- ** -Vamos Shun que esperas defiéndete, no me hagas quedar como un tonto.- mencionaba aquel violento muchacho mientras continuaba golpeando al noble chico que aun firme en su postura permanecía de pie retrocediendo con cada golpe recibido.
- No quiero lastimarte amigo, no me defenderé.-
fueron las únicas palabras dichas por shun acompañadas por un hilo de sangre que salía de su boca.La frustración y rabia de su oponente estallaron al oír tan necias palabras y nuevamente se abalanzó hacia Shun golpeándolo aun con más fuerzas.-eres un tonto, tu siempre fuiste el favorito del Maestro, siempre te creíste mejor q yo, mejor que nosotros.- decía mientras sus puños chocaban fuertemente contra el rostro y cuerpo de shun quien esta vez cae al suelo debido a la brutalidad de su antagono. La actitud de Shun solo detonaba la rabia y desesperación de aquel joven quien ahora solo buscaba acabar con su compañero de entrenamiento, los gritos de aquellos aprendices resonaban en toda la isla dándole ánimos a este joven y otros tratando de que spika se detuviera.
-Hermano, acaso no podre cumplir mi promesa.-
mentaba mientras recibía patadas en su espalda,
- acaso no poseo la fuerza necesaria para llegar a ser un santo…, pero he soportado durante tantos años el dolor y la humillación en esta isla.-
divagando en su mente a la vez q soportaba los golpes y palabras de su enemigo.
– Maestro-
pensó a la vez q cerro sus ojos recordando una escena pasada.- “Shun cuando te vi por primera vez me preguntaba porque habías venido hasta aquí, tú que no quieres lastimar a otros, con este pensamiento apacible, supe que no eras para esto, pero cuando conocí tu entusiasmo y tu tenacidad y te veía progresar cada día en tu entrenamiento me di cuenta q estaba equivocado, tu posees una fuerza mas allá de tu conocimiento shun, solo que no te animas a mostrarla, toda persona posee una fuerza interior, está en cada uno saber manifestarla”.
- maestro tienes razón-
mencionaba suavemente
- hermano, siempre estuviste para defenderme, yo nunca hacia nada para ayudarte era una estorbo, lo único q hacia era llorar y lamentarme.-
se decía a sí mismos subiendo el tono cada vez mas. Los ojos de este joven comenzaron a brillar de una manera distinta, como si el mismísimo universo podía verse reflejado en ellos, y un aura carmesí poco a poco comenzó a rodear a Shun. -pero que es esto.- menciona su contraparte alejándose unos pasos – shun, estaba a punto de terminar contigo-.
- Spika no dejare q me desvíes de mi objetivo, le prometí a mi hermano que volvería con la armadura y que estaríamos juntos de nuevo.-
las palabras de este joven cargaban ahora un gran poder de decisión, y envuelto en un aura roja que crecía con fuerza este futuro caballero se levanta poco a poco y formando un puño con su mano derecha desata un potente derechazo hacia el rostro de su enemigo quien sale disparado varios metros hasta impactar con una roca.-Esta, esta es mi fuerza.- se cuestiona sorprendido observando sus manos,
- este es el cosmos que estaba guardado dentro de mi-
piensa mientras dirige su mirada hacia su maestro agradeciéndole por todo y entendiendo aquéllas valiosas palabras...¨¨**