¿Son el Dios Bíblico y El Gran Arquitecto del Universo el mismo personaje? En ocasiones nos es difícil aceptar que el Dios Bíblico y el Dios “Gran Arquitecto del Universo” que muestra la Masonería sean el mismo personaje, ya que el Dios Bíblico , muestra rasgos de perversidad inaudita , mientras que Dios Masónico GADU , es descrito en Masonería como Ordenado , Inteligente y Bondadoso. La Biblia es objetivamente un conjunto es escritos enmarañado, contradictorio y oscuro. No es pensable que un Dios que inspira o dicta la Biblia al escritor o escritores de la Biblia para que el mensaje divino llegue al hombre tenga que recurrir a acertijos y metáforas, para no hablar directamente y de forma sencilla. Había montones de fórmulas para que ese mensaje fuera transmitido de forma clara y comprensible para gentes de todo tiempo. "Dios creó el mundo" sería un ejemplo magnífico de claridad que no precisa de exégesis alguna; pero en vez de eso, los que escribieron la Biblia se embarcan en una serie de pintorescos absurdos cosmogónicos. Y sobre todo, ¿de dónde sale la especie de que la Biblia sea de inspiración divina? ¿Quién lo ha dicho? ¿San Pablo? Pues vaya fuente de información. En Masonería debemos decir que siempre hay una Biblia sobre al Altar del Templo, Biblia que es analizada por nosotros los masones desde hace cientos de años, sin el apasionamiento dogmático , ni la fe ciega, y bajo esta perspectiva es que hoy escribo estas líneas , no para cubrir la Biblia con Velos , sino para darle claridad, bajo la lámpara del análisis. No hay Logia Masónica en el Mundo , donde la Biblia sea una pieza más de utilería , un adorno del Templo, la Biblia en Logias Masónicas en minuciosamente estudiada y analizada, como muchos sabrán la alegraría litúrgica masónica está básicamente basada en la historia de la Construcción del Templo Salomón dedicado a Jehová en Jerusalén. Pero en el afán del masón de buscar la Verdad , no solamente en la Biblia , sino por todos lados , es que debemos entender que seguro el Dios Bíblico no es el Verdadero Dios , ya que jamás un Ser Supremo de Amor ordenaría a uno de sus hijos a ser martirizado en la Cruz como lo fue el Divino Maestro Jesucristo. La Biblia , al menos a mí no deja de sorprenderme, siempre seré un Lector de la Biblia , y cuando me tocó analizar sobre el “Código Secreto oculto en la Biblia” me quede literalmente con perturbado por lo que encontré ahí. En la Biblia encontramos que muchos puntos dejan estupefacto a cualquiera que lea los capítulos bíblicos dedicados a la creación, por poco rigor crítico que se tenga y pocas ganas de encontrar despropósitos, y es que Dios parece haber creado a la Misma maldad al momento de Crear el Universo. Sólo hace falta leer con atención y se encontrarán otras muchas incongruencias e incluso más signos de perversidad divina: Antes de la creación de la materia Yahvéh crea a ángeles: permite que unos cuantos le desobedezcan, aún siendo perfectos, y se conviertan en demonios. Tanto unos como otros tienen un cometido: ayudar los primeros y tentar los segundos a una creación que todavía no ha hecho con lo que se llega a la conclusión que Yahvéh ya tiene predeterminado todo lo que va a suceder dejando en la cuneta lo de que hizo a la creación con libre albedrío y haciéndonos ver que su creación llamada Satanás es de lo más tonto que se pueda uno imaginar: ¿acaso no sabe semejante ente que no va a poder ganar jamás a su creador? ¿Cómo pudo rebelarse un ente perfecto? ¿Es que Satanás no lee la Biblia? La presencia de ángeles y demonios nos lleva a pensar que ese dios no es omnipotente: necesita de alguien para que le ayude a llevar a cabo su rebuscado plan de salvación. Es más, Jesús existe también desde antes de la materia (según la perspectiva cristiana pues los judíos no asocian a Jesús con la Sabiduría de la que se habla en el Antiguo Testamento ) por lo que volvemos a llegar a la conclusión de que también tiene predeterminado todo el maquiavélico plan de salvación a la Humanidad para redimirla de un pecado que ni siquiera ha cometido y ni es capaz de perdonar... salvación dirigida a alguien a quien todavía ni ha creado, ni ha pecado ni pide ser salvado: Jesús se manifiesta para destruir la obra del diablo y conseguir así la salvación de esa Humanidad, obra que no sólo está permitida sino planificada por Yahvéh desde la eternidad. Este despropósito es tan grande que cualquier intento de aclarar la situación creada cae en un desatino todavía mayor. Los Testigos de Jehová, por ejemplo, al intentar arreglar el desatino dicen: "¿Por qué es irrazonable la doctrina de la predestinación?. Si Dios hubiera previsto o decretado el pecado de Adán, se habría convertido en el autor del pecado cuando creó al hombre y sería responsable por la maldad y el sufrimiento humanos. Esto no es compatible con el hecho de que Jehová es un Dios de amor que odia la maldad .Que Yahvéh o Jehová, hace las cosas sin previsión, no sabiendo qué es lo que está haciendo y, todavía peor, sin tener conocimiento de sus consecuencias con lo que nos dicen que la creación de Jesús fue únicamente "por si acaso lo necesitaba para alguna cosa algun día"; que a los demonios los creó con el mismo objetivo; que tiene que ir corriendo cada dos por tres a arreglar lo que su creación desarregla improvisando pues no sabe qué va a desarreglar la próxima vez; que el Apocalipsis es falso pues allí se proclama todo lo que va a pasar en los últimos tiempos con lo que nos dicen que sí sabía todo lo que iba a suceder... . Que Yahvéh, dado que se quiera o no tiene que ser omnisciente si se pretende que es Dios, es el autor y culpable del pecado de Adán y responsable del mal y sufrimiento humanos. Que hay otros versículos que se contradicen: unos dicen que es malvado y otros que odia el mal y que dirigen sus publicaciones a gente que usa poco el raciocinio. Como único descargo hacia esa secta decir que no son los únicos cristianos que creen cosas parecidas, más bien decir que lo creen todos los que profesan esa religión. Sin embargo, tal vez no hacía falta recurrir a la secta o a razonamientos; el propio Yahvéh dice que sabe todos los planes de los hombres, que todo lo tiene predestinado y ya tiene escogidos a sus elegidos. A pesar de todo lo dicho hasta el momento, las incongruencias no han terminado, ni mucho menos. Vamos a analizar los versículos de la creación en los puntos que todavía no hemos abordado y recalcando alguna parte que ya ha salido y siguiendo el orden cronológico de esos versículos: "En el principio hizo Dios los cielos y la tierra". Toda discusión con un creyente parte del supuesto de que ese versículo contiene una verdad. Pero puestos a analizarlo encontramos cuatro puntos de los que se puede discutir: 1. no todo el mundo está de acuerdo en que hubo un principio, es más: las últimas deducciones científicas tienden a afirmar que no lo hubo, deducciones a las que llegaron otras personas anteriormente sin tener esos conocimientos científicos; 2. no todo el mundo acepta la existencia de Dios; 3. no todo el mundo, aun aceptando su existencia, está de acuerdo con que haya creado algo; 4. el versículo parte del supuesto de que Dios existe, sin aportar ninguna clase de prueba ni señalar de dónde procede ese Dios ni nada con qué poder tomarnos en serio semejante supuesto, y un quinto punto del que no hay discusión: la tierra no fue "creada" antes del sol y todos los otros planetas, estrellas... como asegura ese dios, sino después del sol y después de otras muchas estrellas. Yahvéh hace, pues, los cielos desprovistos del sol, la luna y las estrellas pues a estos no los crea hasta: "La tierra estaba desierta y vacía. Había tinieblas sobre la faz del abismo y el espíritu de Dios aleteaba sobre la superficie de las aguas" Tres conclusiones: 1. Dios, al menos el bíblico, tiene alas, a imitación de los dioses de otras mitologías; 2. dice que la tierra estaba vacía e inmediatamente después asegura que había agua... a no ser que se refiera a las aguas que más tarde dice que hay por encima de la tierra y 3. la tierra en ningún momento fue una masa incandescente, como dice la ciencia: "Dijo Dios: Haya luz; y hubo luz" Esa luz no procede del sol, pues no lo crea hasta, hecho que ha proporcionado fuertes dolores de cabeza en todos los tiempos a quien ha osado averiguar qué luz era esa. ¿Tal vez no hizo todavía el sol por miedo a que se apagase habiendo agua por todas partes? Es curioso el fin para que crea esa luz: para nada pues todavía no hay nada ni nadie que la necesite. ¿O es que la crea para él mismo, para que pueda ver mientras va creando cosas?: "Y vio Dios que la luz era buena. Y separó la luz de las tinieblas" Confirmando lo anteriormente expuesto: Yahvéh no sabe que la luz es buena hasta que la ha terminado de hacer. Tal vez sea, pero, más complicado de entender lo que dice después: ¿acaso esa luz no era pura que la tuvo que separar de las tinieblas? No puede ser una verdadera luz si tiene que hacer eso... pues está indicando que la luz y las tinieblas estaban mezcladas, cosa inaudita: una cosa puede estar más clara o menos, o más oscura o menos oscura, pero que esté claro y oscuro al mismo tiempo resulta difícil de entender: "Y a la luz llamó Dios día, y a las tinieblas noche. Y hubo tarde y mañana: día primero" En el primer día, pues, quedan ya hechos el día y la noche, aunque ni se sabe exactamente para qué pues no hay nadie que se pueda beneficiar ni de uno ni de la otra, ni se sabe exactamente con qué ilumina Yahvéh el día: "Dijo Dios: Haya firmamento en medio de las aguas, que separe unas aguas de otras. E hizo Dios el firmamento, y separó las aguas que están debajo del firmamento de las que están encima del firmamento. Al firmamento llamó Dios cielo. ... día segundo" Confirmando lo anterior: "arriba" hay ingentes cantidades de agua, igual que abajo. Las de arriba las guarda en odres y en depósitos y los abre cuando cree conveniente asesinar a la Humanidad que creó por ser muy malos (diluvio). Cabe apuntar aquí, aunque el diluvio no entre en los capítulos de la creación, que Yahvéh hace cosas inútiles: ¿para qué destruye a la Humanidad con un diluvio si sabe que los descendientes de los pocos que salva van a volver a pecar? Otro punto: a la Humanidad de entonces no se le había dado todavía la Ley (de Moisés), por lo que no sabían si estaban obrando bien o mal. Sin embargo, son castigados por el buenísimo Yahvéh. En ese segundo día hace una cosa que ya había hecho en el primero: el cielo. Por cierto, se supone que para que se volviese a hacer de día tuvo que volver a hacer la luz de nuevo pues para que se hiciese de noche en el primer día la tuvo que destruir a pesar de que le había parecido que estaba bien: "Y dijo Dios: Reúnanse en un lugar las aguas de debajo de los cielos y aparezca lo seco. Y así fue: A lo seco llamó Dios tierra, a la reunión de las aguas llamó mar. Y vio Dios que estaba bien" No se menciona el momento en que crea esas aguas. Es un punto importante pues había dicho que la tierra estaba vacía y ahora dice que "abajo", es decir, en la tierra, había agua. Otra deducción se saca de eso y de parte de lo siguiente: "debajo" está sólo la tierra; los cielos están arriba, es decir, debajo de la tierra no hay nada, ni cielos, ni atmósfera... sólo una base que a veces se tambalea y unas columnas y pilares que la están aguantando... aunque en la descripción de Ptolomeo no se diga exactamente eso. Por lo descrito se puede asegurar que al principio la tierra estaba completamente inundada de agua puesto que lo seco no aparece hasta que esas aguas son reunidas en mares: una buena parte de esas aguas se las tuvo que tragar la tierra... hecho que tampoco puede confirmar la ciencia.: "Dijo Dios: produzca la tierra vegetación: plantas con semillas... Y vio Dios que estaba bien... día tercero" Yavhéh continua viendo que las cosas que hace están bien una vez las ha hecho y crea vegetación que necesita del sol antes de crear a éste: "Y dijo Dios: Haya lumbreras en el firmamento de los cielos que separen el día de la noche, y que sirvan de señales para estaciones, días y años. Sirvan de lumbreras en el firmamento de los cielos que den luz sobre la tierra. Hizo Dios dos grandes lumbreras; la mayor para que dominara en el día, y la menor para que dominara en la noche, y también las estrellas... para que señoreasen sobre el día y la noche, y separasen la luz de las tinieblas. Y vio Dios que estaba bien... día cuarto" Se confirma también ahora la idea que tenían los autores de esos versículos en el sentido de que todo lo que había en el cielo o firmamento era sólo un adorno, un embellecimiento de la tierra: esos autores hacen que su dios emplee tres días para hacer "cuatro cosas" y uno sólo para hacer el sol, la luna y todas las estrellas, es decir, todo el universo, el cual y los "lámparas o lumbreras" que lo componen, les debía parecer pequeños en comparación con la tierra: nos dice Yahvéh aquí, pues, que el sol, Júpiter... etc. son mucho más pequeños que nuestro planeta y deben serlo pues, además, asegura que todos los astros del cielo caerán sobre la tierra. El dios bíblico, como se ha apuntado antes, nos dice que la luna es una lumbrera, es decir, tiene luz propia como el sol, y que alumbra la noche igual que el sol lo hace con el día, cuando no se da cuenta que el sol no alumbra el día: es el día que es claro porque está el sol, que no es exactamente lo mismo. Por otra parte, supongo que debió destruir definitivamente la misteriosa luz que había creado y que ahora, estando las dos lumbreras, el sol y la luna, ya no le sirve para separar el día de la noche y cabría preguntarse que para qué hace el sol y la luna si aquella luz hacía lo mismo que estos. Analicemos a Satán en la Biblia "En Edén en el huerto de Dios estuviste ; de toda piedra preciosa era tu vestidura ; de cornerina, topacio, jaspe, crisólito, berilio y ónice ; de zafiro carbunclo, esmeralda y oro ; los primores de tus tamboriles y flautas estuvieron preparados para ti en el día de tu creación. Tú querubín grande, protector, yo te puse en el monte santo de Dios, allí estuviste ; en medio de las piedras de fuego te paseabas. Perfecto eras en todos tus caminos desde el día que fuiste creado, hasta quese halló en ti maldad " Ezequiel Capitulo 28. versículos 13 - 15 Esta es la única referencia que se hace en toda la biblia acerca de la creación de Satanás, que lejos están las imágenes del demonio de su verdadera figura, en ninguna parte de las escrituras cristianas se hace semblanza alguna a un ser con cuernos y cola, estas imágenes en su mayoría son tomadas de antiguos dioses paganos (el dios griego Pan, por ejemplo) ; los cristianos en su afán de frenar el culto a estos antiguos dioses decidieron asociarlos con el demonio, para así parar los ritos y fiestas en honor de estos seres míticos ; pero la imagen real de Satanás se ve claramente en los versículos citados anteriormente y es la de un ser extremadamente bello, esta belleza es la que le conduce a su caída : "Se enalteció tu corazón a causa de tu hermosura, corrompiste tu sabiduría a causa de tu esplendor ; yo te arrojaré por tierra ; delante de los reyes te pondré para que miren en ti. .... Todos los que te conocieron de entre los pueblos se maravillarán sobre ti ; espanto serás y por siempre dejarás de ser" versículos 17 y 19. El versículo 19 es una condena final a Satanás, pero en ningún momento se ve una transformación de la apariencia original del demonio, los pecados de Satanás se pueden resumir en orgullo, vanidad, en pretender usurpar el trono de Dios y ser semejante a él : "Tu que decías en tu corazón : Subiré al cielo ; en lo alto, junto a las estrellas de Dios, levantaré mi trono, y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del norte ; sobre las alturas de las nubes subiré y seré semejante al Altísimo .Mas tú derribado eres hasta el Seol, a los lados del abismo" Isaías 14: 13-15