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♦ 「 cαяdιиαl del ғυeԍσ 」: Cat´s Eye
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| De: Goldier (Mensaje original) |
Enviado: 05/02/2011 10:28 |
 No llevaba más de medio mes en el cardinal, después de haber vagado quien sabe cuánto tiempo por el bosque cualquier pedazo de civilización le hubiese maravillado hasta la médula {inclusive Nijuu-Chiku, donde había pasado la noche días atrás} pero se sintió atraído especialmente por este cardinal por su nombre. Le importaba un cuerno que clase de personas llegase a encontrar, si había fuego de por medía ahí estaría él.
Se encaminaba a Zero, lugar del cual las vulgares lenguas de cantina a las que acostumbraba ir siempre hablaban "en Zero esto, Zero lo otro, ¡Zero aquello!" Zero sería el lugar entonces, aunque le preocupaba el gremio de guerreros con el que se encontraría.Si bien no fue bien recibido por los pueblerinos de Nijuu, estos mantuvieron su distancia al verle {o más bien al olerle, siempre murmuraban que había algo despreciable en su olor. Y esto le preocupaba de sobremanera. En el fondo era algo temático en cuanto a lo estético} pero no tenía excusa, su temporada en los bosques no había sido para nada favorable.
Por el momento se encontraba siendo desatendido en un pequeño consorte, el cual también funcionaba como pequeña pensión, "Cat´s Eye" decía el letrero sobre el cual se sentaba, viendo lo que podía del distrito sobre el techo. Un lugar bastante vivo en comparación con Nijuu. Se preguntó si la capital sería de igual manera, y si pasaría igualmente de desapercibido y solo merodeaba por los tejados de los locales.
Una pelea callejera llamo su atención "¿no es demasiado temprano para estar bebiendo?" se dijo para si mismo quitándose la paleta de la boca, viendo de reojo como ambos borrachos se insultaban las madres antes de molerse a golpes; esperaba ansioso a que un tercero se metiese a detenerlos. Damien lo había dejado de hacer desde que dos días atrás se había ganado un ojo morado por querer ayudar a una de las cortesanas que había montado escándalo porque su cliente no le había querido pagar.
Ahora su única diversión era esperar a ver quién era el tonto que se sumaba a la pelea en pos de paz. Buscó con la mirada, de seguro encontraría en ojos ajenos sentido de hacer algo bien.
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De antemano me disculpo si este tema muere o nunca se da a relucir~ tengo la tendencia de matar todos los temas/rols de los que soy participe {orz es cierto} y no quise entrometerme en otro porque o estaba muy lleno o simplemente no queria romper la dínamica con una noob presentación. So~ veamos que tal va~ |
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De: Goldier |
Enviado: 08/02/2011 07:23 |
Se hizo un lio cuando vio a la casera caer en seco contra el suelo, durmiendo.Mando una desesperada y angustiada mirada a la rubiecilla que lo había hecho y sin objetar nada arrastro a la cortesana hasta el portal de la puerta, acomodándola como si siempre hubiese estado ahí. Hecho esto subió de arcadas a su habitación, la cual compartía con una de las cortesanas, encontrándola casi sin ropa al abrir la puerta. Esta le saludo tranquilamente mientras se vestía, y Damien se precipito contra la ventana para cerrar las cortinas y no dejar que ni el peliblanco o la muñequita pudiesen ver a la mujer.
"¿Me ayudas con el lazo?" le preguntó tranquilamente la mujer, mostrando su espalda, luciendo un kimono tradicional.
"¿Clientes fetichistas?" preguntó entre risas nerviosas esperando que ella no hubiese alcanzado a ver a los dos individuos al otro lado de la ventana, lo que se apoyaban sobre el letrero del local.
"Oh no, como crees. Es solo que hace demasiado calor" le sonrió en agradecimiento con una leve reverencia. Al menos le había tocado una de las amables"Por cierto!" la detuvo antes de que bajase, con el cabello algo alborotado "La casera se ha quedado dormida otra vez en el portal. Parece que estuvo haciendo escándalo con otros borrachos, si pudieses recogerla..." la persuadió con una de sus mejores sonrisas, y un casto beso en la frente fue lo que selló el trato.
Un poco más aliviado {pero no del todo seguro} regreso a su habitación, abriendo la ventana para aún encontrar al par "¿están bien?" pregunto cansado "¿Se les ofrece algo más?" esta vez pregunto dirigiéndose a Bunny, casi de mala manera.
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Nota: casera&cortesana(s) son extras. no big problem~
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 El golpe contra la madera casi le saca el aire, y apenas tuvo tiempo para recuperarse cuando sintió un par de fuertes manos que lo tomaban Por los hombros y lo hacían Pararse recto. "no era exactamente lo que tenía en mente, niño" dijo el otro ocupante del letrero, quien resultaba ser un joven -no mucho mayor que el- alto y delgado, de pelo y ojos café oscuro "ve ahí corazón valiente, yo sé que quieres ser héroe"y sin más el joven le empujó de vuelta a la pelea, donde el par de borrachos le esperaban como perros acorralando a un gato en un árbol. "nah, no vale la pena" Cambiando de opinión el chico lo regresó de una fácil maniobra a su posición original. Su expresión debió ser única: labios medio separados por la sorpresa e incapaz de formar una réplica decente. El joven lo maniobraba como si no pesara más que una muñeca de trapo, levantándolo, empujándolo y cargándolo de regreso en cuestión de segundos. No había decidido si debía reclamarle o agradecerle cuando una cuchilla voló en su dirección, clavándose diestramente en la madera."que demos-? Ezra vio como el joven descendía hábilmente del letrero y se dirigía a una extraña niña rubia cuya presencia no había notado antes. Probablemente la dueña de aquella cuchilla. Le susurraba algo a la chica y luego seguía de largo, dirigiéndose al par de hombres que seguían mas que dispuestos en continuar la pelea. Desde arriba observó, maravillado, cómo sin ningún esfuerzo aparente derribaba a ambos hombres. "¿todo bien allá arriba?" ¿aquí arriba? Se podía tener prácticamente un día de campo aquí arriba, especialmente si eras como él y disfrutabas de lugares elevados, así que asintió, con mas fuerza de la necesaria. Debería de preocuparse más por allá abajo, ya que mientras el joven le sonreía , una señora -no era ella la casera a la que debía pedirle alojamiento?- se acercaba y comenzaba a gritar de mil y una cosas que una dama no debía pronunciar (aunque juzgando por los ademanes de la mujer, no estaba cercana a Dama de ninguna manera) al pobre joven que, por primera vez se veía falto de palabras. Iba a bajar a ayudarle, explicarle a la mujer que todo aquello había sido su culpa y que el otro muchacho solo había intervenido para parar la pelea, pero la chica rubia ya estaba allí, sacando una baraja como de la nada. 'una bufoon!' exclamó interiormente. Había escuchado que casi nunca abandonaban el palacio imperial y si la joven iba a actuar ahora era unacto digno de verse. Desde donde estaba no podía ver qué carta había sacado, pero a juzgar por la expresión de la casona no podía ser algo bueno. Súbitamente, sin más, la gran mujer se desplomó sumergida en un profundo sueño y la pequeña bufoon saltó agilmente hasta donde se encontraba el, sobre el letrero. "pero hay que saber jugar si lo harás no lo crees?" le preguntó la chica. Parpadeó un par de veces y como si entendiera de que hablaba, Ezra asintió levemente y casi murmurando continuó "pues en cada juego alguien gana...." saltó rápidamente del letrero, asegurándose de desencajar de la madera la pequeña cuchilla con forma de trébol y se dirigió al cuerpo de su supuesto guía, cortando con el filo de la hoja la discreta bolsa que llevaba atada al cinto en la que se encontraba lo poco que quedaba del dinero que le había pagado y regresaba, impulsado por el aire al viejo letrero del lugar "...y alguien que lo pierde todo.." terminó sonriente. El ebrio traía sobre si otras cosas de valor, que el licht tomó como recompensa de lo que había gastado el hombre y las guardó en la bolsita. En ese momento la ventana que tenían tras de si se abrió de par en par, revelando al joven que haiba derribado a los borrachos. Asintió entusiasta a la pregunta que les hizo. Si, aun después de el percance con su guía la noche no había sido del todo contraproducente. No, no le había robado a aquel hombre, había recuperado lo que en principio era suyo. Sabia que el chico se había dirigido a la joven bufoon, pero no pudo evitar intervenir. Porque sí, aun se le ofrecía algo más... "Un lugar donde quedarme...Esto es una casona" luego lo dudó un poco. Después de todo, había sido su guía quien lo había dirigido hasta allí "¿Cierto?" terminó, sonriendo tímidamente. Lo ultimo que necesitaba era que estuviera en un lugar completamente equivocado todo este tiempo. ---------------------------------------------------------------- hsjakakdhjdks perdón por el súper retraso!!! Salimos de vacaciones por 3 días xDDD y veía como actualizaban y assdg me moría por poner algo tambn!!!! awww goldier amé lo de la nube tamb x333!!! y perdón de nuevo por el retraso y aghhh esto lo estoy escribiendo desde el iPod en clase y ojalá no haya escrito muchas incongruencias ;o; *bien obsesionada que no le importa escribir por código xDDD haha damien es taaan sexxii (el iPod cambia damien por zajen xDD wtf) perdonen si esta todo corrido y la falta de colorcitos, no me se muchos colores en
códigos ;w: mas q feos haha |
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 Cuanto
griterío
Estaba limpiando la parte trasera de la pensión, donde había estado
trabajando el ultimo mes, para conseguir algo de dinero, quizás, una
forma honrada de conseguirlo. Repulsión, eso hubiera tenido si me
hubiese dado ofrecer mi cuerpo a algún hombre. Me fui a la puerta
principal, para ver a la casera dormida en el portal. Salte sobre
ella para entrar nuevamente a la pensión, donde al parecer ya
habrían llegado nuevos alojados. Me acerque al joven de cabellos
blancos y a la mujer con un parecido a una conejita Sus
habitaciones son la numero 4 y numero 7, espero que disfruten su
estadía. Así de sencillo, no les pregunte si realmente querían
hospedaje, pero, si hablaban con aquel joven que ya se hospedaba, se
supondría que harían lo mismo
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 "Pues en cada juego alguien gana... y alguien que lo pierde todo." El chiquillo sabia, habia captado y eso ya no lo convertia en alguien tan aburrido. Afirmò suavemente con su cabeza ante sus palabras, y las cortinas a su lado se cerraron abruptamente, las cuales quedò mirando fijamente, hasta que estas se volvieron a abrir. ¿Se les ofrece algo más? Dijo el joven, se veia molesto con ella, pero jamàs pensò que su inocente travesura le hubiera irritado al punto de tratarla con tanta brusquedad. Llevò su mano a su pecho e inclinò suavemente la cabeza una sola vez, a modo de disculpas. Si èl no era del todo cordial, no era motivo de que ella debiera ser asi igual con èl. El peliblanco le respondiò a su pregunta. "Un lugar donde quedarme...Esto es una casona ¿Cierto?" Bunny volviò a afirmar con su cabeza y le diò un suave empujoncito a Ezra, ambos callendo con la suavidad de una pluma. Sus habitaciones son la numero 4 y numero 7, espero que disfruten su estadía. Ladeo su cabeza, sin comprender a la joven (la que tenia algo interesante, pero no podia asegurar què. Esperaba verla nuevamente). Como disfrutarian con tanto bullicio? Pero se podia, siempre se puede actuar si se desea. Ezra comenzò a caminar hacia la habitaciòn numero 4 mientras ella le seguia en silencio (esperando no molestarle, por eso guardaba silencio) y de pronto, susurrò. 'El 7 es un buen numero' |
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De: Goldier |
Enviado: 09/02/2011 07:55 |
Estuvo apunto de responderle a Erza, pues suponía que ese lugar no era para ninguno, pero se distrajo ante el gesto de la rubia, y de repente oyó la voz de una fémina que aún no conocía {aunque claro, procuraba no hacerse notar mucho en un lugar como ese. Le bastaba que la casera y su "compañera" de cuarto supieran de su existencia} al parecer les había escuchado, sus ojos castaños se ensancharon cuando vieron a ambos descender y hablar con ella; apenas podía notar su cabellera, pero sabía que llevaba un moño rojo: "Sus habitaciones son la numero 4 y numero 7, espero que disfruten su estadía."Y corrió casi tan rápido como su compañera había bajado de la alcoba, encontrándolos a ambos en la escaleras del local. Casi sin aire intento detenerlos de subir pues ya un grupo había subido a cambiarse y el show de las doce pronto comenzaría, pero estaba sin aliento casi casi desfalleciendo "¿No les gustaría probar en otro sitio?" balbuceo de manera inentendible, aún deteniéndoles con una mano "¿Qué no había alguien más con ustedes?" dijo en cambio recordando haber escuchado otra voz; pero hoy en día uno escucha muchas cosas, aunque no estén ahí.
Orz yo creo que hubo una pequeña confusión~ porque el lugar donde Damien se quedaba era un burdel, él se quedaba ahí porque las cortesanas convencieron a la "matriarca" {la pimp de las cortesanas ;D} pero bueeh~ ahora paso de burdel medio decente a pensión decente {o pensión/burdel lol como quieran, allá los que quieran ver cortesanas y chicas con pocas ropas 1313 } asd BTW~ con la vocecilla me refiero a Kanon {Vicky-chan!} para no olvidarnos de ti :3@Greyii: ahaha dunnot worreh xD las vacaciones son neesarias y ricas twt a menos que te aburras D: entonces no! kyah thnks ;A; aveces procuro no hacer comments así porque pueden estar todos "esa man viene y asexua a mi charact Dx no me cae {?}" no puedo creer que escribas del ipod xD eso para mi es complicadisimooo {e igual tampoco puedo del celu ;3;} Zajen es el gemelo maligno noghei de Damien *legasp* |
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 Parecia como si toda la diversion se hubiese acabado, de un momemento a otro la tranquilidad volvio. Me levante, comenzando a mirar a mi alrededor, y ver a una señora dormida en una puerta. Saque un crayon que me habia regalado un niño hace rato, y comenze a rayarle la cara, suavemente para que no se diese cuenta, dibujandole garabatos en todo el rostro. Ahora... cerre los ojos y coloque mis manos delante mio, comenzando a cantar, para ver quien seria el que se acercase a mi, colocarle el crayon de la mano, y entrar a la casa, que al parecer seria una posada
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Con el ataque Fake Song puede atraer a cualquier persona o ser hacia ella
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Sus habitaciones son la numero 4 y numero 7, espero que disfruten su estadía Respondió una chica de cabello oscuro y un gran lazo en la cabeza, prácticamente urgiéndolos a que terminaran lo que fuera que estuvieran haciendo fuera. Observó la llave de su habitación en la palma de su mano, era antigua y un poco oxidada, con un cuatro tallado rudimentariamente. Caminó en dirección a la puerta cuando escuchó a su espalda que la bufoon con orejas de conejo murmuraba 'El 7 es un buen numero' Hmph, supersticiones... aunque si lo pensaba de esa manera, el siete era un número de la suerte, mientras que el cuatro...El cuatro representaba la muerte. Prefirió no pensar en ello mientras entraba al local, el cual no había cambiado mucho de la última vez que había estado allí. Se seguían viendo un montón de hombres -la mayoría de ellos excedidos en alcohol- si era posible incluso diría que habían más. Y todos estaban comenzando a pararse, como si algo estuviese a punto de suceder. La iluminación del lugar también había cambiado un poco, y habían decorado una que otra pared con lazos rojos. Sea lo que fuese lo que ocurría no le importó mucho, y caminó en dirección de las escaleras que suponía le llevarían hasta las habitaciones. El joven que segundos atrás les hablaba por la ventana bajaba apurado por las escaleras, corto de aire, pero asegurándose de cubrir el paso hacia arriba ¿No les gustaría probar en otro sitio? balbuceó entre suspiros por a falta de aire, y con una mano les empujaba sutil pero insistentemente a bajar las escaleras. ¿Qué no había alguien más con ustedes? ¿De donde había salido de pronto tanta insistencia de que no subieran? ¿Las habitaciones no estaban listas? ¿Había sido eso último un intento de cambiar de tema? Ezra sonrió y negó con la cabeza. "Por lo menos no conmigo" volteó a ver inquisitibamente a la bufoon, y luego volvió su vista al joven, que seguía obstruyendo el paso. "Y no veo cual es el problema en este, y me iba a hospedar aquí de cualquier manera, el guía me lo dijo" bueno..técnicamente no se lo había dicho, y si, aquel hombre no era un guía, pero...¿porqué le habría llevado allí en primer lugar si no era para eso? empujando suavemente la mano del joven que le impedía el paso subió las escaleras con la calma del mundo. Pronto deseó no haberlo hecho.
Apenas llegó al piso superior de una de las puertas salieron dos mujeres -medio vestir era demasiado para describir la cantidad de vestimenta que llevaban- y una tercera que cargaba las vestimentas de las otras dos.
Ezra se quedó paralizado en el borde de las escaleras, con una mano apoyada en el barandal en un instante que parecía prolongarse. "¡AAH!lo siento lo siento lo sientolosientolos-iento!" Gritó, mientras se llevaba ambos brazos a los ojos, adoptando un color rojo que dejaría en deshonra a cualquier tomate y se agitaba, tratando de borrar la imagen. '¿Q...Qué era todo aquello?!'
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sii!! Tenía la idea de que era un burdel -a qué otro lugar lo llevaría ese guía de pacotilla xDD sólo que el pobre no tenía ni idea owò
la pimp de las cortesanas XDDDDDD me la imagino bien..."así" hahaa XDD
eeeh a mis charas les gusta ser asexuados :D (?) aah no es tan malo escribir en el, lo PEOR son las correcciones que hace D: casi todos los verbos acabados en -ando los cambia por algo de -reis xDD "acabareis!" terminaré hablando bien caballeresco XDD hahaha Zajen, el gemelo malvado perdido! -dun dun duun-
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De: Goldier |
Enviado: 10/02/2011 06:19 |
seguía aún sin recuperarse, y apenas podía sostenerse con una mano del barandal. No sabía una mejor forma de explicarse, aunque parecía ridículo ¿Por qué debería de avergonzarle el hecho de que estaba hospedado e un burdel? No, no, no debería; es más le encantaba. Los olores, las luces, lo dinámico del lugar. El olor a tabaco y la escencia de licor que siempre se colaba en la alcoba cuando su compañera entraba a cambiarse de ropa o a dormir de una buena vez {cosa que ocurria muy poco}
Pero aún así, le parecía que esos dos y el resto de personas no lo verían de la misma forma. Cat´s Eye no era su hogar {ni tampoco deseaba que lo fuera} pero ciertamente no pasaba más alla de ser un simple burdel medio decente ,en todo el sentido que puede tener la palabra medio y lo poco que puede tener de decente.
Pero ese no era el punto aquí.
Se precipito tras Erza a taparle los ojos, buscando algo apurado a la rubiecilla que se le había escapado entre tantas bailarinas y tacones "¿Aún quieres quedarte aqui?" le pregunto al oido aún algo cansado, haciendose a un lado para dejar a las señoritas pasar: Colorete, corsets, taos y plumas desfilaron frente de ambos, y aún así Damien buscaba con su mirada opaca a la chica de la habitación 7. Nada. ¿Dónde estaría?
Cuando el pasillo estuvo desierto y solo quedaron ambos, quitó la mano de los ojos de Erza dejandole ver, notando pecuiarmente sus ojos claros tambien ¿Por qué el chico tenía que ser tan pálido? "Y bien" le devolvio las llaves de su supuesta alcoba, suponía que tal vez tambien tendría qu compartir habitación con una de las chicas "¿Quieres conocer a tu compañera de habitación?" apunto a las chicas que abajo bailaban |
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El joven no dijo nada respecto a su comentario, y por un milisegundo, sonriò de oreja a oreja, sin dejar de seguirlo. Las escaleras eran el camino para llegar a ambas habitaciones, pero el joven de hace unos minutos llegò a obstruirles el paso. ¿No les gustaría probar en otro sitio? ¿Qué no había alguien más con ustedes? Ladeo su cabeza, no entendia las reacciones del chico, pero solo porque no habia deseado observar bien el lugar (no tiene nada de elegante y eso no es atractivo). Por lo menos no conmigo. Y no veo cual es el problema en este, y me iba a hospedar aquí de cualquier manera, el guía me lo dijo El chiquillo subiò las escaleras y, sin moverse desde donde estaba, pudo observar a dos mujeres casi desnudas bajar. ¡AAH!lo siento lo siento lo sientolosientolos-iento! Apoyò uno de sus codos en la mano y bajo la vista, cubriendose los ojos y apartandose para que pasaran. ESO no es elegante... NO lo es, pensò.. Pero el chiquillo se cubriò la vista con ambos brazos, como si hubiera visto algo realmente prohibido (solo son marionetas), y eso le provocò gracia, incluso, ternura. El mayor se precipitò a cubrirle los ojos, y algo llamò su atenciòn, por lo que caminando con su extraño vaiven se dirijiò a la salida, llegando hasta la niña que cantaba, crayon en mano.
Traviesa, aha, traviesa! Empujò levemente a un hombre ebrio que recibiò el crayòn, y de un paso largo y en puntillas, llegò hasta Kanon, tomandole la muñeca y arrastrandola hacia la puerta, mirando desde adentro como la mujer despertaba y el hombre se reia a carcajadas grotescas en su cara, recibiendo por ello mismo una bofetada de parte de la mujer, que entrò indignada y se perdiò en el lugar. 'Traviesa', susurrò, como si le diera un cumplido. Tomò una carta que se pegò en los ojos de Kanon, y tras dar un paso hacia atras, ambas aparecieron tras Demian. Empujò suavemente a Kanon tras retirar la carta que utilizò como vendas, dejandola entre ambos chicos. 'No seria mejor compañeras damiselas?', dijo, refiriendose a ambas y luego volviendo a ver a Ezra. 'Jugamos cartas', le dijo, 'no habria peligro de que alguien jugara contigo...' susurrò, poniendo un toque de malicia en sus palabras, pero como no hacerlo? El lugar y su gente daba para muchas especulaciones y desconfianzas. 'Siete, oui...', afirmò dos veces con su cabeza y volteò a Demian, acomodando el cabello de Kanon como si fuera su muñeca consentida (era traviesa). 'Cuatro... mal numero', susurrò, negando con su cabeza y volviò a ver a Ezra, ladeando la cabeza, esperando ansiosa su respuesta.
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Seguía parado allí, temblando con los ojos tapados cuando sintió el cuerpo de alguién más por detrás suyo y se tensó inmediatamente, la cercanía no ayudando a sus nervios. ¿Aún quieres quedarte aqui? era la voz del joven la que escuchaba en su oido. Dejó que el lo moviera para apartarse del camino y dejar a las otras marionetas pasas, procurando no hacer caso a los suaves roces que sentía a su paso. Ezra tragó saliva. Tenía que dejar de comportarse tan tan...Licht? ¡Llevaba horas en el lugar! ¡Debió sospechar que se trataba de un burdel!....Pero entonces.. ¿qué hacía alojado allí el joven que ahora le tapaba los ojos? y porqué les habían asignado a ellos habitaciones también? ¡Definitivamente no era un cliente! No creerán que..Comenzaba a colorarse de nuevo cuando el joven le retiró por fin la mano de los ojos, permitiéndole ver de nuevo el pasillo, ahora desierto excepto por ellos dos. Suspiró, aliviado y miró al joven parado frente a él, asintiendo letnamente a la pregunta que le había hecho antes. Era casi media noche, y los únicos lugares aún disponibles podrían...no ser precisamente mejor que este. Internamente se daba topes por haber montado todo ese alboroto, y más frente a marionetas que no conocía. Ni siquiera la niña-conejo había reaccionado así...Por cierto ¿dónde estaba ella? "Y bien" le dijo mientras le devolvía las llaves de su habitación, las cuales no había notado que había soltado en algún momento entre todo eso. ¿Quieres conocer a tu compañera de habitación? apuntaba hacia las bailarinas en el piso inferior mientras lo decía. "compañera?.." miraba del chico a las bailarinas y de regreso, esperando una seña que denotara que bromeaba. No la encontró.
Y de la nada, justo detrás del joven apareció de nuevo la bufoon, pero no estaba sola, traía consigo a una pequeña niña de largo cabello castaño y grandes ojos verdes. La chica con orejas de conejo empujó a la niña y la interpuso entre el mismo y el joven. 'No seria mejor compañeras damiselas? se refería a ella misma y a la pequeña. La propuesta le llegó como caída del cielo. Jugamos cartas...no habria peligro de que alguien jugara contigo..'Ezra desvió la mirada mientras volvía a sonrojarse furiosamente por la manera en que Bunny había dicho aquello...y el contexto del lugar. 'Siete, oui...Cuatro... mal numero' añadió como si le hubiera leído la mente. La chica ladeó la cabeza en espera de una respuesta. Ezra asintió rápidamente, como teiendo que la joven fuese a cambiar de opinión y miró a Damien "Es posible hacer cambios?" preguntó, casi suplicantemente.
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De: Goldier |
Enviado: 11/02/2011 06:10 |
No era simpatizante de los buffons, como tampoco lo era de los mimos o de los payasos o alguno de su estirpe. Pero aún así; suponía que debía comportarse de buena manera por tratarse de una señorita. Su disgusto surgió en primer lugar porque nunca les entendía, siempre hablaban en acertijos o con trucos, magía y esas cosas que lastimaban sus ojos.
"Es posible hacer cambios?" escucho la voz de Erza entre tanta luz y brillantina y bajo su mirada para encontrarlo. Finalmente se encogió en hombros y sacudio la mano en un pequeño gesto quemeimportista "No trabajo aquí" fue s simple respuesta "y la verdad no es asunto mio" sus ojos castaños giraron sobre el escenario, anunciando con un pequeño brillo que el show ya había empezado "hagan lo que quieran" les dijo al trio: a la chica de grandes ojos verdes, a la conejita que por el tono de voz desconfiaba y alpeliblanco que aún parecía perdido "metanse en el cuarto que deseen o vayanse de aquí, solo revisen primero que no este ocupado. Y supongo que han de querer cambiar las sabanas primero" les advirtio ants de empezar a andar de vuelta a su alcoba, numerada 00 "Y por si se lo preguntan, las chicas no son tan malas compañeras de habitación" apenas había pasado una semana en el lugar y ya estaba acostumbrado a tanto movimiento; más por la noche. Al griterio del día y a las largas horas de sueño en la mañana "almenos yo he tenido suerte" se rió "mi compañera es linda, dulce y agradable al charlar. Viste lindo, aunque no sea una de las más solicitadas" aún dudaba de irse o no de la escena, por lo que les miraba aún atentos caminando de espaldas, por si alguno cambiaba de opinión. |
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El chico sólo se encojió de hombros No trabajo aquí y la verdad no es asunto mio" contestó indiferente y desvió la mirada en dirección del escenario. Por la música podía decir que el espectáculo había iniciado ya. hagan lo que quieran.. metanse en el cuarto que deseen o vayanse de aquí, solo revisen primero que no este ocupado. Y supongo que han de querer cambiar las sabanas primero" parpadeo un par de veces...seguramente se escucharía estúpido preguntando, tanto la niña como la bufoon parecían haberlo comprendido bien, pero... "¿Porqué cambiaríamos las sábanas?..."El joven comenzó a caminar lentamente en dirección de -lo que suponía que era- su habitación "Y por si se lo preguntan, las chicas no son tan malas compañeras de habitación almenos yo he tenido suerte. Mi compañera es linda, dulce y agradable al charlar. Viste lindo, aunque no sea una de las más solicitadas" dijo el castaño, sonriéndo un poco, como recordando. Y sip, llegó el gran remordimiento de conciencia. Oficialmente, era un cretino, lo que hicieran o no esas mujeres no era de su incumbencia, y no era nadie para juzgarlas. Menos si nunca había interactuado con una. Además no se le había ocurrido que así como la habitación cuatro era ocupada por una de las chicas, probablemente también la siete, y estarían corriéndola completamente de su propia habitación. Si iban a hacer un cambio no era una decisión que pudieran tomar solo ellos. Miró a la bufoon y a la niña que la acompañaba, y miró al otro joven que seguía como dudando si marcharse o no. "Debería ver si me aceptan primero..."Miró en dirección al escenario. No se imaginaba siquiera como le preguntaría. Todo sería mucho más fácil si simplemente pudiese dormir allí mismo..De hecho no se escuchaba como mala idea..bostezó abiertamente, reclinándose contra el barandal. Excepto claro que justo en ese punto el barandal se había roto, y alguien había colocado una maseta para evitar problemas. Y a falta de soporte, Ezra cayó, con todo y maceta en una de las mesas de abajo.
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ajajaja tenía que hacer la pregunta XDDD y esque no imagino a ningún sacerdote explicándole
como funciona this and that~ hurrr xD
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"Es posible hacer cambios?" 'No trabajo aquí y la verdad no es asunto mio.' Mirò al escenario: luces, plumas, baile... Los colores le atrajeron, era como un pequeño coliseo, pero mucho mas modesto y con otros motivos aparte del de entretener. 'Hagan lo que quieran.. metanse en el cuarto que deseen o vayanse de aquí, solo revisen primero que no este ocupado. Y supongo que han de querer cambiar las sabanas primero' "¿Porqué cambiaríamos las sábanas?..." Se encogiò de hombros como si no sabiera y mirò al màs grande. "Y por si se lo preguntan, las chicas no son tan malas compañeras de habitación almenos yo he tenido suerte. Mi compañera es linda, dulce y agradable al charlar. Viste lindo, aunque no sea una de las más solicitadas" Negò con su cabeza y susurrò para si misma casi para si misma. 'No hay azares ni suerte...', y bien sabia ella de eso. Siguiò mirando el escenario, las chicas bailar, los hermosos corsettes ajustados en sus cuerpos menudos. "Debería ver si me aceptan primero..." El màs grande aun dudaba de si irse o no, y volviò su cabeza hacia el. 'Y...', hizo una leve pausa, barajando en su mente dos preguntas, hasta que optò por una, 'su nombre? Como he de llamarle?', susurrò con simpleza. Quizàs le responderia, pero el peliblanco cayò al primer piso junto con una maceta. Sus orejas de conejo de pusieron en punta, sorprendida y de puntillas se asomò para ver como estaba el chico. Algunas de las bailarinas se habian detenido, pero otras seguian bailando, todas mirando en direcciòn a Ezra, los hombres que presenciaban el acto dandole una vaga mirada. Un pequeño empujoncito quizas ayudaria al chiquillo a hallar habitaciòn... Si, seria algo entretenido de ver.
Cruzò uno de sus brazos atràs y se formò una pequeña esfera negra, la que luego tomò forma de un pequeño de pie que luego se veia recostado. Su otro brazo colgando a su lado, y su dedo indice se elevò, elevando a Ezra y tambien a la pequeña sombra en su mano. Una reverencia a los hombres que habia perturbado y luego caminar tranquilamente hacia el escenario. 'Cero Cero', susurrò, Ezra girandose hacia la compañera de habitaciòn de Damien; le ofrece su mano para bailar, la joven lo observa y acepta. Hace un puño su mano y la sombra desaparece; aplaude dos veces, y el chiquillo tendria que valerse por si mismo. Volviò su vista a Damien nuevamente, mientras arreglaba los cabellos de Kanon. 'Y?', susurrò, como si retomara la pregunta, pero haciendo otra. 'Seria un problema que el pequeño pudiera dormir esta noche en su habitaciòn?...', inclinò levemente su cabeza hacia atràs. 'Su delicada compañera quizas no se molestaria...', dijo con lentitud y se cruzò de brazos. Despues de todo, el unico que deseaba dormir, era Ezra.
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"Pero miren a quién tenemos aquí~" canturreó alguien tras del castaño, el cual recibió un par de palmadas en la espalda lo suficientemente fuertes para lanzarlo escalera abajo, lo cual no sucedió.
"Damien mi amigo del alma~" el peliazul exagerado como siempre, dando una carcajada y rodeando los hombros del susodicho con su brazo "Qué te trae por estos lares? Piensas divertirte hasta cansarte con las chicas? Ya te veo picarón~" le codea cómplice, riendo abiertamente "Y qué haces acá arriba y no allá abajo?! La diversión parece haber empezado ya~" se asoma un poco por las escaleras, viendo un par de sillas caídas y a un grupo de chicas animando e incitando algo que no alcanzó a ver, pero a juzgar por el alboroto que se escuchaba debía ser algo interesante.
Volteó nuevamente hacia el grupo, recién percatándose de la presencia de las dos chicas. "Ah, ha de ser por ellas..." pensó en voz alta. Intercambió miradas con ambas chicas; primero la pequeña que parecía demasiado menor para que le hayan permitido entrar (Será la crisis? Pero si no estaban en Nijuu!); luego la rubia extravagante, pero de un estilo muy distinto al de las bailarinas; volviendo a Damien, levantando al final una ceja algo incrédulo "Gustos raros los tuyos."
Y volvió a la bufoon con orejas de conejo y maquillaje cargado, quedando algo contrariado, revisando con la mirada nuevamente a las cortesanas y sus trajes de lentejuelas "Hmm...~~" frunció el ceño, pensativo, dirigiendose a Damien "Creo que tu amiguita se equivocó, esta vez no toca el espectáculo de niñas conejo... A menos que ella sea la atracción principal o algo así... Hmmm~~" siguió pensativo (o al menos lo aparentaba bien), observando de arriba a abajo a la rubia.
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durrhurr me colo aqui ouo con niño-nuevo-que-aún-no-tiene-profile pero deben estar acostumbradas (?)
y no se en que distrito estaban @u@ orz
y me imagino que en el Templo del Cielo les han de enseñar con la cigüeña (?) x,D
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Un tercer joven apareciò atras del pelicastaño, con su pelo de color extravagante y brillante. Parecian, por su voz y sus gestos, conocerse. "Pero miren a quién tenemos aquí~ Damien mi amigo del alma~' Damien, uh? Asi que su nombre era Damien... Interesante. "Qué te trae por estos lares? Piensas divertirte hasta cansarte con las chicas? Ya te veo picarón~ Y qué haces acá arriba y no allá abajo?! La diversión parece haber empezado ya~' Inevitablemente volviò un poco su cabeza al escenario ante su comentario, pensando en como se las estaria apañando el peliblanco con la muchacha, volviendo luego en direcciòn a Damien, quita, de brazos cruzados, como una estatua. Su amigo recien pareciò percatarse de la pequeña y ella, observandolas, hablando como si se le escaparan los pensamientos de la boca. "Ah, ha de ser por ellas... Gustos raros los tuyos." Al parecer habia malentendido su presencia cerca de Damien, y sus palabras fueron la corroboraciòn de ello. "Hmm...~~ Creo que tu amiguita se equivocó, esta vez no toca el espectáculo de niñas conejo... A menos que ella sea la atracción principal o algo así... Hmmm~~" Luego de eso, se volteò a mirarla, mas bien, inspeccionarla, buscando un detalle en sus ropas, su rostro, algo de ella. Negò suavemente con su cabeza y llevò su mano a su pecho, inclinando la cabeza. 'No, No... Mi escenario natal no es este', susurrò y luego alzò la cabeza hacia Nelius. 'Bufoon Imperial', dijo, y se escucharon algunas risitas. Recuperò su pose inicial, su mano aun en su pecho, sus orejitas moviendose curiosas dos veces, como si quisiera recuperar atenciòn en algo. 'Usted es?', preguntò al demonio, esperando que la niña no se aburriera.
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