Marinos norcoreanos
regresarán a Cuba sin armas, azúcar ni capitán
Más de 30 tripulantes del barco que trasladaba los pertrechos desde la isla a Pyongyang
pagaron una multa en Panamá y fueron liberados, pero su jefe y otros dos cómplices seguirán detenidos
El abogado de los marineros, Julio Berríos, dijo a la agencia AP que viajó el martes a una base del Servicio Aéreo Nacional de Panamá en la provincia de Colón, al norte de la capital, para verificar el traslado de los marinos al barco mercante, atracado frente a la unidad militar.
"Se están haciendo algunas pequeñas revisiones mecánicas y de limpieza al buque para poder partir hacia Cuba en las próximas 48 horas", aseguró.
La fiscalía del caso ordenó a fines de enero la liberación de 32 de los 35 marinos por considerar que no estaban al tanto de la carga bélica, mientras que determinó el seguimiento del proceso a los tres restantes, entre ellos el capitán, por tráfico de armas. En tanto, los representantes del barco pagaron recientemente una multa que les impuso la Autoridad del Canal de Panamá por no haber declarado que transportaban las armas y que les impedía llevárselo.
El fiscal del caso, Nahaniel Murgas, dijo que tenía entendido que las autoridades migratorias habían verificado la situación de los norcoreanos, pero que no sabía sobre su traslado a la embarcación.
El barco fue detenido en julio de 2013 cuando intentaba cruzar la vía interoceánica con rumbo al Pacifico. Inicialmente, las autoridades panameñas ordenaron su abordaje ante sospechas de que llevaba drogas, pero lo que encontraron fueron pertrechos militares en contenedores ocultos bajo toneladas de azúcar cruda.
Una avión cubano apareció debajo del cargamento de azúcar
Las autoridades cubanas informaron poco después que el barco se dirigía hacia Corea del Norte con un cargamento de 10.000 toneladas métricas de azúcar y 240 toneladas métricas de armamento defensivo obsoleto para su reparación en la nación asiática y posterior devolución.
Expertos del Comité de Sanciones del Consejo de Seguridad de la ONU estuvieron en Panamá en agosto para inspeccionar las armas y presentaron un informe preliminar, que no ha sido divulgado oficialmente por el organismo. El gobierno panameño aseguró que el informe indica que el incidente fue una infracción al embargo de armas impuesto a Corea del Norte.
Las armas y el azúcar siguen bajo custodia de las autoridades panameñas.
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