Antonio Maria Delgado /
La máxima dirigencia chavista se encontraba el domingo en La Habana en un encuentro con el régimen de Raúl Castro que la oposición describió como una muestra más de la sumisión de Venezuela a Cuba, al tiempo que el gobierno bolivariano se disponía a hacer uso del sistema judicial para reprimir a la disidencia.
Según fuentes de El Nuevo Herald, el gobierno bolivariano está en vías de presentar cargos judiciales contra líderes de la oposición —incluyendo el ex candidato presidencial y ex gobernador del estado Zulia, Pablo Pérez— en un intento por controlar a sus adversarios, en momentos en que aumenta el descontento por la instauración de un nuevo gobierno de Hugo Chávez que no es presidido por el enfermo mandatario.
Otros de los dirigentes de la oposición en vías de ser enjuiciados son el ex gobernador del estado Táchira, César Pérez Vivas; el ex gobernador de Carabobo, Henrique Salas Feo y el ex gobernador del estado Monagas, José Gregorio Briceño, revelaron las fuentes.
“Ellos quieren quitarse a varios opositores de encima. Van a presentarles cargos de corrupción, de malversación de fondos. Lo están cocinando, quieren castigar a las cabezas salientes”, indicó una de las fuentes con acceso a la información que habló bajo condición de anonimato.
Ex jueces y magistrados de las cortes venezolanas han advertido en diferentes entrevistas que el gobierno bolivariano hace uso del sistema judicial como herramienta política para neutralizar a las personas que les son incómodas, y que muchas de las decisiones de las cortes son tomadas por integrantes del alto gobierno en reuniones sostenidas semanalmente en el despacho del vicepresidente.
El gobierno bolivariano bajo el mandato de Hugo Chávez en varias ocasiones hizo uso de las cortes selectivamente para castigar a altos dirigentes de la oposición, con frecuencia acusándoles de corrupción. Entre los dirigentes procesados en el pasado se encuentran los ex candidatos presidenciales Manuel Rosales y Henrique Capriles.
Arbitrariedad de cortes
Según los cables del Departamento de Estado filtrados por WikiLeaks, las cortes chavistas enjuician y encarcelan a dirigentes antichavistas escogidos cuidadosamente para que sirvan de ejemplos y poder así intimidar al resto de la población.
Las acciones contra los opositores eran preparadas en momentos en que la máxima cúpula chavista se reunía en La Habana con el gobernante cubano Raúl Castro, en un encuentro en la que participó el vicepresidente Nicolás Maduro, el presidente de la Asamblea, Diosdado Cabello, el presidente de la estatal Petróleos de Venezuela, Rafael Ramírez y la procuradora general, Cilia Flores.
Para líderes de la oposición, este nuevo encuentro es una señal más de que el futuro de los venezolanos está siendo decidido por el régimen de Raúl Castro.
“El que hoy amanezcamos con que el presidente de la Asamblea Nacional, la procuradora, el ex vicepresidente Maduro […] y Rafael Ramírez se encuentren reunidos con Raúl Castro —porque no es ni siquiera con el presidente electo Chávez que lo están haciendo— demuestra que las decisiones relativas a Venezuela son tomadas en Cuba por cubanos”, declaró la diputada María Corina Machado en una entrevista telefónica.
“Y lo que es más grave, es que evidentemente lo que está prevaleciendo es el interés de Cuba y no el interés de Venezuela”, agregó.
Horas antes, el dirigente opositor Leopoldo López había expresado una opinión similar en una rueda de prensa.
“Evidentemente la capital de Venezuela se mudó a La Habana, como si fuésemos una colonia de otro país. La Habana hoy es el centro político de las decisiones de Venezuela. Va la presidenta de Argentina a La Habana y no a Caracas”, afirmó López en referencia a la reciente visita de Cristina Fernández de Kirchner a Cuba.
“Es recibida por Raúl y Fidel Castro, no por autoridades venezolanas. Para entender cuáles son las situaciones que se están viviendo en Venezuela, manda Brasil un emisario. ¿A dónde? No a Caracas, lo manda a La Habana. ¿Con quién habla? Con Raúl y Fidel Castro […]. Y en el día de hoy, domingo, estamos viendo cómo el alto gobierno se reúne. ¿Dónde? ¿En Caracas? ¿En [el Palacio Presidencial de] Miraflores? ¡No! En La Habana, que es donde se está tomando las decisiones”, expresó.
Los comentarios son los últimos de una serie de críticas de la oposición en torno a la inauguración de un nuevo mandato de Chávez, cuando éste se encuentra internado en La Habana tratándose un cáncer cuya gravedad se desconoce.
El mandatario, quien partió hace un mes a Cuba, no ha sido visto públicamente, ni siquiera en fotos o videos, al tiempo que las autoridades han rechazado los pedidos de que se envíe una comisión independiente para que certifique si está aún con vida.
“Chávez mejora”
El gobierno, en esporádicos anuncios leídos por el ministro de Información, Ernesto Villegas, sostiene que Chávez continúa mejorando.
“A pesar de su delicado estado de salud después de la compleja intervención quirúrgica del 11 de diciembre, en los últimos días, la evolución clínica general ha sido favorable. Y el presidente se mantiene cumpliendo estrictamente con el tratamiento médico”, reportó Villegas el domingo.
“La infección respiratoria está controlada, aunque el comandante presidente aun requiere de medidas específicas para la solución de la insuficiencia respiratoria. El presidente está consciente, en comunicación con su familia, con su equipo político y con el equipo médico que lo atiende, manteniéndose al tanto de las informaciones de interés”, agregó.
Pero ese tipo de pronunciamientos han hecho poco para apaciguar las constantes versiones aseverando que el mandatario se debate entre la vida y la muerte, sin que haya probabilidades de que retorne al país para asumir su mandato.
Para diferentes líderes de la oposición, en Venezuela se instauró un régimen ilegítimo la semana pasada con Maduro a la cabeza, debido a que las funciones de los diferentes dirigentes chavistas en el alto gobierno cesaron la semana pasada cuando Chávez no se presentó para juramentarse.
“Lo que está planteado hoy en Venezuela es una usurpación de autoridad porque ni el ex vicepresidente [Maduro] ni los ex ministros son hoy funcionarios”, comentó Machado.
Según la diputada, es una situación de irregularidad que no está pasando inadvertida en el plano internacional, dado a que sólo fueron un puñado de mandatarios —aquellos estrechamente ligados al chavismo— los que se atrevieron a comparecer el jueves en la ceremonia de inauguración presidida por Maduro.
Machado indicó que es vergonzoso y lamentable que ese grupo haya participado en lo que constituyó una farsa para la democracia.
“Pero más significativo que quiénes vinieron fue quiénes no vinieron. Y eso es un reflejo de que los gobiernos de América Latina sí saben lo que está ocurriendo en Venezuela. Por lo tanto, es inaceptable la reacción que estamos viendo por parte de la Organización de Estados Americanos y de su secretario general, quienes nos quieren dar la espalda”, sostuvo.
“Este es el momento de hablarle a los pueblos de América Latina para que actúen solidariamente con nosotros y presionen a sus gobiernos para que no permitan que los mismos legitimen lo ilegitimable”, expresó.
Tema anterior
Primer 
