En paz descanse, el fue un gran artista gay adelantado a su tiempo, admirado en Cuba y tambien en
muchos países, nunca se fue de Cuba, y supo vivir en la isla exclava sin mezclar la politica con su arte.
AFP / LA HABANA El destacado declamador Luis Carbonell, conocido como el “Acuarelista de la Poesía Antillana” murió este sábado en la Habana a los 90 años de edad, informó el portal Cubadebate, sin precisar la causa del deceso.
“Luis Carbonell, el Acuarelista de la Poesía Antillana, falleció esta madrugada en La Habana a los 90 años de edad”, dijo en una escueta nota Cubadebate.cu, citando a la emisora Radio Rebelde.
Nacido en Santiago de Cuba, el 26 de julio de 1923, Carbonell “sobresalió en el montaje de voces y un repertorista de sólidos conocimientos del trabajo con solistas, a los que ha acompañado como pianista”.
Añadió que “debido a su trayectoria artística, dentro y fuera del país, fue merecedor de los más importantes premios del arte en Cuba”, entre ellos los Nacionales del Humor y el de la Música, en 2003.
“Mi madre se oponía rotundamente a que yo también fuera declamador. Para mí ella reservaba las carreras de Derecho o en su defecto Medicina. Quise complacerla, pero dentro de mí se imponía cada vez con más fuerza el deseo de recitar”, rememoró Carbonell en una ocasión. AFP
El llamado "Acuarelista de la Poesía Antillana" popularizó la poesía y el arte de declamar
en la radio, la televisión, los cabarets y la industria discográfica de Cuba.
Olga Navarro, Luis Carbonell y la Fornés
El destacado declamador Luis Carbonell, conocido como el "Acuarelista de la Poesía Antillana" murió este sábado en La Habana a los 90 años de edad, informaron medios de prensa.
Luis Mariano Carbonell Pullés nació en Santiago de Cuba, el 26 de julio de 1923 y desde inicios de la década de los 50, popularizó la poesía y el arte de declamar en la radio, la televisión, los cabarets y la industria discográfica de Cuba.
Su gracia como declamador quedó plasmada en los discos "Luis Carbonell en la poesía afroamericana", "Estampas de Luis Carbonell", "Luis Carbonell en la poesía antillana", entre otros.
“Empecé recitando, como ya dije, de casualidad, porque me aprendía lo que recitaba mi hermana y me gustaba la poesía. La primera vez que recité en un programa fue también una casualidad. Tuve oportunidad, ya en la emisora, de poner en práctica algo que se me había ocurrido, que luego he desarrollado mucho y que Alejo Carpentier elogió cuando me escuchó en Venezuela y predijo que aquello se prestaba a una elaboración artística importante. Pensé que no era suficiente con declamar los poemas sino que debían ser enmarcados en un ambiente para darles más prestigio, más valor. Fue cuando se me ocurrió acompañar el poema con ritmo. En la misma emisora tenía los músicos, y un día le dije al bongosero: ‘Tócame un ritmo de son’, y empecé a explorar el modo de recitar con ritmo. Eso que hoy se llama rap ya lo había hecho yo en el año 45, o así lo dice un libro de Cristóbal Díaz Ayala cuando habla de la historia de la música cubana. Yo mismo me sorprendí cuando lo leí, porque aquello lo hice intuitivamente. También recité con acompañamiento musical. Tuve oportunidad de trabajar con el dúo de las hermanas Reyes y se me ocurrió también imbricar la música dentro del poema, no simplemente como un telón. El fondo musical no me interesa porque no tiene ningún mérito. Empecé a recitar poemas de ambiente musical en los que estaba justificada la música y por lo tanto se considera una creación dentro de la declamación”, explicó el artista en una ocasión.
Recordado por sus interpretaciones de "Los quince de Florita” y "Esa negra Fuló...", Carbonell fue merecedor de los más importantes premios del arte en Cuba, entre ellos los Nacionales del Humor y el de la Música, en 2003.
Personalidades de la cultura y miembros del Gobierno asisten al velatorio. Los Castro envían ofrendas florales.
Luis Carbonell, llamado en Cuba el "Acuarelista de la Poesía Antillana", falleció esta madrugada en La Habana, a los 90 años de edad, víctima de un infarto cardiaco, informa la prensa oficial de Isla.
Nacido en Santiago de Cuba, el 26 de julio de 1923, Luis Mariano Carbonell Pullés, actuó por primera vez en 1943, en un programa de aficionados de la emisora radial CMKC, del cual luego llegó a ser director artístico.
En Santiago de Cuba trabajó como profesor de inglés, pero dedicaba el resto de su tiempo a la radio.
Alrededor de 1945 viajó a Nueva York, y un año más tarde, en esa ciudad, se produjo su encuentro con la cantante Esther Borja a través de la cual conoció al pianista compositor Ernesto Lecuona.
Gracias a Lecuona pudo presentarse en la cadena NBC.
En 1948 ofreció el recital Poesía afroantillana en el Carnegie Hall. Ese mismo año regresó a Cuba para trabajar en la CMQ. En esa etapa surgió el calificativo con el cual se le siguió identificando en la Isla, "Acuarelista de la Poesía Antillana", según Ecured.
Carbonell, también pianista y arreglista, fue uno de los fundadores de los espacios artísticos de la televisión cubana.
Después de 1959 fue una figura constante en los medios estatales de la Isla y se presentó en Estados Unidos, Puerto Rico, México, Panamá, Venezuela, República Dominicana, Colombia, Nicaragua y España.
En 2003 recibió el Premio Nacional del Humor y el Premio Nacional de Música. Además, la Distinción por la Cultura Nacional, entre otros galardones.
Sus restos eran velados este sábado en la sede nacional de la oficialista Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), en La Habana, a donde acudió el primer vicepresidente cubano, Miguel Díaz-Canel. Fidel y Raúl Castro enviaron ofrendas florales.
Díaz-Canel describió a Carbonell como una "personalidad imprescindible" de la cultura cubana.
Señaló que lo conoció personalmente y apreció "su bondad, su afabilidad, su decencia".
"Era un hombre muy ético, un hombre también muy revolucionario que defendió sin par la cultura cubana", dijo.
Su muerte "trasciende a la nación cubana", opinó Díaz-Canel. "Pienso que el Caribe y la América Latina están sintiendo también su muerte".
"Carbonell fue un hombre de patriotismo entrañable, orgánico, ajeno a toda retórica y dueño de una humildad sin límites", consideró por su parte Abel Prieto, asesor de Raúl Castro.
La pianista Pura Ortiz, amiga de Carbonell, resaltó que "formó voces, cuartetos, agrupaciones. Era una persona muy sincera y abierta a decir la verdad. Ha sido una base en la cultura cubana y no creo que alguien pueda igualar lo que hacía. Como él, nadie", dijo.
La cantante Farah María afirmó que recuerda a Carbonell como a un familiar cercano y que lo extrañará siempre.
El humorista Carlos Ruíz de la Tejera, señaló que Luis Carbonell fue "de esos artistas irrepetibles", como Esther Borja y Bola de Nieve
"No debemos de estar tristes porque dejó todo un camino hecho y muchos ejemplos de cómo debe ser el arte", expresó.