|
|
♥ 「 cαяdιиαl de lα тιeяяα 」: .oo3 } Lɑ ɴocңe ᴅel вeso carϻíɴ
Elegir otro panel de mensajes |
|
|
| De: ~Ariadne (Mensaje original) |
Enviado: 28/11/2012 18:56 |
 |
|
“No me despiertes en Ovidio” cantan a coro, “quiero postergar mi sueño; pues pronto el largo letargo llegará a su fin”. Dormitando, continúan su cálido abrazo, “a cambio, alumbraré el camino para Primavera y, con ella, renaceré. Pero no me despiertes en Ovidio, quiero postergar mi sueño; para que el crío, en mi recóndito, al largo letargo de fin en el inicio del nuevo albor”.
|
|
Hay una suave nevada plateada, cargada de pena, cubriendo los
brazos torcidos, desamparados de verde, de seres que fundan
el frondoso bosque. Una lluvia, que crea un techo de lágrimas en
la copa de aquellos seres, y que trae consigo una nostálgica
melodía que encandila el dormir de la vida.
Esta noche es mágica; una nueva vida surgirá de las
entrañas del impertérrito bosque, un nuevo cielo se despeja y
da paso al brillo de las lunas, el orden de la vida se instaura
de nuevo. Y con la fuerza de miles de sueños y memorias de una larga hibernación.
Hay una saeta de luz que impregna el camino hacia el
centro, el corazón, del bosque. El majestuoso árbol brilla con
una intensidad que podría avergonzar a las dos lunas del
Gran Imperio Mariollette. Todos se reúnen a su alrededor,
gente de todas partes del Imperio que comparten las mismas
ansias de un nuevo despertar que embriague sus corazones.
|
Visitantes de diferentes partes del Imperio ponen rumbo hacia el vigoroso Cardinal de la Tierra. Y no es para menos: el inicio de la Primavera está ya aquí, en el corazón de la vida. ¡Cuantísimos frutos dará este vetusto e inmenso bosque! Interesados mercaderes apremian por ser los primeros.
Y sin embargo... No es la riqueza lo que más ostenta: la exorbitante belleza, el ardor apasionado del amor que se respira en la ncohe, la nostalgia de un oscuro horizonte ovidiano que poco a poco resplandece en un nuevo mañana para la Primavera. Esta es la única ocasión del año en el CT en el cual vereís resurgir millares de flores de infinitos colores y, sin embargo y a media noche, pequeños copos cubriran a las cálidas marionetas. Ovidio y Primavera son los principales amantes, y su fusión centelleará en el crepúsculo.
Mas, ¿cuántas rimas y leyendas aconpañan las memorias de la noche? ¿Y cuáles... ciertas? Flores que nazcan de entre los más apasionados amantes. Ojos expectantes que entornan sus miradas hacía el cielo de la noche, en espera de un copo rojo el cual compartir con su amado por el resto de sus vidas; o quizás, un copo esmeralda, que según dce la leyenda, otorga la vida eterna... Y hay quien juraría, que han oído un rugir en la espesidad de la noche...
|
|
La noche del Beso Carmín ha comenzado... ¿cuál será su desenlace? Los hilos del destino resuenan como cuerdas de un harpa; y las oportunidades de la noche harán latir a sus marionetas al compás del corazón del bosque.
|
|
|
|
|
|
 El tipo de la tienda al parecer había sido convencido por todo el cuento que Raki le había lanzado, tomando la calavera con sus manos, encendiendo una pequeña lámpara y tomando su lupa para inspeccionarla cuidadosamente. Raki solo lo observaba a él y hacia el callejón, su rostro semi-oculto y portando una sonrisa congelada como máscara, sudando frío y en el fondo más que impaciente; por qué tardaba tanto, acaso dudaba de ella.
Terminó la inspección, y el dueño de la pequeña tienda sonrió de lado, aceptando la oferta. Raki sonrió y asintió en forma de agradecimiento, saltando de alegría por dentro. ¡Finalmente tendría el dinero para largarse de ahí! Aunque... la sonrisa del tipo de la tienda era extraña también, como si se hubiese ganado la lotería con esa reliquia... Pero en realidad no le importaba, con tal de tener el dinero. Además, no podía ponerse picky con cosas que no eran suyas, haha.
¡Al fin la bolsa con monedas estaba en sus manos! Ahora iría a conseguirse una ropa nueva~ y si sobraba algo luego de comprar el pasaje se conseguiría una buena comida--
"En teoría no debería de pagarte porque eso me pertenece." La bufoon se detuvo en seco, escondiendo por inercia la bolsa de monedas en su ropa. "Es una ladrona, afuera hay un par de wassermaskes buscándola. Pregúntele al de la otra tienda si no me cree."
El señor de la tienda asomó el rostro por el pequeño mostrador, y Raki esperó hasta que Hazuki terminara su discurso para voltear finalmente hacia él, codos apoyados en el mostrador tras suyo, expresión de confianza, personaje listo.
"Ah, pero, ¿sabes qué? Ya lo vendí," señala al dueño de la tienda con su cabeza, "Le pareció una buena oferta, así que no creo que le importe de quién haya sido el objeto primero..." se encogió de hombros, totalmente desentendida de lo que clamaba Hazuki, "Así es como funciona aquí, ¿no lo sabes?", bufó, incorporándose para empezar a irse por el lado contrario del que llegó. "Ahora, si quieres recuperarlo, habla con él", señaló nuevamente al dueño de la tienda con su cabeza, y con su brazo descubierto se despidió de Hazuki, empezando a andar.
"Aparte--", volvió a hablarle en voz alta, de espaldas a él, dando pasos largos, "¿Acaso eso no le pertenece a la niñita? Realmente no pareces de los que tendrían niñitas como compañía así que~~", voltea parcialmente su rostro, mirándolo de lado, fijamente, "¿No eres tú el ladrón aquí?"
Sonríe ampliamente, mientras de entre sus ropas consigue su máscara, que logró cubrir la mitad hacia Hazuki de su rostro, pálida máscara de amplia y macabra sonrisa. Y en ese instante, la bufoon corrió más rápido, y pareciera que se mezclara con la oscuridad hasta desaparecer, ilusión óptica, juego mental; el Tercer Acto estaba en escena, el tercer escape, y esta vez no podrán atraparla como culpable.
----------- omg las respuestas se pierden entre todas las de Crawl y Alessa xd
y Dakini hentai que anda viendo bajo las faldas u/u (?) |
|
|
|
|
 Fw Dakini // Raki + Hazuki
"¿Heee? ¿Algo redondo y rojo? Heheh, no sé~" Sintió un leve tic en su ojo; cómo le irritaban esos ladrones primerizos que no sabían mentir cuando eran atrapados. Pero no era una primeriza cualquiera como para seguir insistiendo con algo que no sabía si le traería las ganancias esperadas y de paso arriesgar un encuentro. "¿No se habrá caído por aquí? Esa caída haría caer cualquier cosa valiosa hehe...". Dio un paso firme adelante, queriendo intimidar con ello para obligarla finalmente a devolver a Shin, pero rápidamente lanzó una esfera roja de cristal, tomándola desprevenida. "¡Atrápenla!", se sorprendió por lo abrupto de su reacción, viéndola correr tan rápido que sabía no se trataba del objeto que andaban buscando. La niña a su lado se enojó, una expresión demasiada severa para ser un infante, gruñendo por lo bajo y recibiendo la esfera roja entre sus manos. Rápidamente su expresión de rabia se convirtió en un puchero, y creyó que había imaginado tanta molestia.
Estaba dispuesta a perseguir a la pelimorada (tenía desde siempre cierto gusto por las persecuciones), pero la menor comenzó a dirigirse al pelirojo. "Que me devuelva a Shin, por favor!" y con toda sus fuerzas lanzó la esfera al suelo para romperla en muchos fragmentos. El rostro se le crispó de asombro, por qué había hecho eso? Por qué había llamado la atención del vendedor? Si bien no era de las que creía que con charlar se solucionaba todo, no era la reacción que esperaba de la niña. Le dirigió una rápida mirada de reproche, pero parecía que tenía un plan: ofreció al pelirojo como conejillo de indias, una sonrisa dibujándose su rostro al ver al vendedor tan irritado y el desastre en el suelo. Claro que rápidamente la sonrisa se esfumó cuando el hombre habló.
"800 monedas. Paguen, o llamaré a los Wassermaskes", el viejo la miró de pronto a pesar de hablarle a la niña, y frunció notoriamente el ceño, cruzándose de brazos. Qué estaba insinuando?... Claramente había aprendido a mostrarse ofendida con tal de no llamar la atención y culparse con sus gestos sobre la verdad. No que le avergonzara mucho, después de todo... Pero perder su botín por culpa de otra ladrona y una niña no era algo que estaba dispuesta a aceptar. "-y le traeremos 900 monedas! Tenga! Esto en garantía" ¿Cómo habia hecho eso?... Tuvo que ocultar su asombro, esa niña era realmente un saco de sorpresas; más importante, cómo conseguiría 900 monedas en caso de que el pelirojo no convenciera a la pelimorada? Y ni hablar de gastar su botín, no pensaba pagar a cambio de que el viejo se callara frente a los Wassermaskes. "3 horas, o no prometo nada", gruñó el hombre, volviendo a su puesto de trabajo con el gran arma en sus manos. "Shin vale 1.000 monedas!", y la niña se aferró a sus piernas, apuntando al pelirojo entre murmullos y balbuceos, llamando la atención de toda la gente. Claramente, tanta exposición por medio de una niña llorona no era lo que estaba esperando de este festival. Debía calmarla de alguna forma, pero cómo, con la pelimorada tan lejos y los ojos de medio mundo encima?...
"¿¡Quieres controlarla?!" "Por qué debería obedecerte?!", le gruñó de vuelta, sujetando el hombro de Dakini para acercarla más a ella, como si con eso la protegiera de los gritos del hombre; en el lío que la había metido al no detener a la pelimorada y ahora le exigía cosas. Claro que no esperaba que le limpiara el rostro a la pequeña, aunque no hubiera sido nada de delicado en ello. La palmadita en la boca fue algo que ciertamente le sacó unas ligeras risitas, especialmente al verla tan sonrojada-- Ugh, no tomar cariño con nadie, menos con los niños; es como encantarse con un cachorrito. Hazuki partió a la tienda, y la peliblanca reclamó por Shin otra vez, tomándose de sus ropas y mirándola, mirándola... "En serio eres como un cachorro", bufó, usando la manga de su chaqueta para limpiar un par de manchones que dejó el hombre con el trapo sucio con el que le limpio la cara. La tomó de la muñeca y a paso rápido siguió a Hazuki, filtrándose por un rincón de la tienda para ver lo que sucedía, y simplemente asaltar a la pelimorada si seguía oponiéndose a entregar el objeto.
"Ah, pero sabes qué? Ya lo vendí". La pelimorada no parecía mentir, desde donde estaban podía ver claramente la bolsita de monedas que escondía, algo que no llevaba hace minutos atrás cuando la vio caer. "¿Acaso eso no le pertenece a la niñita? Realmente no pareces de los que tendrían niñitas como compañias así que~~ ¿No eres tú el ladrón aquí?" Chistó los dientes, sosteniendo con fuerza la mano de Dakini mientras la veía escapar; ya no importaba lo que hiciera o si escapaba. Con cuidado se acercó al pelirojo, notando también las bombas de humo que tenía entre sus manos. "Tú, lanza esas bombas por aquí", le susurró, mientras tomaba un trozo de tela de esa tienda y se cubría la cabeza, especialmente el cabello, tal delincuente; con los Wassermaskes cerca no podía permitir ser ni remotamente reconocida, porque realmente la única intención que tenía al final de la jornada, era de ver el maldito árbol y los malditos copos de nieve, como alguien normal. Y en el fondo, podía sentir la adrenalina de lo que haría, aunque fuese por obedecer los caprichos de una menor; era algo realmente importante para esa niña y no podía explicar la necesidad que tenía de solucionarle un poco las cosas. "Haré un poco de destrozo para distraerle, de acuerdo? No dejen que los vean", seguía hablando en susurro, mientras que de sus pies comenzaban a alzarse sombras con forma de personas. "Y tú, aprovecha el desorden para recuperar tu objeto. Brilla, verdad? No te será difícil aún con el humo", le susurró a Dakini, para luego mirarlos a ambos y afirmar con su cabeza, botando algunas cosas para generar ruido, esperando rápidamente por el humo para dificultar aún más la vista en esa oscura tienda, mientras sus sombras comenzaban a botar cosas en otra sección del lugar y golpear las puertas. Se escondió en un rincón de la tienda, cerca de la ventana por si necesitaba escapar; estaba en una posición cómoda tanto como para manipular a sus sombras como para escapar rápidamente. Si salía de esta sin ser encontrada, definitivamente se pondría en primera fila para el espectáculo en el árbol luego de comprarse una cantidad considerable de comida picante.
----
mis post cada vez menos influyentes y hoshi cada vez más cuma, estoy indignada con la vida (?) lamento haber roleado tanto con caw, no me pude contener ahaha
kyaa dakini sucio! no confío en tu cara de niñita buena u//u (no mentira me derrite completamente y a hoshi más <333)
now wait for me plss? espero no quedar muy atrás ; ;U~ me voy, pero volveré! /out |
|
|
|
|
 ¡Vaya! ¿tan fuerte eres que podrías cogerme al caer? ¡si que debes ser alguien increíble! -se sercioró en que sus alas batieran con normalidad antes de contestar "La verdad.... lo dudo!" no iba a mentirle, mentir era malo "Pero puedo reducir la caida lo suficiente, así que vamos! Suélta..! AHHGH!" no pudo terminar siquiera la frase cuando la rama de la que se sostenía el chico se torció y terminó con el niño encima, ambos precipitándose al suelo. Trató de batir sus alas con fuerza, pero el ángulo de caída y el peso extra no le ayudaban en nada, así que instintivamente cedieron para no forzar el músculo, y se envolvieron al rededor de ambos. Apretó los ojos, listo para el impacto, pero en vez de chocar con el suelo duro que esperaba, colisionaron con algo suave. Sus alas se abrieron de nuevo, y cuando al fin se aventuró a abrir los ojos se encontró con la amplia sonrisa del niño peliblanco, como si no acabaran de caer desde quien sabe cuántos metros de altura. Para aprender a volar, es deber aprender a caer, estaba acostumbrado o algo así a ello, y al parecer el niño también! ¿Quién sería? ¡Ha sido genial! ¿Te encuentras bien? Si no, ¡un buen dulce te roconfortará! parpadeó ¿Le iba a dar de sus dulces? ¡Ven! ¡sentémonos a comerlos! aquí se está muy cómodo y comer en compañía es más divertido. ¡Además! debería agradeceroslo, ¿no? ¡Les iba a dar de sus dulces! "¡Hey Aleix, mira! ¡nos dará dulces!" Miraba de su amigo al chico y de regreso, entre feliz y extrañado, como si no lo creyera del todo. No tenía idea de quién era él, pero si les iba a compartir de los dulces que había arriesgado su pellejo por proteger, entraba automáticamente y con pase VIP a sus buenos libros. Se llevó uno de ellos a la boca, protegiendo su parte de Aleix y sonriendo, se dirigió al peliblanco "¿Quied erez?" vio a la chica rubia, quien había sido sobre la que habían aterrizado -y de cierta manera les había salvado la vida también!- y nota por primera vez el enorme león a su lado y traga el dulce de la impresión, saltando hasta estar de pie - "¿Y Quién eres tú?" se dirigía a ella, pero no podía dejar de ver el león. Era imponente, y sus deseos se dividían de igual manera entre querer tocar su melena o alejarse de allí "Y.. no, no, no estamos perdidos! Bueno, Aleix -" señala con el pulgar a su amigo "-y yo no lo estamos! Y no necesitamos chaperones, podemos cuidarnos solos" asiente, orgulloso. Entonces recuerda que de no haber sido por ella les podría haber ido mucho peor, y se inclina ante ella, uniendo las palmas de las manos frente a su rostro "Gracias por haber estado de manera casual debajo de nosotros y disminuir nuestra caída Señorita dueña del león!"
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
siento el retraso ; ; semanas loquillas |
|
|
|
|
|
La Noche del Beso Carmín ha comenzado...
|
|
Una lágrima. De emoción, de desolación, de renacer, sepultada, de vida y muerte... Cae, última en bañar los rostros de las marionetas aquí presentes.
Una última gota... de descongelación. Lágrimas de amoción fueron vertidas ya de las majestuosas copas de la fronda. Abriendo sentimientos maravillosos, inundando hasta los corazones más oscuros.
Un final nos llena de tristeza, mas todo final tiene un comienzo... Y éste, el más feliz.
Poco a poco, frente al indescifrable cielo oscuro, el bosque drena el fulgor intenso de las lunas. Y éste áurico don... Comienza en un árbol, un primer y majestuoso árbol, un corazón
El Gran Árbol es la fuente de luz del bosque, su máximo esplendor. Y, tal y como un corazón palpitante, éste impulsa su brillo por el resto de sus hermanos. Primero los cercanos... hasta que el Cardinal de la Tierra es el gran faro que guía e ilumina los cielos.
Las flores, todas en blanco y negro, despiertan su color lentamente a los pies del Gran Árbol... y en algunas ocasiones, las más puras y sinceras, a los pies de dos corazones unidos.
El cielo, arropado por las oscuras nubes bañadas en la luz nívea del bosque, ruge desde su alma.
Mas no trata, despiadado, de diluviar sobre nuestras cabezas.
Si no para arroparnos en ésta noche tan mágica... Con sus copos prístinos.
¿Cuántas leyendas se harán realidad ésta noche? ¿Serán ciertas?
¿Un copo rojo caerá sobre los enamorados, uniéndolos enternamente? ¿Uno verde, quizás...?
Y... ¿qué rugir se esconde en la profundidad de la arboleda...?
|
 |
|
|
|
|
|
 "Rrroooaaarrr~~~ Rrrooaawrrr~~"
La niña gruñe con su voz fina e infantil, haciendo muecas que tratan de mostrarse aterradoras pero solo asientan su imagen juguetona. Y ríe, y abruptamente se calla. Esperaba algo de respuesta, pero nada recibió.
"Gaaaooooo~~~~ Gaaooooooouuu~~"
Intentó de nuevo, tratando de imitar lo que había escuchado; ¿tal vez tenía que hacer como un dinosaurio?
"Gaaoooouu~~" probó más fuerte y con más 'sentimiento', meciendo sus piernas colgando del gran tronco partido por la mitad en el que se sentaba.
Delante de Rinne, los pequeños copos blancos que caían resaltaban sobre la tierra muerta, deshaciéndose en instantes; el tronco donde se sentó marcaba el límite de la nueva vida, rechazada por el hedor putrefacto que provenia de lo que cubrían los únicos árboles del centro del bosque que fueron permitidos sobrevivir.
Parpadeó una última vez, y su sonrisa se amplió al sentir las leves vibraciones justo antes de que la bestia rugiera de vuelta, más fuerte que la vez anterior, despertando un poco más de su letargo. Rinne aplaudió a esto como si hubiese salido el acto principal en el circo, y reanudó su imitación del rugir de la bestia.
¡Estaba tan ansiosa de jugar con alguien parecido a ella! |
|
|
|
|
 |
Había una cosa de la que estaba totalmente seguro: ¡comer con gente era más divertido! Y allí estabamos los tres, disfrutando de los dulces y de la animación del ambiente.
- ¿Humm? - Justo cuando estaba devorando un pastel con forma de flor el niño me pregunta por mi nombre. - Haddend... Hadd... - ¡Y era imposible cntestarle con la boca llena! Pero noté como aquel asiento tan cómodo en el que habíamos estado empieza a moverse. Me giro y veo a quién se dirige aquel joven: había una mujer detrás nuestra y un... ¡León enorme! Terminé de tragar todo el pastel para poder hablar.
- ¡Lo lamento mucho! ¡Caímos sin querer! Bueno... Me gustaría saber quién se caería por placer... Pero ¡lo que quiero decir es que no fue con mala intención! - Mis ojos viajaron desde el rostro de la mujer rubia hasta el león. - ¡Woah! ¡Es... enorme! - Me acerqué a él, si fuese peligroso ya nos habría mordido al caernos encima suya. Alcé mi mano despacio para acariciarle. - ¡Y suave! - Empecé a reír. - Es verdaderamente guay. ¿Cómo se llama?
Oh, ¡habalando de nombres! Aún no había habido presentaciones reales. Sin dejar de acariciar a aquel león, me volví hacia los tres.
- ¡Mi nombre es Hayden! Soy un licht del Templo del Cielo y... - esto último fue dirigido a la rubia. - ¡Tengo 12 años! No creas que no sé cuidarme solo. Y hace años que sé vestirme yo solito. - Simplemente no podía evitar sonreír cuando hablaba de mis grandes logros, ¡por que me hacían un gran hombre! O eso me decía un capataz licht. - No vine solo, ¡mis acompañantes se perdieron por el camino en un abrir y cerrar de ojos! Pero como sabía que pronto los encontraría, por que estamos en el mismo lugar, ¡decidí aprovechar el festival y comprar dulces! - ¿O quizá no? Si había mucha gente, ¿no sería difícil encontrarlos?... "¡No para mí!"
Entonces el gentío elevó sus voces y con ellas, sus emociones. Alcé la vista al centro del festival. El Gran Árbol brillaba con una intensidad que jamás había visto ni aún viviendo tan cerca de las dos lunas en el Templo. Estaba asombrado, eufórico. ¡Quería dirigirme hacía allí!
Pero antes de que pudiera hacer nada; pequeños y finos copos cayeron en mi cabeza, en mis hombros y en mi mano elevada para atrapar uno. Era tan pequeño, tan frágil... pero que, bañado con la luz de aquellos árboles, parecía brillar junto a ellos en la palma de mi mano. Me volví de nuevo hacia mis nuevos amigos.
- ¡Vayamos hacia el gran árbol!
|
Me van a querer matar pero posteo con Sylph mañana ;UUUUU; tengo muuucho sueño y además... quiero una buena entrada <3 qué mejor que esta oportunidad? |
|
|
|
|
 Sintio al Teufel acercarse a ella, muy innecesariamente, la distancia que ella habia puesto entre ellos era casi perfecta, jamas podria ser perfecta completamente ya que para eso ella tendria que estar en el templo y el unos cuantos metros bajo tierra... y aun sospechaba que no era suficiente- No esperaba que quisieras tan pronto un momento a solas, Alessa...- se tenso cuando dijo su nombre otra vez, mirandolo furiosa, realmente odiaba que ese tipo supiera su nombre, y ese maldto cigarro lo que hacia era empeorar su humor- Hacía allá. Ahí está el Gran árbol... Ahí estará toda la diversión -cuando iba a decirle que disfrutara su caida, todo se ilumino. El Gran Arbol desprendia un hermoso brillo que no tardo en ser acompañado por sus hermanos, hermosos colores volaban por todo el lugar iluminando el cielo. Incoscientemente bajo en un pequeño hueco entre las personas, no dijo nada, solo mantenia su vista fija en el espectaculo que le daba la naturaleza. Jamas habia visto algo tan hermoso, ella no era alguien de mucha imaginacion asi que incluso sus sueños tendian a ser algo... aburridos, por lo que ver algo tan hermoso le parecia maravilloso, sacado de los cuentos que solia leerle su madre. La comisura de sus labios se elevo un poco mientras observaba y su ceño comunmente fruncido se relajo un poco, se sentia tan relajada y hasta casi feliz...observo como las flores monocromaticas cerca de ella, comenzaban a tomar color, quizo tomar una pero sentia que las dañaria al tocarlas. Sus sentidos volvieron a funcionar llevandole un suave olor a tabaco hasta la nariz y volvio a fruncir el ceño, por un segundo se habia olvidado de su molesto acompañante... no, prisionero. Con un movimiento suave de muñeca apago el cigarro del Teufel, pero no le dijo nada y tampoco lo observo, no queria perderse ni un segundo del Beso Carmin.
--------------------
*A* alessa sonrio dfksoñifjñoisdj *dies*
preparando la respuesta de Aleix ;_; |
|
|
|
|
 Hizo un mohin cuando vio al chico cayendo y alejando sus hermosos dulces del lugar seguro que era su estomago. Se cruzo de brazos algo enojada hasta que recordo a su compañero- ... Eryx!- miro abajo pero por alguna razon no habian caido donde debieron haber caido (?) y ademas estaban sobre una chica con un majestuoso leon- woah! -volo hasta ellos viendo al leon con admiracion, jamas habia visto uno fuera de sus libros y era realmente genial, y grande- ¡Ha sido genial! ¿Te encuentras bien? Si no, ¡un buen dulce te roconfortará! - Miré al otro/a salvador/ora. - ¡Ven! ¡sentémonos a comerlos! aquí se está muy cómodo y comer en compañía es más divertido. ¡Además! debería agradeceroslo, ¿no?- miro al niño albino parpadeando varias veces y despues esbozo una gran sonrisa- ¡Hey Aleix, mira! ¡nos dará dulces!- Eso! tu si eres alguien agradecido con tus salvadores- se acerco tomando los dulces que le ofrecia, metiendolos todos en su boca. Escucho a la chica leon decir algo pero, no le presto atencion, estaba muy ocupada llevando a los dulces a un lugar seguro (estomago) noto a Eryx hablando mientras protegia no muy disimuladamente sus dulces.... Pero que falta de confianza! ¿acaso creia que ella se los robaria?. Sonrio macabramente, mientras acercaba su mano a los dulces de Eryx- Y.. no, no, no estamos perdidos! Bueno, Aleix y yo no lo estamos! Y no necesitamos chaperones, podemos cuidarnos solos -levanto las manos inmediatamente cuando escucho su nombre- ah si... somos dos fuertes e independientes power windsonh -declaro orgullosa, tomando finalmente una bolita de chocolate de Eryx- Ja! eso te pasa por creer que te robaria tus dulces. Asi que te los robe para que aprendieras tu leccion -concluyo orgullosa tragandose la bolita de chocolate. Dirigio su mirada al chico albino mientras se presentaba- ¡Mi nombre es Hayden! Soy un licht del Templo del Cielo y... ¡Tengo 12 años! No creas que no sé cuidarme solo. Y hace años que sé vestirme yo solito.No vine solo, ¡mis acompañantes se perdieron por el camino en un abrir y cerrar de ojos! Pero como sabía que pronto los encontraría, por que estamos en el mismo lugar, ¡decidí aprovechar el festival y comprar dulces! -inflo su pecho orgullosa apoyando las manos en su cintura- pues yo soy un Windsonh y me llamo Aleix y me visto solo desde que uso pañales! -tomo a eryx del cuello y lo señalo- y el es mi fiel compañero de batallas Eryx -una parte de ella tuvo un pequeño dejabu como si antes ya se fueran presentado a todos, pero lo ignoro.
Empezaron a escuchar gritos y ovaciones, y repentinamente todo se ilumino- woah!! -volo unos cuando centimetros sobre el suelo emocionada por el espectaculo, los arboles empezaban a iluminarse uno por uno- ¡Vayamos hacia el gran árbol! -asintio rapidamente de acuerdo con Hayden- El que llegue de ultimo compra mas dulces! -retro saliendo a toda velocidad impulsada por sus alas.
--------------------
Siento que Hayden y Aleix se llevaran muy bien xd
odestruirantodoenelproceso |
|
|
|
|
 El licht peliblanco parercia no haber averse dado cuenta de que Kanna estaba junto a el, ignorandola por completo. Kanna: Hey, no te hagas el desentendido! ¡almenos hasme caso!-- le grito a Hayden, a la peliazul le molestaba que la ignoraran. Depronto sintio que caer algunos copos sobre su cabeza. la joven licht levanto la vista hacia el Gran Arbol que brillaba con gran intesidad; tambien lo hacian los demas arboles cercanos, las flores que habia en el suelo recuperaban lentamente su color; todo se habia convertido en un gran espectaculo de luzes y color. La licht peliazul estaba maravillada por lo que veia, y se hubiese quedado asì hasta que Hayden hablo.
¡Valla-mos hacia el Gran Arbol!-- grito el peliblanco y salio corriendo.
Kanna: Esperen, yo tambien quiero ir!-- dijo, tratando de seguirles el paso. mientras los seguia le par5tecio escuchar un rugido probeniente de lo profundo del bosque
 El sujeto de pelo plateado no dijo nada ante el com,entario de Vaati, el yokai no le tomo importancia a este detalle; pues se distrajo al ver que el Gran arbol comensaba a brillar dando inicio a la Noche Carmín, una m,acabra sonrisa se dibujo en el rostro del teufel mientras veia caer los copos de nieve sobre su mano. Vaati se incorporo poniendose de pie ( pues se habia sentado anteriormente) chasqueo sus dedos teletransportandose una vez mas, apareciendo a unos poco metros adelande de una licht y otro teufel. no le importo el haber pisado algunas flores cuando aparecio, solo le interesaba estar lo suficientemente cerca para cuando apareciera un copo esmeralda.
|
|
|
|
|
 Solo podía escuchar la inmensidad del bosque que los rodeaba, junto a pequeños cantos de animales que vivían allí, que aunque no podría entender, los comprendía.
Ambas princesas estaban ensimismadas, pero Shirahoshi en realidad estaba más aterrizada, muy pendiente de todo a su alrededor. Era la primera vez en un lugar así, tan lleno de vida, que tenía que captar esos momentos muy bien para guardarlos en su memoria. Recogió sus rodillas a su pecho y respiraba lentamente, serena; no sentía temor.
El bodyguard de Ginko-sama llegaba en un apuro, muy preocupado por su protegida, y Shirahoshi sonrió amable dándole un saludo cordial. Llegó la mascota de Armand también, y acarició con cuidado su pelaje, sonriéndole de igual forma.
Escuchó unos gruñidos, distintos a los del bosque y a los de Ginko-sama y compañía, y ansiosa observó en la cabina saliendo quien faltaba. Sonreía ampliamente al verlo bien. "¡Heracles-sama! ¿No está muy herido?" lo miraba fijamente, aliviándose de no encontrar nada grave.
Se levantó y se sacudió su falda. Dio un último vistazo a la vista que la rodeaba, e inhalando profundamente empezó a andar. Caminaba lento, sin querer realmente alejarse de esa espesura. Era mucho mejor de lo que había escuchado, de lo que decían los cantares. Esos cantares antiguos que pasaban de sirena en sirena, sobre la tierra que nunca serían capaces de pisar...
Pero eso ya no más. Ahora ella es parte de la nueva generación, la que puede andar junto al resto de marionetas, la que puede disfrutar de estos bellos paisajes. Guardará en su corazón el sentir de sus antepasados, no quedarán olvidados, y los juntará con lo que sentía en ese instante, esperando que de alguna forma sus sentimientos lleguen a ellos.
Volvió hacia Heracles, esperándolo, pasando algo desapercibido el rugir lejano. Y en ese exacto momento sucedió. Uno a uno, los árboles iban encendiéndose en luz. Una a una, cada hoja, cada pétalo se iluminaba, brillante, aún más lleno de vida. Shirahoshi quedó anonadada, casi conmovida hasta las lágrimas. "Hermoso..."
El evento estaba empezando, pero la princesa decidió que allí tenían la mejor vista de todo. |
|
|
|
|
FW ~ Hoshi + Hazuki
Asiente de forma ávida ante las órdenes de Hoshi, un gesto de extrema concentración en su rostro.
Y pasa el tiempo... y pasa... y espera a Hazuki... y porqué demora siglos que la pone nervioooosa! Arg! Y toma de las manos del chico las bombas y las arroja con los ojos bien cerrados al interior de la tienda, el humo saliendo sin dificultades en silencio, las exclamaciones sorpresivas del dueño y unas cuantas personas alrededor de la tienda generando un momento de caos.
"Yay!"
En realidad, Hazuki llevaba con las bombas en la mano tan solo 1 minuto, pero a la peliblanca le parecieron horas. De esas bien largas, cuando uno mira el reloj y este se burla con su manecilla larga.
Sin pensarlo dos veces, Dakini se abalaza en medio de la nube ligeramente gris, buscando a Shin, el brillo en su cabeza claramente visible en medio del humo.
"Shin!" Dice y tose, el humo ahogándola, pero aún así corre hacia la calavera y la toma entre sus manos. "Ah!" Alguien se tropieza con ella en la confusión y la bota, mientras que para evitar la caída el cliente patea a Shin, perdiéndose nuevamente dentro de la tienda.
Creía que iba a llorar, y tenía tanto sueño, se quería ir a dormir. Haa.
Se quedó unos segundos tirada, manitos en su rostro, y de pronto le caen varios productos sobre ella, y sintió el tirón de la minetita que no era la minetita de su Shin.
Dakini se levantó, adulto, con un suspiro y una mano cubriendo su rostro -- no tenía máscara. Sus ojos relucieron entre sus dedos, y clavo dos afiladas garras a un lado de su mejilla, geerando dos puntos pequeños rojizos.
Demonios.
Tendría que buscar a Shin en un rato más. Pero estaba calmo, ah, esto atrasaba sus planes solo un poco. Después de todo, ya había avanzado bastante. Descansaría unos momentos hasta que pasara el efecto de la minetita...
En medio del humo, la figura en yukata desapareció.
Shin, en tanto, rodaba ante los pies de un par de botas café.
__________________________________________
FAIL post is FAIL, pero creo que uno tiene mejores días que otros.. creo? OTL gomeeen Waifu, Goldi! *se suicida*
|
|
|
|
|
 La Licht lo miró con rabia contenida y no pudo evitar las carcajadas, aunque solo un par de ellas, pues de pronto el Gran Árbol se iluminó, y con un sutil efecto dominó, el resto de árboles se fue iluminando también, generando un espectáculo que lo dejó boquiabierto por un segundo. No notó que Alessa comenzó a descender hasta que sus pies tocaron la tierra, y desde ahí todo se veía mejor aún: los colores y las luces lo rodeaban, a él y todos, por completo.
"Son tantas luces, como un sueño... Es hermoso"
Se sorprendió ligeramente al escuchar aquel murmullo, mirando a la pelinegra, notando que sonreía ligeramente. Por un segundo no era esa Licht, por un segundo él no estuvo ahí... Por un segundo, saboreó una vida que no fue. Una vida que nunca será.
Apretó los dientes y se llevó una mano a la cabeza, arreglándose el cabello para espabilarse, con la otra llevándose el cigarrillo a su boca y fumando, dejando el humo caer muy suavemente por sus labios. No sabía si la mujer se había hecho más fuerte durante los años o él se había ido debilitando; ninguna de las dos opciones le parecía conveniente. El deleite de su cigarro pronto fue acabado por la mujer, dejando un hilo de humo que se fue en dirección contraria al gran árbol. La miró, aunque ella estaba distraída en otras cosas (el brillo estúpido) y había vuelto a fruncir el ceño, había vuelto a ser la mujer molesta que era... Entre los murmullos de asombro, pudo escucharlo. Un rugir, suave a la distancia, pero potente, lleno de fuerza, lleno de peligro. Perfecto, la diversión que necesitaba, basta de tonterías y recuerdos estúpidos. Incluso otro Teufel había aparecido de la nada a unos metros, estaba buscando aquel rugido, también? Esperaba que si, pues entre más, mejor, no?
"Me largo", dijo a secas, dando media vuelta en sus talones y caminando a paso rápido en dirección contraria al gran árbol, dejando a Alessa entre la multitud, aunque sabiendo que le seguiría con la excusa estúpida de "impedir que no tocara a nadie y mantener la paz del festival" y esas cursiladas propias de los del Templo. Se llevo nuevamente el cigarro a su boca, encendiéndose una vez más al contacto con sus labios, siguiendo el humo. Se iba a divertir, con o sin ella.
"Seguro que aquel copo rojo caería sobre nosotros, no crees?"...
- - - - - -
aqui está mi respuesta! es muy mala, espero no le moleste que haya retirado a caw ;//;! quiero tener a esos dos más tiempo juntos pero también quiero ver al monstruo y y espero lo siga, espero no haber arruinado ningun plan ;////;
|
|
|
|
|
 Ah, escuchar a Alik-taicho siempre era tranquilizante. Ella al parecer no se molestaría si Teo los acompaña, que era lo que más le preocupaba. Así que asintió a las indicaciones que ella dejó, y se quedó un rato rezagado decidiendo con Teo.
"Um... yo creo que no es mala idea pasar esta noche en grupo..." empezó, llevándose una mano al cabello, algo inseguro. "Alik-taicho y Darío no son malas personas..." sonrió leve, "Podríamos pasar un rato con ellos... Y luego regresar a casa..."
Repentinamente se sonrojó, imaginando de más, carraspeando para tratar de disipar esos otros pensamientos.
Da un par de pasos hacia adelante y voltea hacia Teo, sonriéndole leve. "¿Vamos?" dijo, esperando que lo acompañe, caminando juntos tras el resto del escuadrón.
"Ah, por cierto--" empezó, hablando bajo, solo para Teo "--a-al menos en público, en frente de ellos... besos no..." negó levemente con la cabeza, intranquilo. "P-puede ser algo molesto e incómodo para ellos, por eso..." Trató de verse en la situación de su escuadrón, que de seguro se sentirían algo incómodos si empezaban a comportarse así de melosos como algunas de las parejas que andan por allí...
Finalmente, alcanzaron a su escuadrón en la plazuela, donde estaba el tronco que no se veía tan raro como dijo Alik...
-------------------- como takkun, también espero que no le moleste a Kait uvu;
y esto es como si fueramos bien suckers o rudas que en vez de ir al raburabu nos vamos donde hay sangre muerte y destrucCIÓOOOOONNN *grito gutural(?)*
pero no, son nuestros pjs, no nosotras, nop (?) |
|
|
|
|
 |
- ¡DÓN-DE ES-TÁ EL DI-CHO-SO FES-TI-VAL! - Mi grito-gemido se debía de haber oído por todo el bosque. - ¡Menuda lata! ¡Me han debido estafar! Estoy tan lejos que ni siquiera vislumbro las luces de la plaza. - Recordaba que otros años había habido luces, ¡muchas de ellas! Tantas que creía que se verían hasta en el Templo del Cielo. Sabía que no debía haberme separado de Drake y Adriana, pero es que tenía tanta curiosidad...
Hace algunos días, un hombre en el Cardinal del Agua me vendió (a MUY alto coste) un mapa de un tesoro muy antiguo. Según aquel hombre: este tesoro solo podía "verse" (así lo gestualizó, con sus mugrientos dedos haciendo comillas en el aire) en la Noche del Beso Carmín, en las afueras de la gran plaza del árbol central. Muy, muy a las afueras.
Por supuesto, no hubo nada que me dejara con mayor asombro que esa leyenda, ¡así que lo compré sin duda y esperé ansiosa hasta éste día! Les dí una muy mala excusa a Drake y Adriana, pero creo que coló por que no preguntaron más... O eso, o el ruido y los empujones al llegar los abstuvo a decir nada.
Así pues, llevaba hooooras dando vueltas como una idiota, escalando árboles de vez en cuando, saltando sus raíces y enganchándome a sus ramas para poder pasar por algunas demasiado altas.
No tenía ni idea de en dónde me encontraba, ¡el mapa debía estar mal o ser falso! "O también...", me dije a mí misma con voz muy flojita, "puede que no sepa leer mapas de tierra... Ni de mar... Ni nad-" Me detuve ahí. "¡NO! el mapa está mal, ¡y punto!"
Ahora debía de pensar en cómo hallar el tesoro o en cómo encontrar la plaza...
|
Choqué con algo y tropecé patéticamente. ¡Malditas ramas! ¡todas por medio! Estaba acostumbrada andar por aquella zona, pero no entendía como me había tropezado con otra rama cuando ya las preveía tod...
Se me escapó el aire de golpe.
- ¡¿Una... z-zarpa?! - Giré mi cabeza para ver, a regañadientes de la razón, al dueño de aquella monstruosa, terrorífica, gigantesca...
Su rostro era el mayor terror que jamás pude haber visto.
Estruendos que dejaban inaudibles mis oídos, pisadas que sacudían la tierra y sus árboles. Y sin embargo... Ningún árbol había sucumbido a su paso.
Aquel... monstruo me había seguido por todo el bosque, ¡no paraba de correr! ¡Covrtés no le había afectada en lo más mínimo siquiera...! ¡¿Pero qué demonios era aquella cosa?!
No me había quedado más remedio que correr.
Con la garganta seca, la desorientación grabada en mis ojos, el sudor frío y el miedo martilleando mi nuca corría por entre aquellos árboles. No le veía, pero sabía cuando se acercaba. Cada pisada suya era un terremoto y un ruído desgarrador que retumbaba a lo largo del bosque. Y sus gruñidos eran peor aún... Creía que tales rugidos serían capaces de perforar hasta las estrellas, y me esperaba que, de un momento a otro, mis oídos comenzasen a sangrar; me palpaba nerviosa por si ocurría, pero el frío líquido que notaba era sudor y no sangre.
Pero el peligro no era tan inmenso... no. Aquella bestia tenía un problema del que me percaté al girar la vista un momento: estaba anclado a la tierra. Millares de raíces lo aprisionaban por todas partes, lo retenían. Él las iba rompiendo por la ferocidad de su paso y fuerza, pero aún tenía suficientes para amortiguarlo hasta que estuviese a salvo... Era extraño, parecía que aquella bestia hubiese permanecido enterrada durante mucho tiempo y las raíces le hubiesen rodeado.
No me di cuenta, siquiera, de la nieve que comenzó a caer.
Y entonces... al saltar una raíz, me encontré a una niña.
Se me paró el corazón, ¡¿qué hacía aquí?! ¡sóla y perdida! Por muy pirata que fuese, no era una vil y sucia egoísta. ¡No podía dejarla ahí!
Así que la cogí al caer y comencé a correr. Sin embargo, ¡su peso era colosal! ¡Me estaba costando tirar de ella para huír! Jamás había visto que una niña tan pequeñita pudise pesar tanto como para que yo no pudiera cogerla. ¡¿Qué comía?!
Entonces decidí arrastrarla (o, bueno, más que decidir... la pendiente de aquella parte nos hizo resbalar por las ramas secas y húmedas por las lluvias ovidianas). Nos escondimos en una raíz suficientemente grande para taparnos. Asomé la cabeza por un lado tapado en hojas para vislumbrar el camino de aquella bestia. Se encontraba lejos, no mucho, pero sí lo suficiente para no habernos visto caer tras la raíz.
- ¡¿Qué demonios haces aquí?! - Me giré para encararla, trantando de usar un tono de voz no muy fuerte, pero sí que notase que la estaba regañando. - ¡¿Dónde está tu familia?! ¡Ésto es peligroso!
----------------------------------------------------------
ACLARO: la bestia no está en la plaza. Está en las afueras, lejos de la gente del festival.
- Esta bestia NO puede ser derrotada, es parte de la trama; de ésta y de muchas otras que vendrán luego.
Yyy eso~ <3 jajaja me encata Rinne u///u y nunca he roleado con ella! así que ya están las dos juntitas~ sdfsdfdfdd
FAMILIA PIRATA!: echenme de menos un ratito más <3 Sylphie servirá para mover la historia, pero pronto estará por allí! hagan sus cositas mientras 1313*, que según tengo entendido alguna de las dos está resentida por viejos acercamientos en el pasado que deben ser... solucionados <3 <3 JAJAJAJAJA
|
|
|
|
|
|
"¡¡Wooohoooo!!" Rinne vitoreaba a la bestia, que llenaba el bosque con sus rugidos y que la hacía saltar de su asiento con cada paso que daba. Era una emoción inmensa la que se veía en el rostro de la castaña porque pronto, pronto, pro~~nto, sería el turno de jugar junto con ella.
No se había fijado en la chica que era perseguida y que huía por su vida, porque las señales de magnitud enorme que captaba del rugir de la bestia y el intento de idea de que su turno era el siguiente era lo que apenas se mantenía en su atrofiada memoria. Pero le tomó unos cuantos segundos darse cuenta de que había cambiado de posición sentada sobre el árbol, y que trataban de llevarla cargada. Parpadeó un par de veces, registrando el rostro de la peliceleste, y empezaron a resbalar.
"¡Weeeeeeee~~!" se divertía de lo lindo Rinne, disfrutando de la caída y de que ahora jugaban a las escondidas, riendo bajo, mirando sobre la raíz que las cubría.
"¡¿Qué demonios haces aquí?! ¡¿Dónde está tu familia?! ¡Ésto es peligroso!" La mayor le reclamaba, y la machina volvió a verla, casi sin expresión, finalmente parpadeando una, dos veces, registrando su rostro. Repentinamente su rostro se iluminó y su sonrisa se ensanchó, y de un solo salto se puso de pie, apuntando a Sylphie, su rostro volviéndose retador.
"La Rinne aplasta-novatos soy yo, ¡así que prepárate! **" No había acabado de anunciarlo ni de que 'se prepare', cuando con su otro brazo le lanzaba un puñetazo que quedó clavado en la tierra al costado de Sylphie, como si hubiese fallado a propósito. Rinne quedó un rato ahí, como contemplando lo raro que se sentía su mano enterrada en el suelo, y cuando giró su rostro hacia la otra chica lo recordó, y su sonrisa se amplió más. El reto aún continuaba~
--------------------------------------
** derp, desde más o menos 1:50, pero todo es divertido uvu; |
|
|
 Primer
Anterior
66 a 80 de 110
Siguiente
Último
|
|
| |
|
|
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados | |
|
|
