Lady Gaga ha sido, sin saberlo, encubridora de los documentos filtrados por Wikileaks sobre la política exterior de Estados Unidos. El soldado Bradley Manning tenía un modus operandi específico para que nadie sospechara de sus intenciones. Al parecer, copiaba miles de documentos secretos desde una base de Bagdad (Irak) en un CD de la cantante en el que borraba la música y posteriormente grababa el archivo con la información. Poder conseguir numerosos datos y guardarlos sin tener sospechas se convirtió en una misión realmente sencilla para el joven.
“Nadie sospechó nada. Fue extremadamente fácil. Tuve acceso a los servidores 14 horas al día los siete días de la semana durante ocho meses”, confesaba Manning a su amigo Adrián Lamo, que finalmente terminó delatándolo al Pentágono, después de que el militar le revelase el material que tenía en sus manos y lo que planeaba hacer con ello. "Escuchaba y movía los labios al ritmo de la canción 'Telephone' de Lady Gaga a la vez que sacaba posiblemente la mayor filtración de datos de la historia estadounidense", añadió Manning.
Manning que se encuentra acusado en una corte militar en Quantico (Virginia) donde permanece detenido y acusado de un delito contra la defensa nacional, por el que podría pasar 52 años en la cárcel, confesaba con gran entusiasmo a su amigo: “Hillary Clinton y miles de diplomáticos del mundo van a tener un infarto cuando se levanten un día y sepan que el contenido de esos documentos son de dominio público”.
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