ANA DE ARMAS
©CUBA ETERNA GABITOS
La actriz cubana nació el 30 de abril de 1988, recientemente ofreció una entrevista donde relata el difícil momento en que decidió salir de Cuba.
Sin duda, una de las experiencias de vida más duras que tienen los cubanos en el exterior es precisamente haber tenido que dejar atrás la Isla. Aunque, en la mayoría de las ocasiones, esto supone un cambio para una vida mejor, la herida que deja en el alma no se borra jamás.
Al parecer, al igual que muchos cubanos en el exilio, para la actriz Ana de Armas uno de los episodios más trágicos de su vida fue salir de Cuba. Así, lo reveló hace un tiempo cuando ofreció una entrevista para el portal AnOther, donde contó esta anécdota.
Según expuso la protagonista de la película Blonde, haber nacido y crecido en La Habana es una de las fortunas más grandes que recibió. Aunque sus condiciones de vida posiblemente no eran las mejores, se sentía muy feliz con sus familiares, vecinos y amigos en la Isla.
“Estás en un país donde no tienes mucho contacto con el mundo, estás como en una burbuja”, confesó la actriz, aludiendo al aislamiento forzoso. “De alguna manera, eso te hace concentrarte en la vida y las amistades en lugar de todo el ruido”, recordó, además, viéndolo así desde una perspectiva positiva.
Asimismo, Ana de Armas contó cómo en las calles de la capital de Cuba empezó a dar sus primeros pasos como actriz. “Crecí descalza, corriendo por las rocas de la playa, nadando. Mis amigos y yo representamos obras de teatro para los vecinos”, relató.
Fue así como, finalmente, su talento actoral le permite llegar hasta el cine; aunque no lograba florecer del modo en que esperaba. Así, comprendió que amaba profundamente a su país, pero que debía partir si quería desarrollarse artísticamente.
Ana de Armas, antes de partir de Cuba: “Sabía que tenía que salir de allí para crecer”
También, la actriz Ana de Armas relató con cierta nostalgia que a pesar de amar estar en Cuba, su salida era necesaria por su bien. Ciertamente, estando allí pudo desarrollar de alguna manera su carrera como actriz; sin embargo, estaba consciente que esto no le permitiría llegar a donde quería.
Al parecer, desde joven veía algunas películas como el Titanic y anhelaba poder ser parte de producciones como esa, dando a conocer así su talento. Sin embargo, esto sería prácticamente imposible si se quedaba en La Habana; y fue así como decidió ir tras sus sueños, dejando parte de su vida atrás.
“Mi corazón pertenece a Cuba, pero sabía que tenía que salir de allí para crecer”, expuso la actriz Ana de Armas en su entrevista. “Siempre fui consciente del techo muy bajo que lamentablemente tienen los artistas cubanos… Sabía que tenía más que hacer, más que aprender”, seguidamente añadió.
“Crecí viendo todo, desde ‘Titanic’ hasta ‘Terminator’, pero siempre supe que la realidad estaba tan lejos de mi realidad”, expuso.
Como resultado, aprovechando sus raíces españolas emigra a España donde con 18 años, y pese a no conocer gente en el medio, logró pasos importantes. De este modo, a menos de un mes de su llegada, conquistó la televisión y obtuvo un papel en la serie “El Internado”.
Sin embargo, Ana de Armas comenta que esos primeros meses fuera de Cuba fueron muy duros; sobre todo por la nostalgia.
“Estar sola en España fue muy duro; nunca me pasó por la cabeza volver, pero fue duro”, contó. “Nunca había estado en ningún otro lugar antes y fue un gran choque cultural”, seguidamente agregó.
Finalmente, la suerte le sonrió y con esfuerzo y dedicación llegó a Hollywood donde ha roto paradigmas, y hoy es una loable actriz de cine.
¿Quién es Ana de Armas?
Nominada y premiada, Ana de Armas ha compartido crédito con actores legendarios; es la primera heroína Bond latinoamericana en el CINE, ha encarnado a un ícono de la estatura de Marilyn Monroe y muchas de sus películas han sido éxito de crítica y taquilla... Pero esta actriz nació en una isla del Caribe estertóreamente verde, anduvo con pies descalzos, emigró a otros sitios y jamás ha dejado de ser ella misma. Esta es su historia.
Ana de Armas es una actriz que nació en Santa Cruz del Norte, Cuba, el 30 de abril de 1988. Hija de padres cubanos y abuelos españoles, desde muy pequeña decidió que quería dedicarse a la actuación.
La joven de 32 años ha deslumbrado en dos continentes. La prueba más reciente de ello se encuentra en su protagonismo en la portada de Vogue México y Latinoamérica para su edición de octubre. En entrevista con José Forteza, la próxima Bond Girl latinoamericana cuenta cómo fue su infancia, sus orígenes: ‘Nací en La Habana, en Cuba, pero mi papá tenía un trabajo en un pueblo que se llama Santa Cruz del Norte y nos tuvimos que mudar para allá. Fue una infancia súper libre junto a la costa, sin hora de entrada y salida a mi casa, corriendo descalza, bañándome en el mar. Vivía en un edificio que tenía un parquecito en el medio. Allí jugaba con los demás niños, nos trepábamos en las matas… Así fue mi infancia’.
‘Después nos mudamos a La Habana, a un edificio grande donde vivían cientos de familias. Fue un cambio brusco entrar en el ajetreo, la dinámica y el tráfico de la ciudad. Extrañaba mucho la vida del pueblo, las notas en la escuela bajaron... Pero a esa edad uno es muy adaptable. Fui haciendo nuevos amigos con los que todavía tengo relación desde ese entonces’, explica la actriz sobre el lugar donde creció.
¿Cómo comenzó su carrera?
En la misma conversación, Ana de Armas cuenta cómo comenzó su interés por la actuación: ‘Veía películas con mi abuelo hasta tarde en la noche y, siempre, terminaba delante del espejo repitiendo las escenas que acaba de ver’. Al decidir que actuar era la pasión que guiaría el resto de su vida, la cubana se inscribió en una escuela de teatro en la que logró ingresar con un examen de aptitud. ‘Estudiando teatro aprendí mucho. Sin embargo, sentía una relación amor-odio con la escuela, porque tenían la regla que, si eres estudiante, no puedes trabajar. Justo después de mi primer año como estudiante, el director español Manuel Gutiérrez de Aragón me hizo una audición para La Rosa de Francia. Ese fue mi primer trabajo profesional y, por esa regla, no me sentí apoyada por los profesores. Hoy los puedo entender. Ellos prefieren que los alumnos terminen la escuela, para que tengan más herramientas y un entendimiento más claro de lo que es la profesión, pero la realidad es que nada suple la experiencia de un set de rodaje, un director guiándote y profesionales como Jorge Perugorría y Luis Alberto García que son dos actores cubanos que adoro y son mis amigos’, afirma la actriz.
Posteriormente, Ana de Armas protagonizó 'El Madrigal', conjugando su vida profesional con su carrera escolar. ‘Iba a rodar por las noches y a la escuela por las mañanas, así que me quedaba dormida en las clases, horrible. Pasé todo el trabajo del mundo escondiéndole a los profesores que andaba en otra filmación, hasta que un día llega la profesora y me dice: ¿te crees que no sé nada? Estás rodando otra película’, recuerda acerca de aquellos primeros años.
Antes de graduarse, la intérprete que también tiene raíces españolas tuvo que decidir entre obtener su título o seguir haciendo cine (lo que realmente quería hacer). Para Vogue, cuenta cómo fue la experiencia: ‘Me fui a Madrid sola, con 300 euros como todo capital, a vivir gracias a la hospitalidad de una amiga de mi hermano que yo nunca había conocido. Desde el primer día empecé a buscar trabajo y, a dos meses de haber llegado, me dieron el papel en El internado. Esa serie se convirtió en tres años sin parar, con un compromiso y una entrega total de tu tiempo. Estaba en las nubes ese primer año, pero en el tercero ya quería hacer otras cosas. Por eso soy actriz, siempre quiero hacer otros personajes’.
Después de unos cuantos éxitos más en televisión y en cine, entre los que se encuentran la serie 'Hispania' y la película 'Por un puñado de besos', Ana de Armas se trasladó a Estados Unidos en 2014 para probar suerte en Hollywood y continuar ascendiendo en su carrera profesional.
Las películas de Ana de Armas en Hollywood
La llegada de Ana de Armas a Estados Unidos no fue sencilla, pero ella se describe como ‘persistente’. Sin hablar inglés y tomando cursos intensivos del idioma, los años siguientes se vieron marcados por grandes éxitos para la actriz. Su primera película en Hollywood fue Knock Knock en 2015 al lado de Keanu Reeves. Su primer protagónico vino el año siguiente con Exposed (al lado del mismo actor) y a ésta le siguieron Manos de Piedra y War Dogs. Adquirió aún más notoriedad con la cinta Blade Runner 2049, que le valió una nominación al Premio Saturn.
En 2019, la actriz cubana tuvo su break out, y es que después de protagonizar Knives Out al lado de Jamie Lee Curtis y Daniel Craig, obtuvo una nominación a los Golden Globes 2020
Ana de Armas como Bond Girl
Aunque lleva varios años en el medio, el éxito de Ana de Armas apenas comienza y es que en 2020 se convertirá en chica Bond para protagonizar 007: No Time To Die, la primera latinoamericana en ostentar dicho título. El tráiler ya ha sido revelado, la actriz interpretará a Paloma, de origen cubano, ‘sexy, loca, pelea con tacones altos’, describe Ana. Claro que tiene con todo el atractivo seductor para hacerlo, pero hay mucho más y ella lo platica con José Forteza de esta manera: ‘Lo que más me importa es representar a las mujeres y a los personajes femeninos de una manera empoderada, realista y fuera de los estereotipos. En esta película del agente 007 he estado al tanto de prestar la mayor atención y tener cuidado con el tema. Eso fue lo principal que abordé cuando hablé con el director.’
Nominada y premiada, Ana de Armas ha compartido crédito con actores legendarios; es la primera heroína Bond latinoamericana en el CINE, ha encarnado a un ícono de la estatura de Marilyn Monroe y muchas de sus películas han sido éxito de crítica y taquilla... Pero esta actriz nació en una isla del Caribe estertóreamente verde, anduvo con pies descalzos, emigró a otros sitios y jamás ha dejado de ser ella misma. Esta es su historia.
El estilo de Ana de Armas
Glamuroso, seductor y sumamente femenino, el estilo de Ana de Armas es algo que hemos ovacionado hasta el cansancio en sus apariciones públicas en calle y alfombras rojas. Ella se define como ‘vanidosa’. ‘Me gusta estar en tendencia, lucir siempre bien, pero de una manera sobria y simple’. Eso sí, los vestidos de diseñador, como aquel Ralph & Russo que usó en los Golden Globes, los lleva para ocasiones formales, mientras que las informales las abastece con jeans y vestidos sencillos. ¿En Cuba? La actriz confiesa que en su patria nunca deja de usar sandalias.
¿Estuvo casada Ana de Armas?
Al comienzo de la década de 2010, comenzó una relación con el actor español Marc Clotet, con quien se casó en julio de 2011, para divorciarse dos años más tarde.
Otro de los noviazgos que se conocen de la cubana es el que mantuvo con el pintor también cubano Alejandro Piñeiro Bello, desde 2017 a 2018.
En la actualidad, mantiene una relación con Ben Affleck, a quien conoció en el set de rodaje de la película Deep Water.
¿Dónde viven los padres de Ana de Armas?
Los padres de Ana de Armas viven en La Habana (Cuba).
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