Ecuatorianos en Miami opinan sobre sucesos
Por MAR CABRA
La comunidad ecuatoriana en el Condado Miami-Dade, que cuenta con más de 20,500 personas, siguió pegada al televisor, internet y el celular la situación en su país.
Fue a primera hora de la mañana que empezaron a llegar las noticias.
"Han asaltado tres bancos. La policía se sublevó. Hay robos, asaltos'.
Así de directo era un email que recibió Jorge Moreno, de Guayaquil, a su Blackberry. ‘‘Lastimosamente lo que ha sucedido es que el gobierno se ha dedicado a gastar dinero', dijo Moreno, gerente de ventas de 50 años. "Tú no puedes gastar lo que no tienes'.
Juan José Malo, presidente de la Cámara de Comercio Ecuatoriana-Americana de Miami, recibió la primera llamada a las 9:30 a.m. y desde entonces no dejó de atender el teléfono en todo el día. Aunque no es partidario de la política del presidente Rafael Correa, destacó la importancia de la democracia y dijo que "ésta no es manera de sacar a un presidente'.
Aunque agregó: "Espero que haya entendido que no está sobre todos los poderes'.
En el restaurante Mi Lindo Ecuador, en Doral, la máxima tensión se vivió en torno a la hora de comer, cuando todavía había mucha incertidumbre sobre lo que ocurría.
"Estamos impactados, impresionados de lo que ha pasado y pidiendo a Dios que sea lo mejor lo que va a pasar', dijo Mercedes Castro, dueña del restaurante, que no había tenido tiempo de llamar a su familia pasadas las 3 p.m. Castro tiene seis hermanos en Guayaquil. Su esposo se encuentra allí de visita.
Karen Hollihan, ecuatoriana miembro del Instituto Interamericano para la Democracia, en Miami, aseguró que se veía venir lo que le ocurrió este jueves a Correa.
"Lo tiene bien merecido. Ha sido un hombre demasiado autoritario que no ha respetado a sus ciudadanos' dijo Hollihan, quien aseguró que el sentimiento de "anticorreismo' es grande en el Condado de Miami-Dade.
De hecho, el Consulado de Ecuador en Miami cerró sus puertas antes de tiempo este jueves, por temor a reacciones, según indicaron algunas fuentes.
Al cierre de esta edición no estaban disponibles para comentario, aunque sí habló la Cónsul General de New Jersey y Pennsylvania, Jessica Escala, quien cerró filas en torno a Correa y repitió el discurso oficial.
"La motivación de los policías se inició debido a un reclamo por la reunificación salarial, pero tiene un tinte y un reclamo político, y hay que investigarlo', manifestó Escala. "Quienes quiera que fueran, como dice el dicho, pienso que les salió el tiro por la culata'.
Escala y los cónsules de Nueva York y Connecticut han organizado una marcha pacífica alrededor del mediodía para mañana desde el consulado neoyorquino hacia la sede de Naciones Unidas, en Manhattan.
Pero la preocupación para algunos ecuatorianos exiliados está ahora en cómo un evento como éste puede afectar al país en el futuro.
"Tenemos como 2,000 americanos viviendo en Cuenca', dijo Diana Ordoñez Sánchez, ecuatoriana de Cuenca y dueña de un bed&breakfast. "Con este problema vamos a tener mucha gente que no quiera venir'.