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| De: SOY LIBRE (Mensaje original) |
Enviado: 14/10/2013 20:19 |
LA IMPORTANCIA DE UN BOXEADOR GAY
Orlando Cruz luce calzoncillos con bandera gay antes de su pelea de título mundial
El puertorriqueño Orlando Cruz ganó el combate más importante de su carrera fuera del cuadrilátero, cuando el año pasado salió del closet y reveló públicamente que es el primer boxeador abiertamente gay.
La gente no se sorprende cuando escuchan de un hombre gay que se desempeña como modista, estilista, florista o peinador. Pero cuando oyen que hay un hombre gay que es boxeador, eso le rompe los esquemas, más aún si el sujeto es bueno. Por eso Orlando "El Fenómeno" Cruz ha roto todos los estereotipos.
En la noche del 19 de octubre de 2012, Cruz, ganó un combate de boxeo contra un contrincante más joven y agresivo. Ganó haciendo despliegue de buen boxeo, y al anunciarle como ganador y ser entrevistado por la prensa expresó, entre otras cosas, "...gracias a mi comunidad gay". Algo nunca antes escuchado sobre un cuadrilátero de boxeo.
Es posible que haya habido un componente de mercadeo en su decisión de informar sobre su homosexualidad. Después de todo el boxeo es un deporte, y es un negocio. Pero en un deporte que es tradicionalmente machista, el que un contrincante exprese su homosexualidad abiertamente abre toda una nueva ventana de posibilidades de mercado.
En la pelea del 19 de octubre había prensa de Europa, Centro y Sur América, y representantes de la cadena HBO de E.U. En reportes de prensa entrevistan a al menos dos mujeres que indicaron que nunca habían acudido anteriormente a una cartelera de boxeo pero acudieron a esta para ver a Cruz, tras su anuncio. Y ni hablar de su próximo combate.
Este probablemente será presenciado por más personas LGBTI que ninguno otro por la curiosidad que despierta. Todo esto se traduce en crecimiento para ese deporte e ingresos adicionales por los nuevos mercados que se abren.
Pero aunque se hable de mercado, negocio e ingresos, no se puede negar que de igual manera se rompen estereotipos y prejuicios. Mucha gente heterosexual y homofóbica asumen que homosexualidad es igual a inversión de roles, por lo que un hombre gay "...quiere ser una mujer". Orlando "El Fenómeno" Cruz le ha demostrado al mundo que las personas LGBTI pueden venir en cualquier tamaño, color, sabor y oficio.
Otro posible impacto de su anuncio y desempeño puede ser en jóvenes que puedan estar aún negociando con su sexualidad y confrontando problemas con los estereotipos usuales con que se asocian a las personas LGBTI. Estos pueden encontrar en Cruz otro modelo "diferente" que rompe esos esquemas prejuiciados.
Finalmente, no existe en todos los deportes de contacto una personalidad abiertamente LGBTI, por lo que Cruz abre toda una nueva perspectiva ante estos. Entendemos que de igual manera como habrán personas que le apoyen, habrán otros que le cause mucho problema porque le reta sus prejuicios; y hay personas que cuando lo que creen se pone en duda se tornan agresivos.
Habrá que ver como continúa la trayectoria del Fenómeno Cruz, y como continúa reaccionando la gente. Lo que nadie puede negar es que él ya abrió puertas, retó estereotipos, posiblemente cambió la mente de algunas personas, y a la vez mejoró su exposición.
Por ahora, Felicidades! Que siga ganando! Y a seguir apoyándolo.
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El boxeador abiertamente gay
Orlando Cruz no consigue el título mundial de peso pluma
PARA SER GAY, HAY QUE SER MUY HOMBRE  
No pudo ser, al menos esta vez. Orlando Cruz, boxeador puertorriqueño abiertamente gay, fue derrotado por KO por el mexicano Orlando Salido en el séptimo asalto del combate por el título mundial de peso pluma (versión Organización Mundial de Boxeo). Para nosotros, sin embargo, Cruz ya es campeón. Visibilizarse como gay siendo un deportista en activo, y más en un entorno tan homófobo como el del boxeo profesional, lo hace merecedor de nuestra más rendida admiración.
Orlando Cruz, conocido también como ”El Fenómeno”, participó en los Juegos Olímpicos de Sidney 2000 representando a Puerto Rico, y posteriormente ha desarrollado una carrera como boxeador profesional que por el momento no se ha visto alterada por su salida del armario, que tuvo lugar hace ahora un año a través de un emotivo comunicado. “Siempre he sido y seguiré siendo un orgulloso puertorriqueño. Siempre he sido y seguiré siendo un orgulloso hombre gay”, afirmaba entonces. “No quiero esconder ninguna de mis identidades. Quiero que las personas me vean por el ser humano que soy”, añadía Cruz, que hace pocas semanas pedía matrimonio a su novio.
El anuncio de Cruz marcó un hito en un mundo, el del deporte profesional, y más en concreto el del boxeo, no precisamente dado a la visibilidad LGTB. Una visibilidad que con ocasión de este último combate, celebrado en Las Vegas, fue mayor que nunca, al utilizar Cruz una equipación arco iris que la compañía de ropa deportiva Everlast preparó expresamente para él.
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