Indignación por ataques contra gays en El Bronx
Acusan a pandilla de barrio latino de ataque homofóbico
Rudy Vargas-Perez, sospechoso en el ataque a tres gay en el Bronx.
NUEVA YORK -
Mientras la indignación por el brutal ataque a tres homosexuales, dos jóvenes y un adulto aumentaban, la Policía de Nueva York continuaba ayer sus esfuerzos para atrapar a uno de los bandidos que había huido.
Tras los arrestos el jueves de 7 integrantes de la pandilla "Latin King Goonies" se supo que otro sospechoso había sido detenido ayer y que otro continuaba fugitivo por su participación en las brutales torturas que sufrieron la semana pasada tres homosexuales.
Los acusados por los ataques contra homosexuales comparecieron hoy en la Corte Criminal de El Bronx, ante el juez Harold Adler, donde fueron instruidos de cargos, que incluyen agresión pandillera, abuso sexual, agresión, detención ilegal, posesión de armas, amenaza y crimen de odio.
A los acusados Dennis Piters y Steven Caraballo se les fijó una fianza de $100.000 para quedar en libertad. Los otros quedaron detenidos sin derecho a fianza.
Entre los acusados se encuentran Nelson Falú, 27; Idelfonso Méndez, 23; David Rivera, 21. Asimismo, figuran Bryan Almonte, 17; Elmer Cofresí, 23; y Piters, 17. En otro pliego acusatorio, aparecen también Brian Cepeda, 17; y Carabello, 17.
Un noveno sospechoso, Rudy Vargas-Pérez, continúa aún sin ser capturado.
Los acusados tendrán que comparecer nuevamente en corte el próximo jueves 14 de octubre.
La presunta tortura a las tres víctimas, ocurrida la semana pasada, causó sorpresa porque no se condice con la reputación del barrio de Morris Heights, de mayoría hispana, donde hombres y mujeres homosexuales viven abiertamente y los vecinos son tolerantes, dijeron residentes y funcionarios.
El alcalde Michael Bloomberg dijo que siente repugnancia por las acusaciones y "tristeza por su sesgo homofóbico".
La policía dijo que, tras oír rumores de que uno de sus nuevos reclutas de 17 años era gay, los pandilleros lo encontraron el 3 de octubre y lo desnudaron, golpearon y sodomizaron con el bastón de un desatascador de cañerías hasta que confesó que mantuvo relaciones sexuales con un hombre de 30 años que vive a pocas cuadras.
Luego, el grupo encontró a un segundo adolescente del que sospechó era homosexual y también lo torturó, dijo la policia. Finalmente, los pandilleros invitaron al hombre de 30 años a una supuesta fiesta en la casa donde estaban y lo quemaron, golpearon y torturaron durante horas. También lo sodomizaron con un bate de béisbol en miniatura.
Los ataques ocurren después de una ola de suicidios de adolescentes el mes pasado alrededor del país, que fueron atribuidos a agresiones homofóbicas.
El octavo sospechoso, Elmer Confresi, de 23 años, se entregó el sábado. El abogado del otro buscado había arreglado que se entregara pero su cliente no se presentó, dijo el comisionado de policía Raymond Kelly.
Varios de los miembros de la pandilla ya se implicaron en el crimen, dijo Kelly. Cuando le preguntaron si los sospechosos habían expresado remordimientos, respondió: "No lo llamaría remordimientos".
En la mañana de ayer varios activistas por los derechos de la comunidad gay y políticos, se congregaron en el lugar de los ataques para denunciar la salvaje agresión.
“No hay palabras para describir lo que ocurrió aquí”, dijo Christine Quinn, presidenta del Concejo Municipal, quien además es lesbiana.
“Es difícil imaginarse que fue lo que incendió este ataque deliberado contra alguien”, agregó Quinn.
Por su parte, el representante federal José Serrano, condenó los ataques y pidió a los fugitivos que se entregaran.
Diversas organizaciones que abogan y defienden por los derechos de la comunidad gay, lésbica, bisexual y transgénero (LGBT) también conderaron los ataques.
De acuerdo a informes de prensa, en lo que va de año se han reportado sobre 40 ataques a personas de la comunidad LGBT.
Posiblemente, la mayor sorpresa que se registró entre las personas que condenaron estos ataques fue la del reverendo y senador Rubén Diaz, quien es conocido por su retórica anti-homosexual.
“Estoy asombrado por los reportes de prensa sobre estos depravados actos criminales cometidos por nueve jóvenes que torturaron y robaron a dos adolescentes y un hombre en un edificio en Osborne Place en El Bronx. Mis plegarias están con las víctimas y sus familiares”, dijo Diaz en un comunicado de prensa.
“Nadie merece ser brutalizado o victimizado”, agregó el reverendo y legislador que representa El Bronx en la legislatura del Estado y solicitó que los acusados reciban la máxima pena.
“Es difícil imaginarse que fue lo que incendió este ataque deliberado contra alguien”, agregó Quinn.
Por su parte, el representante federal José Serrano, condenó los ataques y pidió a los fugitivos que se entregaran.
Diversas organizaciones que abogan y defienden por los derechos de la comunidad gay, lésbica, bisexual y transgénero (LGBT) también conderaron los ataques.
De acuerdo a informes de prensa, en lo que va de año se han reportado sobre 40 ataques a personas de la comunidad LGBT.
Estos actos violentos "reducen la tolerancia y la igualdad que siempre han sido los pilares de nuestra gran ciudad", dijo el alcalde Bloomberg. "Los neoyorquinos siempre han tenido una respuesta para los actos de prejuicio e intolerancia y ésa respuesta es que condenamos esos actos. Los rechazamos".