¡Es una bendición tenerte aunque sea de lejos! A un amigo cual sincero se le brinda el corazón, y ¡hay! de aquel que no valora las virtudes del amigo, cuando menos se lo espera necesitas del abrigo, y él muy roto el corazón. Por eso yo a ti te propongo, hacer un trato de ley, con tinta sangre te digo yo estaré ahí contigo, sea cual fuere la razón.