Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

Cuba Eterna
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 BANDERA DE CUBA 
 MALECÓN Habanero 
 *BANDERA GAY 
 EL ORIGEN DEL ORGULLO GAY 
 ALAN TURING 
 HARVEY MILK 
 JUSTIN FASHANU FUTBOLISTA GAY 
 MATTHEW SHEPARD MÁRTIR GAY 
 OSCAR WILDE 
 REINALDO ARENAS 
 ORGULLO GAY 
 GAYS EN CUBA 
 LA UMAP EN CUBA 
 CUBA CURIOSIDADES 
 DESI ARNAZ 
 ANA DE ARMAS 
 ROSITA FORNÉS 
 HISTORIA-SALSA 
 CELIA CRUZ 
 GLORIA ESTEFAN 
 WILLY CHIRINO 
 LEONORA REGA 
 MORAIMA SECADA 
 MARTA STRADA 
 ELENA BURKE 
 LA LUPE 
 RECORDANDO LA LUPE 
 OLGA GUILLOT 
 FOTOS LA GUILLOT 
 REINAS DE CUBA 
 GEORGIA GÁLVEZ 
 LUISA MARIA GÜELL 
 RAQUEL OLMEDO 
 MEME SOLÍS 
 MEME EN MIAMI 
 FARAH MARIA 
 ERNESTO LECUONA 
 BOLA DE NIEVE 
 RITA MONTANER 
 BENNY MORÉ 
 MAGGIE CARLÉS 
 Generación sacrificada 
 José Lezama Lima y Virgilio Piñera 
 Caballero de Paris 
 SABIA USTED? 
 NUEVA YORK 
 ROCÍO JURADO 
 ELTON JOHN 
 STEVE GRAND 
 SUSY LEMAN 
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
 
 
  Herramientas
 
General: Los derechos humanos en Cuba son a conveniencia
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 1 en el tema 
De: guajiro cubano  (Mensaje original) Enviado: 25/05/2015 15:02
Cuba: derechos a conveniencia
  
ddhh-cubahora.cu_.jpg (600×412)
 
Los portavoces oficiales hablen de “los derechos humanos
que defendemos”, acotándolos a los conocidos logros en salud y educación.
 
       Armando Chaguaceda - Havana Times
La imagen y el sonido dicen más que mil palabras. Al grito de “Abajo los Derechos Humanos”,  el anciano sintetiza, de forma terrible y magistral, la ideología oficial del estado cubano. Los Derechos Humanos (DH) son un arma del enemigo para la subversión interna. Y punto.
 
No importa que luego, en algún foro internacional, los portavoces oficiales hablen de “los derechos humanos que defendemos”, acotándolos a los conocidos logros en salud y educación. Tampoco que esas conquistas de la Revolución, en tiempos de retóricas pro-mercado, estén hoy en retirada.
 
Los perdedores de las reformas raulistas –las familias carentes de remesas, los habitantes de los barrios de la periferia capitalina y el interior del país, la masa de negros y mestizos, ancianos y mujeres pobres- las disfruten cada vez menos. Porque no pueden exigirlas como derechos, precisamente por el secuestro de derechos civiles y políticos realizado por el estado.
 
No se engañen si esos funcionarios cubanos invocan a Bonafini, Esquivel –y a otros reconocidos luchadores por los Derechos Humanos– para acusar, nuevamente, al imperialismo. Los DH son un asunto que está bien siempre que se le administre a conveniencia, se relegue al pasado, se le exija al adversario. Abordar este asunto sigue siendo hoy, básicamente, un tema tabú dentro de Cuba.
 
Son obviados –o maltratados- por la mayoría de la academia y publicaciones oficiales. No existen legalmente inscritas organizaciones defensores de estos derechos dentro del Registro de Asociaciones del Ministerio de Justicia de la República de Cuba.
 
A los ciudadanos cubanos se les hace virtualmente imposible (y punible) la acción de testimoniar, vigilar y denunciar, de forma organizada, las violaciones cometidas –a veces contra la propia legalidad socialista– por funcionarios, dada la capacidad de control social del estado y la subordinación de los medios masivos de comunicación a las directrices gubernamentales. Y cuando algunos, al margen del poder, se organizan para exigir el respeto a los derechos propios y ajenos, sufren el acoso policial y, peor aún, la práctica de los llamados actos de repudio.
 
No hay un catálogo de derechos para los revolucionarios y otro para los disidentes, es falso que sean asunto de los intelectuales o una cosa que no le interesa al pueblo. Quien se queja por un mal servicio médico y aquel que protesta por un familiar injustamente preso ejercen, de igual modo, sus derechos como ciudadanos enfrentados a una mala acción estatal. Los derechos deben ser exigibles, y existir mecanismos donde demandarlos y defenderlos.
 
También suponen un carácter universal, inherentes a cualquier sujeto y abarcar a toda la población, amén su identidad sexual, cultural, preferencia política y condición socioeconómica. Y, sobre todo, son indivisibles, por lo que si no se poseen a cabalidad, derechos civiles y políticos nunca podrá ser efectiva la defensa de los derechos sociales…. y viceversa.
 
En suma, o asumimos todos los derechos, en todas sus expresiones y para todos los ciudadanos y ciudadanas cubanos, dentro y fuera del país, o los condenamos a ser mero instrumento, punitivo y regulador, del Leviatán tropical.

 




Primer  Anterior  Sin respuesta  Siguiente   Último  

 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados