Najwa Bin Laden, la primera esposa del terrorista islámico Osama Bin Laden, ha desvelado aspectos de la vida íntima de éste en el libro que ha escrito junto a su cuarto hijo, Omar, tal y como recogen en el diario The Daily Telegraph.

En el libro, titulado 'Growing up Bin Laden', que se publicará próximamente en Gran Bretaña, la mujer afirma que Bin Laden pegaba a sus hijos, que era muy aficionado a los coches rápidos, y que, entre otras cosas, le gustaba cultivar girasoles y escuchar la BBC.

Najwa se casó a los quince años con su primo Osama, que tenía diecisiete, y al que dio siete hijos, entre ellos Omar, y cuatro hijas.

El terrorista más buscado tuvo un total de seis esposas, a las que mantenía, primero en Arabia Saudí (hasta su exilio), y después en Sudán, donde, según el libro, no se les permitía utilizar ningún aparato eléctrico.

Duro con sus hijos y amante de la velocidad

A sus hijos los pegaba por enseñar demasiado los dientes cuando sonrían y, para que se curtiesen, los mandaba a dormir al desierto o a escalar montañas sin provisión de agua.

Nada le satisfacía más que ir al desierto en un coche veloz

El terrorista acusado de ser el cerebro organizador de los atentados del 11 de septiembre de 2001 contra Estados Unidos, llegó a tener al menos un Mercedes Benz dorado y, en cierta ocasión, compró una lancha rápida.

"Nada le satisfacía más que ir al desierto en un coche veloz, que luego dejaba aparcado allí mientras hacía largas caminatas", explica la que fuera su esposa en el libro.

Según su hijo, Osama Bin Laden presumía de su talento para los cálculos aritméticos y le encantaba retar a la gente a ver si le vencían con una calculadora.

Pero su mayor afición, explica su ex esposa, era "labrar la tierra y cultivar el mejor maíz y los mayores girasoles". También disfrutaba comiendo mangos y escuchando a la emisora BBC.