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General: Los Castro y su dependencia de Tío Hugo Chavez
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Respuesta  Mensaje 1 de 1 en el tema 
De: administrador2  (Mensaje original) Enviado: 21/04/2012 16:40
Cuba y su dependencia de Tío Hugo
Carlos Berrizbeitia, diputado del partido Proyecto Venezuela, aseguró que Chávez “es el venezolano que tiene la enfermedad más cara en la historia democrática del país” el tratamiento supera los 9 millones de euros
 
Por Roberto Alvarez Quinones AOL Noticias
 
Desde que los hoy octogenarios hermanos Castro tomaron el poder hace 53 años la economía cubana ha dependido siempre de algún "tío rico" que la subsidie para mantenerse a flote. Por sí misma es incapaz de dar a los cubanos alimentos, vivienda, salud, educación, transporte, ni seguridad social a los desamparados, los ancianos y los jubilados.
Esos mecenas generosos han sido primeramente la Unión Soviética y luego de su evaporación como experimento social inviable, Venezuela.

En cuanto Moscú en 1960 percibió a Fidel Castro como un político sin escrúpulos deseoso de perpetuarse en el poder le ofreció al líder barbudo comprarle todo el azúcar que dejara de importar Estados Unidos de Cuba. Sintiéndose protegido económicamente, el comandante lanzó a su guerra contra el "imperio" y expropió todas las propiedades e inversiones estadounidenses, declaró el carácter comunista de la revolución (16 de abril de 1961) y dejó instalar en territorio isleño cohetes nucleares soviéticos apuntado hacia el territorio estadounidense.

Durante 30 años, el "tío Boris" se hizo cargo de todo y además entregó gratuitamente miles de millones de dólares en armamentos de todo tipo. Carmelo Mesa-Lago, profesor de la Universidad de Pittsburgh, quien por 50 años ha estudiado de la economía cubana, calcula que entre 1960 y 1990 La Habana recibió subsidios soviéticos por $65,000 millones de dólares.

Otros economistas sostienen que fueron más de $100,000 millones y que hay que incluir la entrega a la isla 819 millones de barriles de petróleo, 82,900 tractores, 63,800 camiones, por solo citar tres ejemplos de la dimensión insólita de ese financiamiento ruso, que sobrepasó el Plan Marshall para toda Europa al terminar la Segunda Guerra Mundial.

Las subvenciones llegaron a su apogeo en los años 80, con unos $5,000 millones anuales cuando la URSS pagaba entre 45 y 46.7 centavos de dólar la libra de azúcar cubano mientras el precio en el mercado mundial oscilaba entre 5 y 8 centavos la libra. Desde 1975, Moscú acordó pagar 30.4 centavos por libra, el triple del precio mundial, y se comprometió a elevarlo anualmente, según datos de "The Cuban Center".

Por eso al desintegrarse la URSS el Producto Interno Bruto (PIB) de la isla cayó en un 35% y los cubanos se hundieron en la peor crisis económica desde la independencia de España.

Nuevo Tío Rico
Pero como sacado de la manga de Mandrake el Mago vio la luz un nuevo tío dadivoso dispuesto a sufragar los gastos del sobrino "mala cabeza". Este es latino, se llama Hugo, y según Mesa-Lago sólo entre 2005 y 2010 regaló a Cuba $34,000 millones de dólares - unos $6,800 millones anuales - incluidos 36 millones de barriles de petróleo anuales que cubren el 65% del consumo cubano.

Una expresión de la enorme dependencia de Venezuela la dio hace unos días Antonio Carricarte, viceministro de Comercio Exterior de Cuba, quien en La Habana dijo a la agencia AFP el 17 de abril que el 70% de los ingresos de divisas de la isla en 2011 correspondió al turismo y a los servicios profesionales que prestan decenas de miles de cubanos en esa nación sudamericana.

Carricarte dijo que las exportaciones ascendieron a casi $9,000 millones de dólares, un 20% más que en 2010, pero admitió que unos $6,300 fueron aportados por los cubanos en Venezuela y por el turismo recibido en la isla, aunque no quiso precisar qué proporción aportó cada uno de esos dos rubros.

Sólo informó que la exportación de bienes sumó $2,700 millones, de las que un 30% correspondió a níquel , con $810 millones, seguido por medicamentos y productos biotecnológicos ($405 millones), y luego azúcar (9%), tabaco(5%) y ron (2%).

Habría sido embarazoso para dicho viceministro reconocer que el dinero extraído a los cubanos empleados en Venezuela quintuplica el valor neto de los ingresos por turismo. De cada $100 captados a los turistas vuelven a salir al extranjero entre $55 y $65, que son el componente importado del costo de operación de esa industria, para la cual hay que importar hasta frutas y vegetales frescos de República Dominicana.

En 2011, según la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE), citada por Radio Habana Cuba, el turismo aportó $1,738 millones de dólares, que al restarle lo que regresó al extranjero se quedaron en $1,042 netos. La cifra bruta es muy inferior a los $2,221 reportados por la ONE en 2010, pese a que en 2011 aumentó el número de visitantes en un 7.3%, hasta 2.7 millones de turistas. El descenso se debió a que subió hasta 400,000 el número de cubanos que viajaron a la isla en 2011, quienes generalmente se hospedan en las casas de sus familiares y no en hoteles, cuya tasa de ocupación apenas sobrepasó el 50%.

Por otra parte, la economía cubana no ofrece bienes y servicios suficientes y los turistas no tienen cómo gastar más dinero. Por eso el promedio por turista en 2011 fue de sólo 643 dólares gastados, uno de los más bajos del continente.

Trabajo semiesclavo
Todo esto muestra que para sus ingresos en divisas Cuba depende de Venezuela, gracias a un tipo de exportación sólo posible bajo un régimen comunista, que de hecho es dueño de los ciudadanos mismos.

El presidente Chávez reveló el 16 de febrero pasado, según reportó EFE, que hay en territorio venezolano 44,804 cubanos, de los cuales 31,777 son médicos y demás profesionales de la salud. Lo que no dijo fue que del salario pactado cada médico de esos recibe una ínfima cantidad y el grueso vuela a La Habana.

De acuerdo con una nota de "Café Fuerte" del 27 de octubre de 2011, los médicos cubanos en Venezuela reciben entre $200 y $300 dólares mensuales de pago. Dado el hermetismo en torno a este escandaloso comercio de trabajo semiesclavo en pleno siglo XXI, no es posible saber cuánto le despojan a cada médico cubano en Venezuela, pero testimonios recogidos entre los más de 2,000 de ellos –cifra revelada por el diario "El Tiempo" de Bogotá-- que han logrado escapar por la frontera colombiana indican que por cada galeno el gobierno de Raúl Castro se embolsa no menos de $7,000 mensuales.

A los médicos hay que agregar 6,225 entrenadores deportivos, según también informó Chávez, y otros miles de cubanos de los que no se dice una palabra, que son jefes y oficiales de inteligencia y contrainteligencia, integran el cuerpo élite de seguridad personal del teniente coronel, "orientan' a las fuerzas armadas, están a cargo de las oficinas del registro civil, supervisan hasta el Colegio Nacional Electoral y están enquistados en todas las actividades del Estado venezolano.

Por simple aritmética, si el ingreso bruto por turismo en 2011 fue de $1,738 millones , lo confiscado a los cubanos en Venezuela aportó $4,562 millones a los Castro. Constituyó el 72% de los $6,300 millones informados por el viceministro Carricarte y la mitad los $9,000 millones de ingresos totales en divisas en 2011.

No sorprende, por tanto, el nerviosismo de la cúpula dictatorial castrista por el agravamiento de la salud del "Tío Hugo".


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