Los presos anticastristas que no viajen a España serán los últimos en salir
Moratinos expresa a su colega cubano su esperanza en que la UE cambie el 25 de octubre su posición común sobre la isla
Moratinos ha acompañado a Zapatero en su estancia en Nueva York
Por Luis Ayllón
Los presos políticos cubanos que rechacen viajar a España y decidan permanecer en la Isla serán los últimos en salir de la cárcel. Así se lo comunicaron las autoridades castristas al ministro Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, quien la pasada madrugada se reunió en Nueva York con su colega cubano, Bruno Rodríguez.
Los presos políticos cubanos que rechacen viajar a España y decidan permanecer en la Isla serán los últimos en salir de la cárcel. Así se lo comunicaron las autoridades castristas al ministro Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, quien la pasada madrugada se reunió en Nueva York con su colega cubano, Bruno Rodríguez.
Esta semana llegarán a nuestro país otros cuatro presos de conciencia -Nelson Molinet Espino, Héctor Raúl Valle Hernández, Miguel Galván Gutiérrez y José Miguel Martínez Hernández-, pertenecientes al llamado Grupo de los 75, que han ido siendo excarcelados en las últimas semanas, tras un acuerdo del régimen con la Iglesia Católica en Cuba y la intervención del Gobierno español. Con ellos serán ya 40 los disidentes que han recibido una licencia extrapenal y el permiso para viajar a España junto con sus familiares, que superan en total los 200.
Se les ha preguntado a todos
De los encarcelados durante la llamada Primavera Negra de 2003, muchos de ellos vinculados al Proyecto Varela que lidera Oswaldo Paya, quedaban en prisión 52 al ponerse en marcha el acuerdo para las excarcelaciones. A todos se les ha preguntado si deseaban viajar a España y, al parecer, según fuentes opositoras, en torno a una decena han dicho que no y que prefieren permanecer en su país.
Ayer, fuentes del Ministerio español de Exteriores indicaron que existe el compromiso de que estos saldrán igualmente de las prisiones, pero que serán los últimos en hacerlo. Hasta la fecha ninguno de los que han expresado su deseo de seguir viviendo en la Isla ha quedado en libertad. Las mismas fuentes expresaron su convencimiento de que Cuba cumplirá su compromiso, que se extiende, según dijo el propio Moratinos en su momento a todos los presos de conciencia. La definición de cuántos son los que reúnen esa condición, es algo más difícil de determinar, pero se recuerda que Amnistía Internacional cifraba su número en torno a los 70, en los que incluía los que no tienen delitos de sangre, de forma que, si se completan las excarcelaciones en marcha, quedarían una veintena que reunirían la condiciones para quedar en libertad. Los grupos opositores consideran que el número es más elevado.
En Nueva York, Moratinos conversó con Rodríguez sobre las posibilidades que existen de que la Unión Europea decida modificar la Posición Común sobre Cuba en el Consejo de Asuntos Generales del 25 de octubre, la fecha en la que concluirá el plazo que el ministro español consiguió a arrancar a sus socios comunitarios para dar tiempo a que los cubanos mostraran su voluntad de hacer cambios, comenzando con la liberación de los presos políticos. Moratinos confía en que los más reacios a la modificación, fundamentalmente checos, suecos y alemanes, valoren lo que está sucediendo en la isla. Hace pocas fechas, también escuchó con satisfacción cómo su colega francés, Bernard Kouchner, le daba su apoyo en la reunión que tuvieron en Madrid.