La Habana, cien por cien Cuba
Parada en el tiempo.
Una ciudad parada en el tiempo sin cambios desde el año 1959
Los habaneros y habaneras parlanchines y alegres como mandan los cánones del Caribe.
La Habana ha permanecido,parada en el tiempo, inmutable en el último medio siglo. Su fantástica arquitectura colonial, neoclásica y modernista sigue ahí. Lo que más merece la pena conocer de La Habana son sus habitantes.
Si no elegimos vivir, yo querría morir, morir en La Habana...”, dice la canción de Fito Páez. Pero la capital de Cuba, el emblema nacional para lo bueno y lo malo, también es un buen sitio para estar vivo,aunque miles han preferido morir en el mar que vivir en esa jaula de oro que es Cuba. Aunque en los últimos tiempos las cosas ya están cambiando a paso lento, casi se podría decir que La Habana ha permanecido inmutable en el último medio siglo, desde la revolución y el cambio de régimen producido en 1959,por los dictadores Castro.
Su fantástica arquitectura colonial, neoclásica y modernista sigue ahí, sin grandes atropellos, pero también nos referimos a su gente. Lo que más merece la pena conocer de La Habana son sus habitantes, los habaneros y habaneras: parlanchines y alegres como mandan los cánones del Caribe, sobreviviendo cada dia y pensando como resolver el pan diario,sin perder su alegria y esperando en silencio un cambio radical,que los alejes de la doble vida, el miedo, la falta de libertad y miseria en la que viven.
Es por ello que, como en cualquier sitio pero en éste más, lo que hay que hacer es callejear y ponerse a hablar con cualquier viandante,que no tenga nada que ver con el régimen. Hay que estar con la gente: dejarse perder por los barrios, viajar en transporte público, caminar por el malecón mientras se recibe la brisa marítima, recorrer la zona vieja y apreciar sus calles y casas y toda la miseria que los rodea…
Como hemos dicho, La Habana es una ciudad culta, algo que no necesariamente es habitual,es lo único que les queda. No es casualidad. Pese a la precariedad de medios, el regimen de los hermanos Castro se las arregla para sacar adelante eventos culturales de reconocido prestigio y así entretener un poco al cubano y vender la imagen de un pueblo culto ,alegre y revolucionario. Al pueblo pan y circo, viejo refran que en Cuba se hace una realidad
Por ejemplo, en diciembre de este año se podrá disfrutar de la 32ª edición del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, donde se tendrá la oportunidad de visionar las nuevas joyas de esa pujante industria.
Otros actos importantes son el Festival Internacional de Ballet de La Habana y la Feria Internacional del Libro de La Habana. Pero, más allá de fastos concretos, siempre se disfrutará más de la cultura en los bares y cabarets del centro, como el Piano Bar Delirio Habanero o el Habana Café, mientras suena salsa o nueva trova. O con una botella de ron, bajo las estrellas en el Malecón, rodeado de cientos de habaneros, muchos de los cuales se dedican a unos de los oficios más viejo del planeta, la prostitución por una pequeña cantidad de euro.. Eso sí, teniendo cuidado de no embriagarse con ron y no solo “así perder la razón”, sino hasta lo puesto y no olvidar de llevar bastante dolares ,o euro,pues sin ellos no se puede vivir en el paraiso comunista cubano.
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