EFE / CARACAS
"Si creían que con esta farsa de diálogo iban a engañar a la comunidad internacional se equivocan", explicó la dirigente opositora María Corina Machado en alusión a las conversaciones iniciadas por el Gobierno y la plataforma opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en una rueda de prensa en la plaza Brión de Caracas.
Para Machado "ha quedado demostrado frente a Venezuela y el mundo cuál es la naturaleza de este régimen". Pero advierte de las consecuencias de la reunión de ayer, "las palabras de los voceros del oficialismo hoy nos dan más fuerza para mantenernos fuerte", añadió.
Machado aseguró que uno de los objetivos del encuentro entre oposición y Gobierno en Miraflores "era dividir a las fuerzas democráticas, dividir a la unidad". "Nosotros seguimos y seguiremos en la calle hasta lograr la democracia y la libertad", agregó la exparlamentaria, despojada a finales de marzo de su condición de diputada por decisión del Tribunal Supremo tras participar en la OEA como "representante alterna" de Panamá.
Gobierno y oposición comenzaron ayer un diálogo sin precedentes para tratar de buscar una salida a la crisis política que vive el país desde hace semanas, y que contó con la presencia del nuncio vaticano en Venezuela y con tres cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanas como acompañantes.
La líder radical opositora y diputada destituida, María Corina Machado, ratificó este viernes su rechazo a participar en las rondas de diálogo convocadas por el gobierno venezolano, que pretende frenar dos meses de protestas sangrientas.
"Eso no es un diálogo. Llamemos las cosas por su nombre. Es un debate televisado en condiciones absolutamente injustas", respondió Machado este viernes en una rueda de prensa desde una plaza del este de Caracas, consultada sobre su asistencia al segundo encuentro gobierno-oposición del próximo martes.
Este jueves el gobierno y la oposición se encontraron en el palacio de Miraflores donde lanzaron un diálogo inédito que pretende frenar dos meses de manifestaciones en Venezuela con saldo de 41 muertos, 674 lesionados y 175 privados de libertad.
A la cita faltaron los representantes del ala radical de la oposición, entre ellos Machado, quien condiciona su asistencia a la liberación de estudiantes y líderes de oposición aún detenidos. "Si creían que con esa farsa de diálogo iban a engañar a la comunidad internacional, se equivocan. Ese engaño de anoche (del jueves) nos da más razones para seguir en la calle", agregó la diputada destituida por el Tribunal Supremo de Justicia, cuya sentencia está en apelación.
Acto seguido, el alcalde del distrito metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, informó entre aplausos de una nueva protesta el sábado hacia un municipio bajo gobierno chavista.
Machado y Ledezma, con el encarcelado líder del opositor partido Voluntad Popular, Leopoldo López, encabezan una táctica que busca forzar con protestas callejeras la renuncia del presidente Nicolás Maduro.
Las manifestaciones en Venezuela se iniciaron en San Cristóbal (oeste) el 4 de febrero con reclamos por la inseguridad en las universidades y se extendieron a otras ciudades por la crisis económica, la violaciones de derechos humanos a manifestantes y la detención de líderes estudiantiles y opositores.