Perversión en al escuela del padre Marcin Kozyra (Polonia)…
Adolescentes lamen nata de las rodillas de un sacerdote como novatada.
¿Y de esto no dice nada su santidad?…
Los adolescentes que ingresan a la escuela deben caminar en cuatro patas y lamer crema puesta sobre las rodillas del director.
El sacerdote, director del colegio, dice que es un rito de iniciación que se realiza todos los años sin que “los estudiantes o los padres hayan presentado queja alguna”.
Los estudiantes de primer año de este colegio de la ciudad polaca de Lubin tienen que lamer nata batida de las rodillas del director del centro, el padre Marcin Kozyra, como ceremonia de iniciación. Además, no sólo tienen que hacer frente a esta novatada, sino que en otras imágenes se puede ver a los jóvenes teniendo que ir a gatas por el centro.
La policía polaca inició una investigación luego de que se publicara una serie de fotos en varios medios de una “ceremonia de iniciación” en un colegio católico de la ciudad de Lubin. En las imágenes se ve a adolescentes caminando en cuatro patas hacia un sacerdote sentado en un sillón para luego lamer sus rodillas cubiertas con crema.
El sacerdote implicado, Marcin Kozyra, que también es el director del colegio, defendió la “ceremonia” y aseguró que esta tiene lugar cada año desde hace años para los alumnos que ingresan a la escuela.
“Nunca hubo denuncia de los padres o alumnos sobre cualquier impropiedad para los involucrados en estos juegos”, dijo en una entrevista radial.
“Fotos similares fueron publicadas en el sitio web de la escuela el año pasado y nadie se inmutó”, agregó el sacerdote, que recibió el apoyo de su superior inmediato y hasta de padres de alumnos.
“Esto es muy preocupante”, dijo Marek Michalak, vocero del área de defensa de la niñez del gobierno polaco. “Sin duda, se pasaron los límites de la decencia y las formas aceptables de contacto corporal. Ordené una investigación y exigí una explicación por parte de todas las autoridades competentes”, dijo, según el diario The Telegraph.
Varias ONG defensoras de los derechos del niño han mostrado su repulsa a estas prácticas, y en especial al comportamiento del sacerdote. Sin embargo, la fiscalía local ha determinado que el cura “excedió los límites de buen gusto, pero no se ha cometido ningún delito, ni hubo una intención de carácter sexual”, por lo que dijeron que no presentarán cargos contra el padre Kozyra, aunque condenaron su conducta, que calificaron “de mal gusto”.
Las imágenes fueron publicadas en la propia web del colegio, aunque tras del revuelo en la sociedad polaca desde que las dio a conocer a la prensa, han sido retiradas.
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