adentrándose más en el bosque. Una pequeña niebla empezaba a levantarse, y el follaje empezaba a verse uniforme, haciendo difícil distinguir el camino.
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Apartó sus manos en cuanto notó que aquella idea de cargarlo no le habia gustado pero sonrió ampliamente cuando el pequeño, decidido dijo aquello haciendo asentir a la rubia. Entusiasmada.
La vista casi se hacia imposible en aquella espesura del bosque, los ruidos a ramas que se quebraban al pasar, y el relieve extremadamente dificil, hacía que los dos se obliguen a hacer pasos muy exagerados para saber exactamente donde pisar.
Por el mismo lugar que habian recorrido, la mayor volvió sobre sus pasos gracias a la aguda conexión con su mascota, que le permitia oir y sentir los aleteos del animal, e incluso aquello le mostraba la salida. -Cler! -alzó la voz para que el ave la escuchase- Guianos a la salida! -Pidió escuchandose la voz comprimida dentro del casco que se formaba en las alturas en donde la copa de los arboles evitaba la visión del cielo. Se sintió segura pues el animal, obediente e inteligente emitió un grito que conducia por un camino un poco diferente del que ella guiaba al niño -Ven Lei... Es por ahi, cuidado con los troncos caidos - Su mano se aferró a la ajena, mucho más pequeña que la de ella, e incluso con la otra mano no pudo evitar tocar el hombro del niño, para ayudarlo a caminar entre diversidad de suelos que pisaban.
Su brazo se lastimó con una rama que rozó sin ver y apenas se quejó. No queria que el menor pase un mal momento preocupandose por ella ni mucho menos. A unos pocos metros de la salida, el grunido de Cler se oyó sobre el suelo. El Grief ya estaba sobre el camino.
El piso empezó a indundarse, cubriendo de agua los pies de ambos -Lei.. Dejame cargarte, el camino es muy peligroso....-Pidió al menor deteniendo sus pasos.
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 Ichi-Chiku sería, facilmente, uno de sus distritos predilectos. Era elegante, rico, lleno de mansiones grandes y propiedades de terreno extensas. Y a pesar de estar entre sus lugares favoritos en todo el imperio, tenía ya bastante tiempo que no lo visitaba. De cualquier manera, el lugar parecía no haber cambiado demasiado. Alguna familia de nobles se habría ido y otra habría llegado, pero los muros de los palacios y el inmutable bosque seguían allí. Miró directamente al lago, por el que en sus orillas ahora se paseaba, lentamente. De alguna manera su vida -y no vida- siempre se veían directamente ligadas al agua, y aún estando en un distrito de riquezas, se encontraba allí mirando su no-reflejo en el agua. Esuchó un distante 'splash' y dirigió su mirada hasta la figura de una sirena y su dragón en el agua. ¿Una sirena en el cardinal del fuego? arqueó una cejay sonrió para sí. Podía detestar el agua, pero vaya que le interesaban las sirenas. Estaba seguro de que alguna sabría donde estaba él...físicamente, bueno. Se esforzó para parecer tan corpóreo como pudo -engañaría a cualquiera siempre que no tratasen de tocarlo- y se acercó "caminando" tranquilamente hasta el dragón y la chica.
"Soy completamente casi inocente esta vez" alcanzó a escuchar que decía la sirena, quien ahora le daba la espalda. "¿Casi inocente de qué cosa? ...si puedo saber~" preguntó, con humor evidente en la voz.
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esque esque leil ;A; <3
anyways, me he metido u.ú failmentex'D |
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El lugar empozado y lleno de ramas era difícil de andar, y algunas veces tropezaba un poco, haciendo que el brazo de la chica se estire para no hacerle caer de lleno, aunque la pobre campera de la chica no tenga una mejor suerte, con sus extremos largos topando el piso y terminando empapados y enlodados. Tal vez sí hubiese sido mejor que lo lleve cargado...
Lei elevó la vista hacia ella aunque no podía verla claramente, y ella llamaba a su greif para mostrarles el camino correcto. El niño solamente aferró un poco más fuerte la mano de la chica; aún no confiaba en el grief. Claro que no.
Continuaron en el nuevo camino, y el agua estaba más empozada, provocando que se detengan. La chica volvió a él, ofreciendo nuevamente cargarlo. El niño bajó la mirada un poco, dudoso, pero al final cedió. Estiraba sus brazos, y estaba a punto de ser cargado por la chica, pero justo en el último instante Lei retrocede un poco, ahogando un grito. "!!" empezó a voltear hacia todos lados, buscando algo. "E-escuché que me llamaron..." dijo con voz baja, llevándose las manos a los oídos en forma de arco para poder captar mejor los ruidos lejanos. El casi absoluto silencio en el lugar le ayudaba un poco, pero aún así el niño dio unos pasos hacia atrás pero sin alejarse por completo de la chica, tratando de escuchar mejor lo que había escuchado. Hasta que al fin lo captó. Con unas voces muy lejanas, un pequeño grupo de personas se podían escuchar diciendo 'Lei, Lei' buscando al niño. "Son ellos!" le dijo algo emocionado el niño, tomando de la mano a la chica "Son mis papás!!" Empezó a halar de la mano de la chica en dirección a los llamados, verdaderamente alegre. |
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- ¿Casi inocente de qué cosa? ...si puedo saber~ -
No habia terminado de escuchar su voz cuando me habia caido de nuevo a al lago, aunque esta vez fue solo a la orilla.
Sui gruño colocandose delante de mi y y gruñendole al extraño, yo temblaba viendolo increiblemente asustada, era un hombre, siempre tenia esa reaccion con ellos, no odia moverme mi cuerpo se negaba a obedecer y escuchaba la tonada de Sui regañandome, ligada con otra que sonaba... nostalgica y perdida, pero a la vez animada y decidida.
No se como hice para mirar al extraño chico pero apenas lo hice senti un escalofrio recorrer mi espalda, me abrace a mi misma esperando que asi se calmaran los temblores.
Nowe <3~~ el acosador vuelve a atacar (?)
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Sus ojos se abrieron más cuando el niño se movió precipitadamente asegurando que habia escuchado a sus padres. Agudizó su oido para ver si podia oir algo, alguna palabra, alguna letra, alguna voz, algo... Que le demuestre que verdaderamente habia alguien más allá y no era una alucionacion de Lei debido a la ansiedad de encontrar a su familia. Al no oir nada miró al pequeño "Son ellos! Son mis papás!!" Preocupada y levemente desconfiada de lo que decia la criatura, al ser jalada solo ejerció un poco de fuerza para no caminar fuera de la salida y miró a Lei con rostro serio- No es bueno que nos alejemos del camino, si vamos para allá quizas nos perdamos más que ahora, ademas el camino es muy peligroso -hizo una pausa, sus ojos miraban al pequeño tratando de hacerle enteder y no sonar poco comprensiva- Sé que quieres verlos, pero lo mejor es esperar que ellos vengan a nosotros, no tenemos que precipitarnos- Sus manos volvieron a las axilas del morocho- Deja que te cargue a la salida Lei -Dijo sin ninguna sonrisa en su rostro, pero con la mirada algo triste, dispuesta a alsarlo. |
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Seguía halando de la mano de la chica, pero esta no se movía para nada. Volvió a ella con rostro algo desesperado y confundido "Pero allá están!! Son ellos!!", prácticamente le imploró, sus ojos empezando a aguarse. Pero la chica le miró mostrando que le comprendía, y le explicó con calma al niño sus razones. Lei escuchó atento. "Sé que quieres verlos, pero lo mejor es esperar que ellos vengan a nosotros, no tenemos que precipitarnos". Soltó la mano de la chica, pero no se alejó, sólo bajó la mirada, y algo resignado aceptó, dando un último vistazo al lugar donde provenían las voces, donde el sonido de ramas moviéndose y de las voces llamando al pequeño se hacían más claros.
Esta vez si se dejó cargar por Brisa, y al estarlo se abrazó fuerte a ella, mirando hacia atrás, esnifando levemente. El niño se sentía caliente contra la chica, afiebrado.
Cerca de la salida el niño perdió fuerza en el agarre, quedando inconsciente. Y en ese instante empezó a desprenderse del cuerpo del niño una pequeña figura transparente, un fantasma. Antes de que la chica pueda reaccionar el pequeño fantasma ya había volteado hacia ella, poseyéndola. No tocaría su mente ni nada, solo controlaría sus movimientos por un instante y luego la dejaría en paz, como tomar algo prestado~ Podía haberse quedado un rato más en el niño, pero no era lo adecuado, viendo como actuaba la reichmaske. Y podrá quedarse tranquilamente un rato corto en la chica antes de ser expulsado, pero será lo suficiente.
Caminó con los pasos de Brisa, desviándose ligeramente de la salida donde le esperaba Cler, caminando rápidamente sin importarle rasgarse con las ramas. Salió de la espesura del bosque, y todos los alrededores del lago ya estaban cubiertos con niebla.
Aún caminaba con el niño inconsciente en brazos y no se detenía por nada, ni al pisar la orilla del lago se detuvo. Splash, splash, se oyó levemente cuando ambos se hundieron en el lago, y ninguno de los dos hacía algo para resurgir.
Unos cuantos segundos pasaron y el fantom al fin salió del agua sin estar siquiera húmedo. Soleil se asomó hacia el lago aunque la niebla no dejara ver mucho. Se había asegurado de permanecer lo más que pudo hundiéndose para que ninguno de los dos salga con vida de allí, soportando la presión del agua y la desesperación de faltarle el aire... en fin, no era él quien lo soportaba~ Uh, pero sí fue difícil soportar estar en su cuerpo; la chica se resistía bastante, pero su control y su habilidad para bloquear no eran tan fuertes como las del fantom. Pero por si acaso, antes de salir la dejó hirviendo por dentro para que no tenga ganas siquiera de salir nadando; el agua allí abajo estaba más fresquita~ Hihihi~
Echó un último vistazo hacia el lago antes de retirarse, flotando porque verdaderamente no necesitaba de caminar, su imagen transparente confundiéndose con la niebla, y la lluvia que caía mantenía su intensidad. |
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Sus ojos abiertos, parpadeando irregularmente con la mirada fija en la nada y su cuerpo sumergido en el agua, dejandose arrastrar por la presión del lago. El tiempo pareció detenerse mientras estaba cada vez más lejos de la salida, y a la vez estando tan al límite -Estoy muriendo.....- Se dijo, y aunque así fuera parecía conciente aun, conciente de la traición, la crueldad, la desconfiaza, la piedad de los seres a quien intentaba aceptar y entender -Mi amabilidad lastima...- Sus pupilas se dirijieron como pudo a la sombra que era a su lado, sumergiendose tambien el cuerpo de aquel niño, y fué conciente que Lei no era más que un fantasma y que ése pequeño nunca fué Lei -Lo siento niño... No puedo salvarte -Susurró en su propia cabeza como si el cuerpo a su lado pudiera escucharla. No tenía fuerza siquiera para mover un musculo, de pronto se sintió cansada y con la inmensa necesidad de dormir. Y de pronto cerró los ojos.
A lo lejos un estruendoso grito de Cler se oyó, furioso, muy fuerte, increiblemente enojado. Un gruñido que hacia sentir como la tranquilidad del grifo hubiera desaparecido por completo y ahora era solo un ave lleno de ira.
El sonido dejó de oirse y se oyó una implosion en el agua, como si de adentro hubiera estallado una bomba. Un ruido espamentoso se oyó y el agua saltó hacia arriba. Despues se vió a Cler dirigirse directamente al fantasma, si bien no podia ni tenía que matarlo, su impotencia de lastimar y traicionar la confianza de Brisa, le hirió gravemente.
-NO! -Se oyó detras de él. Brisa toció quitando el agua de su boca con el pelo completamente empapado y su cuerpo debilidado, a su lado, el cuerpo del niño que aún parecia inconciente- Cler......-su voz sonó lastimada- No... -Sus ojos se abrieron con mucho esfuerzo tratando de recuperarse. No podia romper la promesa que le habia hecho, y si bien el animal no podia hacerle daño, la mujer siquiera queria atacarle. Sus ojos se dirijieron hasta el fantasma, mirandole fijamente. Como si hubiera tantas cosas por decir, pero a la vez quedandose sin palabras.
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Me encanta Soleil : D Anexo sobre el rol: Cler utilizó su poder para trasportarse a la velocidad de la luz para llegar a Brisa incluso sin poder verse volar.
La tomó en sus enormes garras y junto con el cuerpo del niño, la sacó del agua. Pero el ave estaba un poco mojado, solo que el agua resvalaba de su cuerpo
por el aceite de sus plumas xD Amo tu narración! *--* |
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Apenar articuló la pregunta la chica se había caído al lago una vez más. Rió suavemente ante la reacción de la joven, cuando su dragón se postró entre ella y el, gruñendo. Igual podía ver que la joven estaba asustada y temblaba de frío. Había comenzado a llover, lo que lo obligaba a cambiar de planes. No puede parecer muy vivo si las gotas lo atraviesan sin siquiera mojarlo ¿o si? Resignándose, dio un suave suspiro, y comenzó a flotar lentamente en dirección de la sirena, mirando al dragón con ambas manos frente al cuerpo, como esperando por su aprobación antes de seguir. "Vamos, que si te quedas allí te congelarás" siguió acercándose lentamente, procurando no asustarla y la rozó apenas en una de sus manos. Por supuesto que no hubo contacto, a falta de cuerpo, pero por donde el fantom había pasado su mano dejaba una inexplicable sensación de calidez. Era una versión menos intensa de velit, con lo que generalmente la habría quemado, pero hecha de esta manera esperaba ayudar a la joven sirena a sentirse más cómoda. "Discúlpame si te he asustado, sólo que... hace tanto tiempo que no veía a una de tu especie. Eres una sirena ¿verdad?" le preguntó, con una sonrisa en el rostro. "¿Siempre haces paseos tan lejos de tu cardinal? Jamás me había encontrado con una sirena en este lago, será que--" hablaba animadamente, cuando de pronto lo sintió. No solía rodearse de otros fantom, a excepción de algunas noches en especial, así que la presencia de uno cerca era extraña y fácil de identificar. Con la neblina y la lluvia, no era sencillo distinguir mucho más allá, pero no había duda alguna de que estaba allí. El otro fantom tenía un espíritu fuerte, más que la mayoría de los fantoms del cementerio y casi cedió a la curiosidad de flotar hasta la prescencia para averiguar de quién se trataba. Casi.
"--no tienen buena imagen del Cardinal del Fuego?" terminó por fin la pregunta, regresando su atención a la pelirosa frente a él. "¿Puedes guardar un secreto?"
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Me sorprendi cuando su cuerpo comenzo a transparentarse ¿Era un fantasma?. Volvi a temblar ligeramente, la lluvia y la ligera brisa estaban haciendo que me diera mucho frio.
El chico se acerco flotando con las manos al frente, supongo que intentando decir que no tenia malas intenciones. Sui le gruño pero le dejo pasar, sabia que con esta lluvia y la visibilidad practicamente nula, no era buena idea huir volando.
- Vamos, que si te quedas allí te congelarás - Senti una pequeña calidez cuando me toco, lo mire un poco sorprendida ¿Un fantasma podia transmitir calor? No sabia porque pero mis temblores empezaron a calmarse lentamente.
- Discúlpame si te he asustado, sólo que... hace tanto tiempo que no veía a una de tu especie. Eres una sirena ¿verdad?- Asenti y me levante con la ayuda de la cola de Sui quien gruño por revelar tan facilmente mi raza, le acaricie levemente la cola que se enrrollaba en mi cuello.
- Tranquilo -susurre viendolo, sirvio para que se relajase un poco aunque seguia sin quitarle la vista al fantasma.
-¿Siempre haces paseos tan lejos de tu cardinal? Jamás me había encontrado con una sirena en este lago, será que-- -dejo de hablar y empezo a mirar a la nada, mire a mi alrededor a ver si habia alguien mas, pero estabamos completamente solos en ese lugar, por un instante senti su melodia algo ansiosa aunque no duro mucho en volver a la nostalgica- --no tienen buena imagen del Cardinal del Fuego? -nege rapidamente-
- N-no es eso -le hable finalmente, aunque habia sonado mas como susurro- Nu-nunca he ido a mi cardinal -confese desviando la mirada al suelo ligeramente sonrojada, ¿Una sirena que nunca a estado en su cardinal?, eso era practicamente imposible.
- ¿Puedes guardar un secreto? -levante mi rostro y lo mire angustiada ¿un secreto? ¿yo?.
- ahmm... Nunca he guardado uno -senti la mirada de sui, estaba hablando mucho con el, lo sabia, pero... no se veia tan malo, ademas ¿que tanto mal puede ser alguien que no deberia estar en este mundo? Mas bien me daba algo de pena el chico- A-asi que no se -temble ligeramente, la niebla se hacia mas densa y la lluvia mas fuerte- ¿Sabes algun lugar para refugiarnos?
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Se escuchó un estruendo fuerte, y el niño volteó sus ojos vacíos hacia el agua donde al mismo tiempo volvió a salir el grief con ambos hundidos, la masa de agua ante tal 'explosión' confundiéndose con la lluvia que se hacía más fuerte.
Miró sin importancia a la chica recuperando el aliento, y la mirada asesina del grief no le afectaba, simplemente le atravesaba, literalmente. El pequeño pelirrojo volteó completamente hacia la chica, mirándola por encima con ojos sin brillo. "No cumpliste tu promesa", miró por instantes al niño aún inconsciente, volviendo a la chica con una sonrisa cruel "Ahora tendrás que cortarte el dedo~" canturreó leve, mostrándole el meñique, el dedo con el cual el niño 'hizo' aquella promesa infantil, y con un movimiento de su otra mano-- "Zas!" 'cortó' su dedo, este evaporándose en el aire. Pero claro, su ser corpóreo ya no existe y lo que es ahora es sólo un recuerdo, así que no podrá cambiar, y su pequeño dedo volvió a la normalidad.
El pequeño rió levemente, sus pequeñas risas siendo calladas por la lluvia que de un momento para otro aumentó, las gotas que deberían de caer a través de él evaporándose a su alrededor.
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aw, gracias *//* y eso que creí que escribí mal ese post x,D ||orz
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