Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

Cuba Eterna
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 BANDERA DE CUBA 
 MALECÓN Habanero 
 *BANDERA GAY 
 EL ORIGEN DEL ORGULLO GAY 
 ALAN TURING 
 HARVEY MILK 
 JUSTIN FASHANU FUTBOLISTA GAY 
 MATTHEW SHEPARD MÁRTIR GAY 
 OSCAR WILDE 
 REINALDO ARENAS 
 ORGULLO GAY 
 GAYS EN CUBA 
 LA UMAP EN CUBA 
 CUBA CURIOSIDADES 
 DESI ARNAZ 
 ANA DE ARMAS 
 ROSITA FORNÉS 
 HISTORIA-SALSA 
 CELIA CRUZ 
 GLORIA ESTEFAN 
 WILLY CHIRINO 
 LEONORA REGA 
 MORAIMA SECADA 
 MARTA STRADA 
 ELENA BURKE 
 LA LUPE 
 RECORDANDO LA LUPE 
 OLGA GUILLOT 
 FOTOS LA GUILLOT 
 REINAS DE CUBA 
 GEORGIA GÁLVEZ 
 LUISA MARIA GÜELL 
 RAQUEL OLMEDO 
 MEME SOLÍS 
 MEME EN MIAMI 
 FARAH MARIA 
 ERNESTO LECUONA 
 BOLA DE NIEVE 
 RITA MONTANER 
 BENNY MORÉ 
 MAGGIE CARLÉS 
 Generación sacrificada 
 José Lezama Lima y Virgilio Piñera 
 Caballero de Paris 
 SABIA USTED? 
 NUEVA YORK 
 ROCÍO JURADO 
 ELTON JOHN 
 STEVE GRAND 
 SUSY LEMAN 
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
 
 
  Herramientas
 
General: Las vacas sagradas en Cuba tendrán que seguir siendo flacas
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 2 en el tema 
De: guajiro cubano  (Mensaje original) Enviado: 04/10/2014 19:17
Las vacas sagradas de Cuba
dos-vacas.jpg (1600×1200)
Las vacas en Cuba tendrán que seguir siendo flacas
POR LORENZO DEL SOL / La Habana, Cuba
Al tío de Osmany se le fue la mano con la vaca y la mató. Para ser precisos lo que se le escapó fue un codazo. Lo asestó con tanta saña que el animal cayó sobre las rodillas y quedó como tonto. El hombre intentó reanimarlo pero todo fue inútil. Durante varias semanas la familia de Osmany comió carne de res, intercambió jugosos solomillos por otros alimentos o artículos para la casa y se sintió a salvo de calamidades. Estaban equivocados. El tío de Osmany fue condenado a cinco años de cárcel.

En Cuba, aunque por otros motivos, las vacas son tan sagradas como en la India. La pena por ajusticiar a una bestia puede ser de veinte años. El sobrino del condenado sospecha que la de su tío fue leve, «porque el animal era viejo y estaba en los huesos». La muerte de un bovino en la isla es una tragedia para la familia. El padrón del ganado es tan riguroso como el de los seres humanos. «Aquí hay más presos por la muerte de vacas que por razones políticas», recuerda.

La carne es uno de los productos más preciados por el cubano. En la libreta de racionamiento no figura, como tampoco la leche. Ésta únicamente se facilita, en polvo, a los niños menores de 7 años. Una vez cumplida esa edad desaparece del régimen alimenticio oficial.

 Alimentos para un mes 
En la libreta de Natasha, prima de Osmany, hay seis libras de arroz, cinco de azúcar blanca y azúcar prieta (morena), una de granos que suelen ser frijoles, chícharo, que viene a ser un guisante seco para cocinar guisos, medio kilo de sal, diez huevos, medio pollo y otro tanto de pescado. Este mes también le han marcado con una cruz el paquete de galletas que le corresponde y el envase de picadillo enriquecido, una especie de engrudo que recuerda a las latas de comida para perro. Con esto y ochocientos gramos de pan diario se supone que ella y su marido, Ricardo, tienen la cesta de la compra cubierta hasta abril. «Te imaginas que no nos alcanza para nada», observa.

 «Se cayó del camión» 
El matrimonio vive en Cienfuegos, a unos 240 kilómetros al sureste de La Habana. Hoy tienen de visita a Osmany y a un amigo suyo español. Aunque los cubanos tienen prohibido relacionarse con extranjeros, salvo por imperativo laboral, se arriesgan y le ceden su cuarto al turista. A la mañana siguiente, sobre la mesa del desayuno, el español tendrá una botella de agua mineral exclusiva para él, café y... leche. «Se cayó del camión», explican entre risas. La expresión, junto con la de «bolsa negra» (mercado negro), resume el doble circuito sobre el que gira la economía.
El trapicheo y la corrupción forman, forzosamente, parte del modo de vida del cubano. «Para sobrevivir todos tenemos que violar la ley», reconoce Natasha, mientras enseña una dentadura reluciente. «¿Pasta de dientes? -repite- Sí, en la libreta tenemos un tubo cada dos meses y cuando ha faltado nos los hemos cepillado con sal. Durante el periodo especial, todos lo hacíamos así».

 El «periodo especial» 
El «periodo especial» al que se refiere es la década de los años 90. La desaparición de la Unión Soviética interrumpió la financiación de la isla por parte de Moscú, su gran valedor. La perla del Caribe perdió su principal fuente de subsidio, «esos fueron los peores años, recuerda. No había comida, ni combustible y en algunos lugares los caballos tiraban de las ambulancias». Hoy no es así, el chorreo de barriles de Hugo Chávez surte las gasolineras cubanas que disponen del equivalente a gasolina super, normal y sin plomo.

La cartilla de Natasha concluye con productos de aseo personal: «Una pastilla de jabón de baño al mes, otra para lavar ropa y un paquete de paños higiénicos (compresas) que, a mi -comenta risueña-, no me sirven para nada». El resto de los artículos de droguería o perfumería, como «el papel higiénico» corre por cuenta del cubano pero resulta muy caro para ellos. Osmany lo sabe por eso, en esta visita, lleva el suyo en una bolsa.

La carne es uno de los productos más apreciados por el cubano. En la libreta de racionamiento no figura, como tampoco la leche


Primer  Anterior  2 a 2 de 2  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 2 de 2 en el tema 
De: guajiro cubano Enviado: 04/10/2014 19:22
Cuba: ganado en ruina
vaca-flaca1.jpg (320×210)vacas-flacas.jpg (300×225)
Las vacas en Cuba tendrán que seguir siendo flacas
Por Iván García
Hubo una vez en Cuba una vaca sagrada. Fue tan especial, que los mandarines de la prensa oficial destinaron una tropa de reporteros solo para noticiar las hazañas del bovino.

La nombraron Ubre Blanca. Era un ternero de Fidel Castro que llegó a romper, un día tras otro, récords mundiales en la producción lechera. Fue portada de los noticieros de televisión y titular del Granma cuando alcanzó 110 litros diarios de leche.

Luego no se supo más de la res. Según las malas lenguas, unos matarifes ilegales de ganado vacuno le pasaron la cuenta una noche cualquiera. No está confirmado el supuesto 'crimen'.

Lo cierto es que en las afueras de La Habana, a las puertas de un centro de investigación científica, hay una estatua de mármol de aquella vaca divina.

Después de la caída del Muro de Berlín, la ganadería cubana se convirtió en una ruina. Echémosle un vistazo a la prensa nacional.

En 2013, el periódico Granma informó que más de 18 mil 400 reses estaban muriéndose de hambre y enfermedades en la provincia de Villa Clara, 300 kilómetros al este de La Habana.

El propio órgano oficial del Partido Comunista de Cuba, en abril de 2014 destacaba que algo más de 3,300 vacas murieron en los tres primeros meses en la provincia de Holguín y otras 69 mil están evaluadas como desnutridas.

La delegación holguinera del Ministerio de la Agricultura culpa a la sequía, que ha provocado el agotamiento de pozos, micropresas y tranques, sobre todo en los municipios de Calixto García, Urbano Noris, Holguín y Gibara.

Según Granma, 35,000 cabezas de ganado vacuno reciben agua a través de pipas, como parte de las medidas para intentar atenuar los efectos de más de siete meses sin lluvias.

Lenna Ravelo Fombellida, jefa del Departamento de Ganadería de la Delegación Provincial de la Agricultura de Holguín, dijo que las áreas de pastoreo están prácticamente calcinadas por el sol, y el territorio de Calixto García es el más afectado.

La funcionaria añadió que para los animales considerados desnutridos se han creado centros de recuperación en los que se les suministran "alimentos frescos", como caña molida.

Ravelo señaló que un número importante de vacas han salido del ordeño para que puedan amamantar a sus terneros."Se dispone así de menos leche para vender, pero son animales que hoy promedian dos litros o menos, de ahí que se aconseje garantizar la supervivencia de las crías", argumentó.

Reconoció que una parte de los productores de los sectores estatal y cooperativo-campesino no disponen de suficientes reservas de alimentos, sobre todo de caña y heno, para momentos como estos.

Las noticias sobre muertes masivas de reses son frecuentes en la isla, aunque el régimen no suele dar cifras nacionales. Pero no solo de hambre o sed mueren las vacas en Cuba.

A pesar que el Código Penal dedica todo un capítulo al sacrificio ilegal de ganado y la comercialización de su carne, con sanciones de cuatro a diez años de cárcel al matarife sin autorización estatal y de 4 a ocho años de prisión para quienes que la transporten y vendan, 2 mil 300 reses son hurtadas o sacrificadas anualmente.

Desde hace décadas, la carne de res es un alimento suntuario. No siempre fue así. Antes de 1959, en las regiones urbanas, se comía más carne de res que de cerdo o pollo.

“En cualquier esquina de La Habana, por 15 centavos, podías comprar un pan con un bistec que parecía una sábana. El picadillo de res, que hoy es un lujo, era comida de gente muy pobre, los carniceros te lo daban de contra (propina)”, recuerda con nostalgia Luis, un anciano que ya supera los 90 años.

Con la llegada al poder de Fidel Castro, la carne de res comenzó a escasear. En los años 60, 70 y 80, vendían media libra quincenal por persona a través de la libreta de racionamiento, implantada en 1962.

En 1990, con la llegada de esa guerra sin rugir de cañones nombrada "período especial en tiempos de paz", la carne de res simplemente desapareció.

En 1994, con la legalización del dólar, se comenzó a vender en los mercados por divisas que, como flores, surgieron a lo largo de todo el país.

En 3ra y 70, Miramar, supermercado a tiro de piedra del Océano Atlántico y donde suelen hacer sus compras diplomáticos, ministros y hombres de éxito, una bandeja plástica con un kilo de picadillo de primera supera los 6 dólares.

Otros cortes cuestan más caro. Un boliche de 3 kilogramos bordea los 45 dólares. El cubano de a pie ni siquiera mira esos estantes. La gente que recibe dólares de sus parientes en Miami o han montado un pequeño negocio privado la suelen comprar en el mercado negro, donde una libra se comercializa entre 2.20 y 2.50 pesos convertibles.

Si en 1959 había 6 millones de cabeza de ganado vacuno, a una per cápita, 55 años después, según la última cifra ofrecida por el Estado en 2006, no supera los 3 millones 70 mil para una población de 11 millones de habitantes.

Cuando usted visita cualquier vaquería cubana notará la depauperación de las reses y hacinamiento en los centros de cría.

Para Fidel Castro, la ganadería fue una auténtica pasión. Mandó a construir vaquerías con aire acondicionado en la periferia de la capital y le pagó los billetes aéreos a especialistas calificados del mundo, para que asesoraran la ganadería nacional.

Cuentan escoltas que han desertado a Estados Unidos, que llegó a tener una ternera en el último piso de un edificio de apartamentos en el Vedado, donde vivía Celia Sánchez, su secretaria personal.

En plena ebullición ganadera, Castro creó una nueva raza, a la cual denominó F-1. Y declaró públicamente que cada cubano sería dueño de una vaca enana para cebarla en su domicilio.

De uno de esos ensayos surgió Ubre Blanca, la ternera sagrada que producía más de 100 litros de leche diariamente.

Tras su misteriosa muerte concluyó el experimento. Las vacas comenzaron a morir de hambre, enfermedades o sacrificadas ilegalmente. No hubo más carne. Ni leche.






 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados