Y Chávez ahora coco rapao, nadie sabrá si de verdad se le cayó el pelo
Hugo Chávez muestra su nueva imagen durante una cadena nacional en un acto de toma de juramento de nuevos ministros
CARACAS,VENEZUELA / Por Eleonora Bruzual
Como he venido comentando desde hace semanas, el show del histrión no cesa. Ayer refería los videoclips que ahora transmite la televisora de Chávez, que es la que alguna vez fue de todos los venezolanos, videoclips donde aparece cual Jane Fonda, dirigiendo a sus ministros en una rutina de ejercicios que según cuenta el déspota le fueron indicados por sus médicos cubanos para la fulana enfermedad que sólo conocen él y Fidel y que deben hacer también –aunque estén sanos- esa cuerda de adulantes dentro del guión que cada día nos presentan en un nuevo capítulo de esta farsa que tiene por supuesto una connotación de campaña electoral.
Pero como la idea es aturdirnos y no permitir que salgamos del asombro que nos causa un acto ridículo o grotesco, o despótico para vivir uno nuevo, la noche del lunes pasado el histrión apareció otra vez, ahora con la cabeza rapada, porque según él la quimioterapia comenzó a tumbarle el pelo y él se adelantó pasándose la máquina 0 y asumiendo –dicho por él mismo- que adopta un nuevo look, “My New Look” textual dice el histrión que por supuesto aprovecha la oportunidad para presentarse vencedor del cáncer y “Super Chávez” que es en resumen la táctica que han emprendido…
Muchos son los que creen que realmente Chávez está enfermo, que tiene una dolencia de cuidado, yo de verdad no estoy tan segura. Ni lo creí aquella noche cuando desde La Habana apareció flaco y demacrado, lo que conociendo al personaje y su infinita capacidad para la mentira y la burla pudo ser el resultado de una rigurosa dieta y de un logrado maquillaje, como cuando regresó para las festividades del 5 de julio, en pleno lanzamiento de su última “Misión”, la Misión Pobrecito, y pocas horas después de haberse presentado como les digo, en rol enfermísimo, no más aquí se dedicó a ondear banderas en pesadas astas, a correr del fulano Balcón del Pueblo a la Academia Militar, y por supuesto a lo que es su especialidad: Insultar opositores y mentir con avaricia sumando promesas a la lista de miles que aún no cumple.
Como nadie es tan tonto como para no ponerse a comparar al protagonista de la Misión Pobrecito con verdaderos enfermos de cáncer que han visto, y que precisamente no mostraron durante su enfermedad el aspecto ni la vitalidad de Hugorila, pues aparece como les digo con el pelo rapado para que nunca se sepa si se le cayó o no, y por supuesto insultando a los opositores, porque le molesta que lo tengan precisado y no se crean tan fácilmente el cuento de la enfermedad cancerosa que padece según él y Fidel, porque como se sabe, nadie ha visto hasta ahora ni un solo parte médico que la explique.
Así ayer en la noche, salió rodeado de su séquito de adulantes mayores, insultando a los integrantes de la Mesa de la Unidad Democrática que es el ente que agrupa a todas las fuerzas opositoras de Venezuela, y catalogándola como “Mesa de Ultraderecha” y “Mesa de los United States… la MUS”… Y estos ataques que no son nuevos pero que se han recrudecido después que los líderes opositores han asomado ya la posibilidad más que cierta de presentarse con una Tarjeta electoral única en las elecciones del 2012, lo llevaron desde la mañana del lunes a atacar ferozmente esa unidad opositora y descalificarla, algo que de inmediato nos lleva a pensar que lo desespera esa posición común de la oposición y que su ataque será con seguridad la base de la campaña electoral de este déspota que lo que menos tiene en mente es dejar el Poder.
Por supuesto, junto a los insultos contra la Mesa de la Unidad Democrática no podían faltar los consabidos contra el capitalismo y su odiado Imperio. Dijo, con su pelo rapado y su cara eternamente dura que el más grave daño que ha realizado el capitalismo es el cultural, “la destrucción de los valores de la nacionalidad, el autoestima (Chávez el culto cree que la “Autoestima” es masculino) de ser venezolano”. Lo dice quien hasta ha cambiado su manera de hablar y posee ahora acento cubano, lo dice el que ha entregado nuestro país, nuestra independencia y soberanía a dos chulos insaciables, a dos tiranos sanguinarios y ávidos: Fidel y Raúl Castro quienes ejercen realmente el gobierno de esta provincia que muchos –con propiedad- llaman Chavezuela.