El orgullo gay reivindica en Madrid los derechos de los transexuales
Dos participantes en la marcha, por las calles de Madrid
Miles de personas desfilan por el centro de Madrid para reivindicar, en un ambiente festivo y colorista, los derechos de los transexuales, colectivo sobre el que este año pone el acento la Marcha Estatal del Orgullo Gay.
Pasadas las seis de la tarde, agrupaciones llegadas de toda España han iniciado en la Puerta de Alcalá, con una traca, el desfile, que está organizado por la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (FELGTB) y el colectivo de Madrid COGAM.
En la cabecera estaban representantes políticos, entre ellos el portavoz de IU en el Congreso, Gaspar Llamazares, y de la organización, que portaban la pancarta con el lema "Por la Igualdad Trans", a la que también se ha unido este año Suku Alexander,
un transexual israelí.
Aunque está prevista la asistencia de la ministra de Igualdad, Bibiana Aído, todavía no se ha incorporado a la marcha.
La carroza del Ayuntamiento de Tel Aviv no ha participado al haber sido vetada por la organización después de que esta institución se negase a condenar el ataque a la Flotilla de la Paz.
Una treintena de carrozas componen la marcha, encabezadas por la de las familias diversas: un autobús de dos plantas donde familias lesbianas, gays, transexuales y bisexuales visibilizan su realidad y disfrutan de la parada con sus hijos e hijas, cuando se cumplen cinco años de la aprobación de la ley que permite el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Está previsto que la cabalgata termine a las 21 horas en la Plaza de España, donde se leerá un comunicado y, posteriormente, la fiesta continuará con actuaciones musicales antes de que la cantante australiana Killy Minogue ponga el broche final.
El Orgullo Gay conquista el corazón de Madrid para visibilizar a los transexuales Los políticos y los organizadores coinciden en denunciar que en pleno siglo veintiuno los transexuales sean considerados personas enfermas
Miles de personas conquistaron este sábado el centro de Madrid, en un ambiente festivo y colorista, a favor de la visibilidad de las personas transexuales, colectivo en el que la Manifestación del Orgullo ha querido este año centrar sus reivindicaciones. Pasadas las seis de la tarde, una traca lanzada en la Puerta de Alcalá por un grupo de "falleros valencianos", acompañados de "una falsa" Rita Barberá (alcaldesa de Valencia), dio el pistoletazo de salida al desfile, organizado por la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (FELGTB) y el colectivo de Madrid COGAM. "A pesar del calor, el fútbol y la crisis", los organizadores calculó una participación similar a la de años anteriores, cuando manejaron cifras de más de un millón de personas. La pancarta de cabecera, con el lema de la marcha "Por la Igualdad Trans", iba sujeta por la ministra de Igualdad, Bibiana Aído, que se incorporó unos minutos después de comenzar el acto, junto a otros representantes políticos, como el portavoz de IU en el Congreso, Gaspar Llamazares; o el coordinador general de IU, Cayo Lara, y miembros de las organizaciones convocantes. Junto a ellos, desfiló el transexual israelí Suku Alexander, en representación de los gays, lesbianas, bisexuales y transexuales de Israel, después de que la organización vetara la presencia de la carroza de Tel Aviv por no haber condenado el ataque a la Flotilla de la Paz. Tanto los políticos como los organizadores han coincidido en denunciar que en pleno siglo veintiuno los transexuales sean considerados personas enfermas. Bibiana Aído Así, la ministra de Igualdad recordó, en declaraciones a los medios, que el Gobierno español instó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a que retire la transexualidad de la clasificación internacional de enfermedades. Aído lamentó que el PP no participe en la manifestación y pidió a este partido que retire el recurso de inconstitucionalidad presentado contra la ley del matrimonio homosexual. Por su parte, el presidente de la FELGTB, Antonio Poveda, subrayó que "los transexuales, el colectivo más vulnerable de nuestra realidad, necesita tener también los mismos derechos que disfrutamos ya lesbianas, gays y bisexuales". Además de los transexuales, la Marcha del Orgullo quiso conmemorar este año el quinto aniversario de la aprobación de la ley que permite los matrimonios entre personas del mismo sexo. Por ello, la primera de las más de treinta carrozas que componen la cabalgata era la de las familias diversas: un autobús de dos plantas donde familias lesbianas, gays, transexuales y bisexuales han querido visibilizar su realidad y disfrutar de la parada con sus hijos e hijas. Reivindicación Los organizadores insistió, una vez más, en el carácter reivindicativo de la manifestación, aunque se transforme en una fiesta lúdica para invitar a la participación. Al ritmo de tambores y al son de canciones ya clásicas en este tipo de desfiles, como "A quién le importa", de Alaska, los manifestantes abarrotaron las calles del centro de Madrid ataviados con los más diversas y llamativas vestimentas y portando banderas con los colores del arco iris. También los colectivos gays de cada comunidad autónoma estuvieron representados, con sus banderas oficiales y sus respectivas pancartas, situadas por orden alfabético detrás de la de cabecera. Carrozas del Plan Nacional sobre el Sida, CCOO, UGT o del PSOE formaban también parte de la comitiva, todas ellas, engalanadas. El manifiesto leído a final de la marcha reivindicó para los transexuales el derecho a ser tratados como han nacido, cómo lo que realmente siempre han sido. Para ello, pidió transformar el sistema educativo, que no reconoce la existencia de esta diversidad; el sistema sanitario, para que "en todas las comunidades se atienda el proceso transexualizador"; la mente de aquellas personas que creen que la transexualidad es una enfermedad; y el ámbito laboral, con medidas de discriminación positivas.
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