'El Bárbaro del Ritmo'
Bartolomé Maximilano Moré nació en Santa Isabel de las Lajas, Provincia de las Villas, el 24 de Agosto de 1919. Descendiente de esclavos, el Bartolo siempre mostró aptitudes para Cantar y para la música en general. Su primera canción Desdichado Corazón la compuso a la edad de 14 años (1935) y a los 16 años "Bartolo" ya hacía parte de un grupo musical.
Durante los años 1935-1939 Bartolomé perfecciona su técnica con la guitarra mientras se ganaba la vida cortando caña en los ingenieros azucareros o vendiendo frutas y yerbas medicinales en la Habana.
Desde 1940 hasta 1944, el Bartolo hace parte de pequeñas agrupaciones las cuales le ayudaron en su formación artistica; fue en este mismo período donde el Bartolo atravesó el peor momento en su carrera artistíca, pues para poderse ganar el pan de cada día le tocaba practicamente pedir dinero a los clientes de bares y cantinas donde llegaba a interpretar sus tonadas.
En 1944 hace parte del Conjunto Cauto que dirigía el Maestro Mozo Borguella. Con el Conjunto Cauto Bartolomé Moré se presenta en la Emisora 1010 teniendo inmenso éxito el cual le hizo ganar nombre y reputación como cantante.
Su entrada al Trio Matamoros fue algo realmente incidental pues resulta que una tarde el Conjunto Matamoros tenía que cantar en la Emisora 1010 pero Miguel Matamoros, el vocal del conjunto, estaba enfermo. Miguel Matamoros habló con el Maesto Borguella para que le prestara un cantante. El Director del Conjunto Cauto le mando al Bartolo para que cantará como primera voz en el Conjunto Matamoros. De la mano del Conjunto Matamoros el Beny graba su primer LP e hizo una gira muy exitosa en el pais Azteca. En México el Beny decide dejar el Trio Matamoros para quedarse a probar como solista.
Una vez en México (1945), el Beny empieza a cantar en el cabaret Rio Rosa junto a Lalo Montane, tiempo después el Beny graba con la Orquesta de Mariano Merceron y finalmente se une a la Orquesta de Damaso Perez Prado con quien el Beny alcanzaría el estrellato. Con la Orquesta de Perez Prado graba los temas Bonito y Sabroso, Mucho Corazón, Pachito e che, Ensalada de Mambo y muchos mas.
El Beny regresa a México en Diciembre del año 1951 allí trabaja otra vez con el Maestro Mariano Merceron, Pacho Alonso y posteriormente con Bebo Valdes. El Beny rechazó una oferta para actuar con la Sonora Matancera pues Beny opinaba que esa sonora no sonaba.
En 1952 Beny graba con la Orquesta Aragón de Cuba abriéndoles las puertas de la Habana, pues el Beny impuso que la Orquesta Aragón debía presentarse donde el se presentaba.
En 1953 por problemas con la RCA, su casa disquera, el Beny abre toldo y decide formar su propia orquesta. La Banda Gigante actuó por primera vez en la emisora CMQ (3 Agosto 1953) y estaba integrada por : Ignacio Cabrera (Cabrerita)/ Piano y arreglos, Miguel Franca, Santiaguito Peñalver, Roberto Barreto, Celso Gómez y Virgilio Vixama / Saxofones, Alfredo Chocolate Armenteros, Rigoberto Jimenez "Rabanito" y Domingo Corbacho / Trompeta, Jose Miguel / Trombon, Rolando Laserie / Bateria, Clemente Piquero "Chicho" / Bongó, Fernado Alvarez y Enrique Benitez / Coros.
Entre 1954 y 1955 la Banda se consolida en Cuba; para los años 56 y 57 Beny Moré y su Banda Gigante se van de gira por Sur América, México y Estados Unidos donde actuan en una ceremonia de entrega de los premios Oscar.
Estando en la cúspide de su carrera y siendo una personalidad ampliamente reconocida no solo en Cuba sino también en México y Sur América en Beny empieza a enfermarse; el exceso de ron, su bebida favorita, unido a unos malos hábitos alimenticios desencadenan en problemas del Hígado.
Su última actuación se llevó a cabo el 16 de febrero en el pueblo Palmira de Cuba. Falleció el 19 de febrero de 1963 en el Hospital de Emergencia, en La Habana, Cuba, a las 9:15 a.m., a la temprana edad de 43 años.
Fue enterrado con honores de héroe nacional y su sepelio fue una multitudinaria demostración popular de dolor y un tributo de admiración al genial sonero. El 20 de febrero, el Sindicato Nacional de Artes y Espectáculos declaró “Día de duelo musical” por la muerte de Beny Moré, el más grande sonero cubano de todos los tiempos. Los Shows en los cabarets también fueron suspendidos.
Beny Moré recorrió, al frente de su tribu, así llamaba a su orquesta, muchos países de centro y sur América. Alto y delgado, con su tradicional vestimenta de pantalones “bataholas”, tirantes, zapatos de dos tonos, coronado por un enorme sombrero alón y bastón, conquistó a los más difíciles seguidores de la música afrocubana.
En cuanto a la producción musical de Beny con la Banda Gigante la mayor parte de su catálogo bailable, sin contar el bolero que le corresponde el cuarenta y cinco por ciento de la totalidad de su obra, recae en el son y el son-montuno, incorporando variantes tan antiguas como el nengón y changüí.
Beny Moré dejó un vacío inmenso y difícil de llenar. Como apuntó Leonardo Acosta: no pudo forjarse una escuela tras de sí, pues era un caso único. ¿Cuántos han salido airosos al incursionar en el repertorio de Beny? En realidad muy pocos. Su arte no se centraba en una forma particular del ejercicio, sino que sintetizaba en sí mismo, casi todas las tendencias y corrientes de la música popular cubana de los últimos cincuenta años.
Benny Moré falleció en su mejor momento, como Carlos Gardel, por eso ellos cantan cada día mejor.