EFE / WASHINGTON
La ex secretaria de Estado Hillary Clinton, que evalúa competir en la carrera por la Casa Blanca en 2016, apoya la decisión del presidente Barack Obama de “cambiar de rumbo” en la política estadounidense hacia Cuba, según indicó en un comunicado divulgado el jueves por los medios locales.
“A pesar de las buenas intenciones, nuestra política de aislamiento durante décadas solamente ha fortalecido el mantenimiento del régimen de los Castro en el poder”, reflexionó Clinton.
Para Clinton, “el objetivo de aumentar la participación de Estados Unidos en los días y años venideros debe ser alentar reformas y duraderas para el pueblo cubano”.
“Y las otras naciones de las Américas deben unirse a nosotros en este esfuerzo”, pidió la ex jefa de la diplomacia estadounidense.
Además, Clinton subrayó que el “objetivo principal” de Estados Unidos debe seguir siendo “apoyar las aspiraciones de libertad del pueblo cubano”.
Obama y su homólogo cubano, Raúl Castro, anunciaron ayer el comienzo de un proceso para normalizar las relaciones diplomáticas entre ambos países, rotas desde 1961, que contempla la apertura de embajadas en Washington y La Habana en los próximos meses.
Las conversaciones secretas entre delegaciones de Estados Unidos y Cuba para explorar la normalización de las relaciones comenzaron hace más de un año y las reuniones se celebraron en su mayoría en Canadá.
El Vaticano también facilitó los contactos, recibiendo a delegaciones de los dos países, y el papa Francisco se involucró personalmente para impulsar las negociaciones.
Uno de los mayores obstáculos dentro del proceso, como reconoció el propio Obama, era la situación del contratista estadounidense Alan Gross, condenado a 15 años de cárcel en Cuba por actividades subversivas.
Gross fue liberado y ayer pisó de nuevo suelo estadounidense tras haber pasado más de cinco años preso en La Habana, mientras que los tres agentes cubanos del grupo de “Los Cinco” condenados en 2001 que aún estaban encarcelados en Estados Unidos también recuperaron la libertad y regresaron a la isla.
Los tres agentes, Gerardo Hernández, Ramón Labañino y Antonio Guerrero, fueron liberados a cambio de un oficial de inteligencia de origen cubano que trabajó para Estados Unidos y llevaba casi 20 años preso en la isla.
Clinton también expresó en el comunicado su “alivio” por el retorno de Gross al país, y recordó que ella presionó por su liberación cuando era secretaria de Estado.
En su libro de memorias, publicado en junio pasado, Clinton cuenta que cuando era secretaria de Estado, cargo que ocupó desde 2009 hasta enero de 2103, recomendó a Obama suavizar el embargo económico contra Cuba porque, a su juicio, no está “consiguiendo sus objetivos”.
Obama pidió ayer al Congreso, que a partir de enero estará controlado totalmente por la oposición republicana, que inicie un debate “serio y honesto” sobre ese embargo económico unilateral impuesto a Cuba en 1961, durante la presidencia de John F. Kennedy.
El populismo es el gran enemigo de la libertad en nuestro tiempo.
Mario Vargas LLosa