Los «blancos», minoría en Nueva York y Washington a causa del empuje hispano
Se suman a las otras 20 regiones de EE.UU. en las que hay menos «blancos»
que personas de otras razas
Miles de hispanos concentrados en las calles de Nueva York
Por EMILI J. BLASCO / CORRESPONSAL EN WASHINGTON
Las áreas metropolitanas de Nueva York y Washington cuentan ya con menos blancos que residentes de otras razas, ampliando con ello a 22 el número de regiones metropolitanas estadounidenses en las que los blancos están en minoría. El cambio se debe sobre todo al empuje de la población de origen hispano (la adscripción no atiende propiamente al color de la piel, sino al grupo racial al que se pertenece), que en el conjunto del país ha experimentado un aumento del 43% en los últimos diez años. Los hispanos suman 50,4 millones de personas, lo que supone el 16% de la población estadounidense, por delante del 13% que conforman los afroamericanos.
En el área de Nueva York, con un total de 18,9 millones de habitantes, los nuevos datos indican que los blancos suponen el 49% de los ciudadanos, frente al 23% de hispanos, 16% de personas de raza negra y 10% de asiáticos. En el caso de Washington, con 5,6 millones de residentes, los blancos constituyen ahora también el 49% (en 1990 eran el 64% y en 2000 el 55%), mientras que los afroamericanos suponen el 25%, los hispanos el 14% y los asiáticos el 9%.
También en Las Vegas...
La población blanca también acaba de pasar a ser minoría en las áreas de Memphis, Las Vegas, San Diego, entre otras. Ya en los últimos años los hispanos eran mayoría en diversas regiones metropolitanas, como las de El Paso (82%) y San Antonio (54%), en Texas, y Fresno (50%), en California. En esas ciudades, los hispanos son predominantemente de origen mexicano (el 63% de los hispanos en EE.UU. procede de México).
Los datos se derivan del censo de 2010, publicado en marzo, pero del que siguen apareciendo nuevos análisis, en ocasiones intentando simplificar las 56 combinaciones posibles ofrecidas a los ciudadanos para que se autoidentifiquen, como las de asiático-blanco, hispano no blanco, hispano negro, etc. Se trata de concreciones raciales que en la calle reciben nombres como "blacksicans" (mexicanos negros) y "mexipinos" (mexicanos filipinos), a raíz de los muchos matrimonios interraciales que se producen.
La expansión de la población hispana tiene además otras consecuencias. Un estudio del Pew Hispanic Center acaba de revelar que la asistencia de hispanos a la Universidad ha crecido en un 24% en el último año, lo que eleva a 1,8 millones el número de universitarios con orígenes familiares en Hispanoamérica, sobrepasando con ello los 1,7 millones de universitarios afroamericanos. Ello pone en evidencia un progreso social entre la inmigración hispana.
Otra manifestación del creciente peso social de los hispanos en Estados Unidos es la atención comercial que les dedican muchas empresas. La última novedad se ha producido en el sector de los casinos. Como paso previo a introducirse en Las Vegas, varias instalaciones de casinos en Nevada han puesto en marcha mesas de juego con crupieres y otros asistentes bilingües, así como espectáculos musicales con ídolos hispanoamericanos.