Acusan al colaborador de ELMUNDO.es en Cuba de contrarrevolucionario Carlos Hernando tiene 48 horas para salir del país
Carlos Hernando en una foto de su Facebook.
*Tiene previsto abandonar el país en las próximas horas, según la familia
*Hernando fue detenido por agentes cubanos en una casa en El Vedado
Iván García | La Habana
Carlos Hernando,de 35 años, colaborador de El Mundo en La Habana, ha sido acusado por las autoridades cubanas de contrarrevolucionario, según ha informado la familia del periodista a ELMUNDO.es
Hernando fue liberado este jueves tras haber pasado unas horas detenido por agentes de Seguridad del Estado en La Habana.
Asimismo, fuentes de la familia informaron que las autoridades cubanas le han dado un plazo de 48 horas para que abandone la isla.
Las mismas fuentes han explicado que Hernando ha sido escoltado hasta la casa donde se encontraba alojado en El Vedado y que tiene previsto abandonar Cuba en las próximas horas. De no salir de la isla podría enfrentar "consecuencias más graves".
En un SMS, la bloguera cubana Claudia Cadelo daba a conocer a primera hora de este jueves que Hernando había sido detenido en la casa donde se estaba alojando, en El Vedado y trasladado a un lugar desconocido con todas sus pertenencias.
Carlos Hernando es el autor de un cortometraje al disidente Guillermo Fariñas, estrenado en noviembre pasado en Madrid, y pudiese ser el motivo para que las autoridades cubanas lo deporten.
Esta era la sexta ocasión que Hernando visitaba Cuba. Estaba involucrado en la grabación de un disco, a la memoria de su padre, un inminente neurocirujano madrileño, y deseaba filmar un documental sobre los trovadores en la isla.
En una entrevista la semana pasada El Mundo América declaraba que Cuba era el mejor lugar del mundo para grabar un disco. Puede que ahora cambie de idea.
Hernando entrevistó el pasado mes de septiembre a Fariñas dos meses después de que abandonara una huelga de hambre de 135 días y que le llevó a ser ingresado de urgencia e intervenido quirúrgicamente por complicaciones en la vesícula.
Carlos Hernando: 'Se me ha pasado, pero han sido momentos muy difíciles' La seguridad cubana llevaba siguiéndole desde que llegó a Cuba en 2010 Varios agentes le han interrogado sin parar durante 5 horas Le acusan de contrarrevolucionario y tiene 48 horas para abandonar la isla asegura que no le han tocado, sólo ha sido cacheado 'a conciencia'
Manuel Aguilera Cristóbal | Miami Actualizado viernes 08/04/2011 06:18 horasDisminuye el tamaño del texto Aumenta el tamaño del texto "Ya se me ha pasado pero han sido momentos muy difíciles". Carlos Hernando habla con ELMUNDO.es cuando ya respira casi tranquilo después de pasar las horas más angustiosas de su vida. En concreto, cinco, 300 minutos de preguntas, reproches y amenazas de la seguridad cubana.
Su delito: haber ejercido el periodismo en Cuba sin acreditación. Sus crónicas para ELMUNDO.es e Intereconomía le han convertido en enemigo y objetivo del régimen castrista. La pregunta es ¿por qué ahora? "Me llevaban siguiendo desde el año pasado, desde que llegué a la Isla".
Desde entonces, Hernando no ha cesado de informar sobre lo que pasa en Cuba sin reparar en que en este país no se ejerce el periodismo con las mismas garantías y libertades que en España. Entrevistas con Fariñas, las damas de blanco, la disidencia, los artistas alternativos: argumentos para que sucediera lo inevitable.
Fue la mañana del 7 de abril, aún no eran las siete, cuando 4 agentes en un coche se presentaron en la casa de El Vedado donde residía. Aturdido, "me había acostado muy tarde", les acompañó a comisaría sin ser completamente consciente de lo que estaba pasando. Y allí comenzó la pesadilla y el preludio del fin de su aventura periodística en Cuba.
"Ejercer el periodismo sin acreditación y enemigo de la revolución". Esos son los argumentos por los que los funcionarios castristas le han dado 48 horas para abandonar el país. "No me han tocado", aclara para que no se haga más leyenda de la debida. Sólo ha tenido que sufrir un cacheo a conciencia y un interrogatorio sin pausa y sin prisa. La guerra psicológica del que conoce bien el trabajo de agente de la seguridad de un estado dictatorial.
Una vez liberado y advertido de que si no abandona el país en 48 horas, las consecuencias pueden ser muy graves, Carlos Hernando tiene ganas de colgar el teléfono a este periodista. "Perdona pero tengo que hablar con la compañía aérea para cambiar el billete. Hablamos cuando esté en España". Así lo haremos.
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