“No duerme nadie por el cielo, Nadie, nadie. No duerme nadie”. Las palabras de Lorca son campanas que tañen en el aire neoyorquino. Jubilosas, vibrantes, a veces con matices de dolor, pero siempre con signos de esperanza, exploran lo misterios más profundos de su alma. En la muestra “Back Tomorrow: Federico García Lorca/Poet in New York”, presentada por The Public Library, se despliega toda la grandeza del escritor andaluz. Es un homenaje de la ciudad que amó durante su estancia en el año 1929, y que lo atravesó con fuego, propiciando que su voz de poeta expresara con profunda sensibilidad las transiciones de la metrópolis a los signos de industrialización, a veces con señalamientos estremecedores, pero también capaz de advertir sus perfiles humanos y misericordiosos.
Hoy, hay fiesta en Nueva York celebrando a Lorca. Se exhibe el manuscrito que le permitió olvidar sus cánones tradicionales e incursionar en la modernidad, su imagen se convierte en un caleidoscopio imparable, y sigue siendo, como siempre lo deseó, el niño perenne que sabe cómo multiplicar la belleza.
La exhibición “Back Tomorrow” de The Public Library es un deslumbrante homenaje al escritor andaluz, y en particular a su obra Poeta en Nueva York, una serie de poemas que escribió durante su estancia en la ciudad como estudiante de Columbia University, y de la que se exhibe por vez primera el manuscrito original.
En Poeta en Nueva York, Lorca rompe sus esquemas literarios previos y se acerca a la poesía con una visión desafiante, con tintes de angustia y surrealismo, describiendo pasajes de una ciudad que incursionaba en la modernidad en medio de complejas circunstancias sociales, el desplome de Wall Street y una atmósfera de discriminación racial.
Lorca nunca vio esta obra publicada, en el año 1936 dejó el manuscrito que hoy se exhibe por vez primera a su editor en Madrid, José Bergamín, con la siguiente nota: “Querido Pepe, he venido a verte. Creo que volveré mañana. Abrazos de Federico”. Nunca más regresó. Estalló la guerra civil, fue asesinado brutalmente por las huestes franquistas y su cadáver sepultado en una fosa común. Sus palabras sirven de título de la exhibición de The Public Library: “Back Tomorrow”.
De manera simultánea a la muestra se realizarán en la ciudad decenas de eventos en homenaje a Lorca, entre los que se incluyen un concierto de la cantante Patti Smith, el lanzamiento de una nueva traducción al inglés del poemario editado por Chistopher Maurer, y un recorrido a todos los sitios que frecuentaba el escritor en la ciudad cuando era estudiante de Columbia University, La Ruta de Lorca en Nueva York.
El programa incluye también el estreno de una nueva grabación de las Canciones populares de Lorca recreadas por la cantante granadina Lara Bello, y la exhibición en el Instituto Cervantes de la película Viaje a la luna, basada en el único guión de cine que se conoce del escritor, dirigida en 1998 por el realizador catalán, Frederic Amat. Hoy, como nunca, se despliega un homenaje colectivo a Lorca en Nueva York. Los signos de admiración se expresan en múltiples y vibrantes manifestaciones. El arquitecto Juan Osborne, por ejemplo, un talentoso artista visual, ha recreado de manera especial una fotografía del poeta elaborada con caracteres tipográficos de las palabras que más empleaba en sus poemas.
Tras evaluar con el respaldo de computadoras todos los poemas de Lorca, Osborne destaca que los cinco vocablos más enunciados resultan “niños”, “muerte”, “amor”, “agua” y “corazón”. Justo en su retrato, la palabra “corazón”, con 192 menciones, tiene una relevancia especial.
En Nueva York el corazón de Lorca late como nunca.