El gobernante visitó algunas de las áreas del ejercicio y se entrevistó con militares al mando y soldados, al tiempo que elogió el trabajo de las nuevas generaciones dentro del ejército, según declaraciones difundidas por los medios de la Isla.
"La organización alcanzada, lo mismo para enfrentar una agresión militar que un huracán, es lo que inspira mayor respeto, más que cualquier tipo de armamento", dijo el general, tras visitar el Estado Mayor del Ejército Occidental.
Anteriormente, la televisión estatal había dado a conocer un reporte según el cual Raúl Castro ordenó a sus tropas "no rendirse nunca".
Durante los tres días de maniobras la prensa cubana realizó una amplia cobertura del tema con vídeos, fotos, crónicas, y titulares como "La paz depende de un pueblo armado" y "Claro mensaje de nuestra decisión de lucha".
Según el régimen, esta edición del Bastión constituyó el mayor despliegue militar en la Isla en los últimos cinco años, y el primero desde que Barack Obama llegó a la Casa Blanca.
El ejercicio incluyó acciones tácticas y de mando con tropas en el terreno, movimientos de fuerzas y medios, prácticas de artillería, vuelos de la aviación, entre otras.
El gobierno presentó las maniobras como una "necesidad de primer orden", dado que persiste la "confrontación entre Cuba y el imperio".
Para este domingo estaba previsto el Día Nacional de la Defensa, con maniobras y ejercicios tácticos de las Fuerzas Armadas, el Ministerio del Interior y otros componentes del sistema defensivo del régimen.