Bueno en la guerra se producen grades tensiones. Tal vez da más miedo el pensar en ser capturado por el enemigo que pensar en recibir un balazo en la frente.

Bueno maribea, en realidad no tengo experiencia guerras porque no he estado en varias, pero sí en la guerra de mi país, unos cuantos años. Y por esto le digo que la tensión psicológica, por muy buena preparación mental que se tenga, pero siempre hace “mella”, siempre afecta al protagonista independientemente de su nivel o grado militar.

Sigo sin embargo, como usted comprenderá, sin la posibilidad de demostrar objeciones contrarias, francas y directas con toda objetividad a su argumentación matemática. A saber sobre porcentajes exactos y datos también exactos.

Debo de poner mi argumentación sobre bases hipotéticas. Y entre estas le diré que me parece no muy relevante el cuestionamiento de una revolución, la única en nuestro continente que ganó. Empero, al ser una historia escrita he impartida se merece credibilidad, y es en esto que pongo todo mi esfuerzo analítico en comprender y defender esas páginas heroicas que se escribieron en su lindo país, Maribea.

¿Estamos hablando de una victoria militar en una batalla dada?, lo que en mi país llamábamos combate. Creo que ya he expuesto que en mi familia soy el único con tradición de izquierda, y no es extraño pues soy de la ciudad qué siempre se considero la retaguardia del enemigo.

Recuerdo un relato militar en el cual un solo compa, tuvo en jaque toda la noche, al batallón Ramón Belloso. Dos comandos urbanos de la FPL en la ciudad de Santa Tecla tuvieron a raya a la Guardia Nacional durante varias horas, hasta que se les acabo la munición y se pagaron un tiro en la cabeza.

Guadalupe Martines dicen que un particular combate saco de “urbita” a toda la Policía y la Guardia nacional justos, hasta que la capturaron, los muy cobardes de puro milagro jeje.

Y es que cuando se pelea por convicción las fuerzas se multiplican por 7.

Bueno toda guerra tiene sus paginas históricas, y los que después de una gran victoria escriben dichas páginas, se emborrachan de fervor y hacen males cuantas.

Toda guerra tiene sus números no exactos, las Biblia de mis abuelos maternos dice que David hirió a sus diézmales, y los historiadores modernos dicen que no puede ser cierto, pero mi madre me decía, la viejita linda, que fue un milagro y punto final.

Quiero corregir, me equivoque y dice el texto hebreo, qué David hirió a sus diez miles. DIEZ MILES