El final tan esperado de una telenovela fue censurado por TV Azteca, que de último instante decidió cortar una escena entre los dos actores protagonistas.
Según el sitio web de la revista TV Notas, la cadena de televisión se vio arrepentida y confusa cuando censuró la escena del beso gay entre "Félix" (Mateus Solano) y "Niko" (Nicolas Corona).
El capitulo en cuestión salió en cadena nacional el pasado 8 de mayo por Canal 13. Los minutos cortados fueron recuperados por otros medios que, sin dudar, pasaron la escena completa.
La homofobia en televisión no entiende de fronteras, y en muchos lugares del mundo se han censurado gays, desde Angola a Estados Unidos, pasando por México. Y es que en este último país se ha eliminado un beso que se dan dos hombres en una telenovela emitida en TV Azteca. Se trata del culebrón ‘Rastros de mentiras‘, y en su final los personajes de Félix (Mateus Solano) y Niko (Nicolas Corona) fundieron sus labios, pero la secuencia se quedó en la sala de edición.
‘Rastros de mentiras’ es una ficción de origen brasileño y cuenta el enfrentamiento de los miembros de una familia por hacerse con el control de un afamado hospital. Félix (Mateus Solano), el hijo mayor, no muestra vocación sanitaria y se graduó en administración, para poder trabajar en la junta directiva del hospital y poner en práctica sus planes de ser el único en estar al frente de la empresa familiar. Pero Félix oculta a todos ser bisexual, y mantiene un matrimonio la estilista Edith (Bárbara Paz), que no lleva a ninguna parte.
De hecho, su sexualidad tendrá un importante peso en la trama, incluyendo una traumática salida del armario ante sus familiares, incluido su hijo.
Cabe destaca que la televisión, y en general la sociedad mexicana, todavía mantienen un rechazo generalizado hacia orientaciones sexuales diferentes, y se tratan con pinzas temas como la homosexualidad y otros que generan polémica.
En los últimos años TV Azteca ha traído a México producciones brasileñas, como ‘Avenida Brasil’, que presentan temas mucho más liberales que los acostumbrados en la televisión mexicana, que es bastante conservadora.