El 25 de diciembre llegó a las salas el primer volumen de Nymphomanic, de Lars Von Trier. Anunciada a bombo y platillo, la película quería ser un análisis de la sexualidad de la mujer. Para ello, el danés decidió llenar la pantalla de escenas de sexo explícito. Tras tontear con las escenas de alto voltaje en Anticristo, Von Trier volvía a autoproclamarse rey del escándalo gracias a este filme que, para alimentar la polémica, se estrenó el día de Navidad.
La campaña mediática en torno al filme fue brutal. Todo el mundo hablaba de Nymphomaniac, de Lars von Trier (y su trifulca con su protagonista Charlotte Gainsbourgh) y de las polémicas de Shia Labeouf.
La película tenía todo a favor para, al menos, igualar los resultados de las otras cintas de Von Trier. Golem, su distribuidora, apostó por un estreno medido de 50 copias y consiguió en su primer fin de semana 84.300 euros, es decir, 1.655 euros por cada una de ellas. Un resultado por debajo de sus anteriores filmes, Anticristo y Melancolía, que lograron 1.900 y 2.100 euros por copia sin tanto ruido mediático.
El primer volumen de Nymphomaniac no cumplía con las expectativas y se quedaba en 50.000 espectadores en los cines. Anticristo superó los 80.000 y Melancolía los 100.000. ¿Qué pasó para que la película quedara en tierra de nadie? ¿Fue el sexo explícito lo que alejó a los espectadores?
No es el primer caso. En España los filmes de estas características son distribuidos en un número de copias muy escasas, dirigidos a un sector muy limitado y nunca terminan de funcionar. Shortbus, de John Cameron Mitchell, se quedó en los 41.000 espectadores, mientras que 9 songs, de un director de culto en plena efervescencia en aquel momento como Michael Winterbottom, no pasó de los 32.000.
A pesar de estos precedentes esta semana ha llegado a nuestras salas El desconocido del lago, distribuida por Karma Films. La película cuenta una historia de suspense en un lago en el que los homosexuales acuden a practicar cruising, es decir, sexo con desconocidos. El filme levantó mucha polvareda en Cannes por atreverse a mostrar escenas reales de sexo entre dos hombres.
La obra de Alain Guiraudie es uno de los títulos mejor recibidos por la crítica en 2013. Ganó el premio a la mejor dirección en la sección Un Certain Regard de Cannes y fue nominado a 8 premios César. Una película dirigida a un sector cinéfilo que, sin embargo, sólo se estrena en 14 copias en toda España.
El Responsable de Compras de Karma, Daniel Bajo, confiesa a El Confidencial que no tienen el mejor estreno posible, ni el deseado por ellos. “Hemos tenido problemas con empresarios que no han querido poner la película en sus salas porque decían que era un tema muy fuerte, que era muy gay o porque temían quejas de la gente”, asegura.
De nada han servido los premios conseguidos; de hecho, Daniel Bajo asegura que pensaba que las críticas y los galardones ayudarían a la distribución del filme: “Muchas compañías se interesaron en la película al ver todos los premios, pero en cuanto les mandábamos material y veían las escenas nos llamaban y decían que no era para su público objetivo”.
El resultado es que la película sólo ha llegado a una sala en todo Madrid y otra en Barcelona, cuando desde la empresa esperaban distribuir tres copias en cada ciudad.
El primer problema ante una película con sexo explícito no está en el público, sino en los propios distribuidores, que no se atreven a llevar a la gente propuestas más arriesgadas. Sin embargo, los espectadores tampoco terminan de conectar con este tipo de propuestas. “Cuando es un cine erótico, sí que el público se siente mucho más atraído, pero cuando se pasa a la escena de sexo explícito parece que a la gente le dé rubor”, cuenta Daniel Bajo a este periódico.
El responsable de Ventas de Karma va un paso más lejos al hablar sobre los prejuicios de los distribuidores y espectadores. No es lo mismo una escena sexual entre dos hombres que entre dos mujeres: “El sexo gay es más tabú todavía que el sexo lésbico”, opina haciendo referencia al éxito de La vida de Adele. Este filme, con fuertes escenas eróticas, ha conseguido llegar a los 118.878 espectadores en España y no tuvo tantos problemas de distribución como El desconocido del lago.
Las dificultades encontradas por Karma se contraponen al éxito que ha tenido la película en sus tres días de exhibición dentro del Atlántida Film Fest, donde consiguió ser el segundo título más visto. “Quizás la gente quiere ver estas películas desde casa”, comenta Bajo.
Desde la Federación de Exhibidores Cinematográficos Españoles no comparten que el sexo explícito sea un problema en el éxito de una película. Su responsable de Comunicación y Marketing, Borja de Benito, considera que el tema es sólo uno de los factores que influyen en un filme: “No hay una fórmula exacta para que una película funcione en taquilla. No digo que el tema no influya, pero no es la única causa para el fracaso”.
En su opinión, lo único que asegura un resultado positivo es una buena campaña de publicidad: “La gente quiere ver la película, da igual que tenga sexo explícito o no, eso es secundario”.
El desconocido del lago Ya en cines de España y Argentina hasta el 25 de marzo
César al Mejor Actor Revelación (Pierre Deladonchamps) Academia de Cine Francés 2014
Giraldillo de Oro a la Mejor Película Festival de Cine Europeo de Sevilla 2013
Mejor Dirección de Fotografía Festival de Cine Europeo de Sevilla 2013
Mejor Director "Un Certain Regard" Festival de Cannes 2013
Verano. Un lugar para ligar exclusivo para hombres oculto a orillas de un lago. Franck se enamora de Michel, un hombre atractivo, fuerte aunque mortalmente peligroso. Franck sabe todo esto pero aún así desea vivir esta pasión de todos modos.
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