Un cura condenado por pornografía infantil
libre si no delinque en cinco años
Debera también comunicar sus cambios de domicilio durante el próximo lustro
En junio aceptó el acuerdo de conformidad alcanzado con Fiscalía
|Por Carmen Hernández | Castellón
El juzgado de Lo Penal número 3 de Castellón ha dictado sentencia sobre el asunto del cura de Vilafamés, Rafael Sansó Riera, responsable de un delito de distribución de pornografía infantil. Tal y como ya se conocía, el sacerdote se enfrentaba a una pena de dos años de cárcel, tal y como él mismo aceptó el pasado mes de junio, cuando las partes litigantes rubricaron el acuerdo de conformidad alcanzado.
No obstante, el sacerdote que ejercía como tal hasta noviembre de 2010 en la localidad de Vilafamés no entrará finalmente en la cárcel ya que el Juzgado de lo Penal le ha otorgado el beneficio de suspensión de la pena de prisión impuesta por el plazo de 5 años.
Dicha suspensión, tal y como reza la sentencia del 14 de noviembre de 2012, «queda condicionada a que el penado no delinca en el plazo de cinco años, y a que comunique al Juzgado los cambios de domicilio que tuviera durante dicho periodo de tiempo». En el caso de incumplimiento de las condiciones señaladas, la sentencia también fija que «se procederá a revocar el beneficio concedido y a decretar el inmediato ingreso en prisión para el cumplimiento de la pena que por la presente se le suspende».
El Magistrado de Lo Penal número 3 argumenta esta suspensión con la que el sacerdote evita estar entre rejas en que «no le constan antecedentes penales, no supera la suma de las penas de prisión los dos años y no consta condena en materia de responsabilidad civil».
Según los hechos probados, Sansó fue detenido por miembros del Grupo de Delitos Telemáticos de la UCO de la Guardia Civil el 10 de noviembre de 2010, en el marco de una operación contra la distribución de pornografía infantil, iniciada en Madrid a raíz de un escrito del Departamento de Justicia de Estados Unidos.
El párroco formaba parte de una comunidad cerrada de pedófilos, a la que se accedía previa invitación y aportación de nuevo material, y a la que accedió desde ordenadores de la Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción de Vilafamés y del Ayuntamiento mallorquín de Manacor.
En el registro de la parroquia se intervinieron un disco duro del ordenador de sobremesa y dos discos duros externos, en los que se encontraron más de 21.000 archivos pedófilos, 100.000 referencias al foro en el que se intercambiaban estos archivos y más de 600 a su cuenta de correo.
El condenado compartía el material pedófilo con diversos usuarios de la red, y en el momento del registro tenía activas 79 descargas con 237 archivos temporales con menores de edad, en algunos casos de menos de 13 años, desnudos y/o practicando algún tipo de relación sexual.
El Obispado de Castellón decretó para el párroco la suspensión cautelar en todos sus cargos, incluido el del ejercicio del ministerio sacerdotal, después de que la Guardia Civil encontrara en su iglesia archivos de pornografía infantil y para evitar "el escándalo de los fieles".