Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

Cuba Eterna
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 BANDERA DE CUBA 
 MALECÓN Habanero 
 *BANDERA GAY 
 EL ORIGEN DEL ORGULLO GAY 
 ALAN TURING 
 HARVEY MILK 
 JUSTIN FASHANU FUTBOLISTA GAY 
 MATTHEW SHEPARD MÁRTIR GAY 
 OSCAR WILDE 
 REINALDO ARENAS 
 ORGULLO GAY 
 GAYS EN CUBA 
 LA UMAP EN CUBA 
 CUBA CURIOSIDADES 
 DESI ARNAZ 
 ANA DE ARMAS 
 ROSITA FORNÉS 
 HISTORIA-SALSA 
 CELIA CRUZ 
 GLORIA ESTEFAN 
 WILLY CHIRINO 
 LEONORA REGA 
 MORAIMA SECADA 
 MARTA STRADA 
 ELENA BURKE 
 LA LUPE 
 RECORDANDO LA LUPE 
 OLGA GUILLOT 
 FOTOS LA GUILLOT 
 REINAS DE CUBA 
 GEORGIA GÁLVEZ 
 LUISA MARIA GÜELL 
 RAQUEL OLMEDO 
 MEME SOLÍS 
 MEME EN MIAMI 
 FARAH MARIA 
 ERNESTO LECUONA 
 BOLA DE NIEVE 
 RITA MONTANER 
 BENNY MORÉ 
 MAGGIE CARLÉS 
 Generación sacrificada 
 José Lezama Lima y Virgilio Piñera 
 Caballero de Paris 
 SABIA USTED? 
 NUEVA YORK 
 ROCÍO JURADO 
 ELTON JOHN 
 STEVE GRAND 
 SUSY LEMAN 
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
 
 
  Herramientas
 
General: Andrea Bocelli: NO puedo hacerme el mártir
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 1 en el tema 
De: cubanet201  (Mensaje original) Enviado: 04/11/2015 17:38
Andrea Bocelli:
«No puedo hacerme el mártir»
La voz italiana más internacional canta al amor, a los grandes de la ópera y ahora también al cine. «He visto cien veces más que quienes siempre hablan de mi incapacidad», asegura.
 
Andrea-Bocelli-008.jpg (620×372)
El cantante italiano en Nueva York -
                                      ABC
Andrea Bocelli resulta ser una persona con un físico imponente. Su altura se acentúa cuando, al final de la entrevista, se levanta de su sillón y se acerca a dar la mano. «¿Sabes por qué no me gusta hablar de mi discapacidad?», pregunta, y no espera para dar la respuesta: «Me vienen a preguntar cosas como si fuera totalmente inválido y no estoy de acuerdo. Yo he visto mucho en la vida y no me puedo hacer el mártir».

Lo dice con una voz suave, contenida, que guarda sus cuerdas vocales para empresas mayores. Pero el mensaje llega con rotundidad, a pesar de que sus asistentes avisan de que no le gusta hablar de su ceguera, que le incomoda, que es capaz de levantarse de su silla y marcharse.«He visto cien veces que más que quien siempre hablan de mi incapacidad», dice. Pero no es un Bocelli furibundo, sino dulce, amable, meloso. Como sus canciones.

Cajón de sastre
Bocelli gasta estos días su garganta en la promoción de «Cinema», su último disco, una selección de grandes canciones de la historia del cine. Es un cajón de sastre donde entran clásicos del musical -desde «No llores por mí Argentina» a «The Music of the Night», de «El fantasma de la ópera»-, tangos -«Por una cabeza», de «Perfume de mujer»-, éxitos «crooner» -«Moon River», de «Desayuno con diamantes»- o temas centrales de superéxitos como «Gladiator» o «La vida es bella».

«Son canciones que conozco de toda la vida, de cuando era pequeño y escuchaba la voz de Frank Sinatra, Mario Lanza y otros grandes intérpretes. Yo soñaba entonces cantar estas canciones algún día», dice el cantante. Las bandas sonoras son el mejor ejemplo de que la música «vale por sí misma», explica. «Cuando escuchamos estas canciones sin ayuda de las imágenes tienen una fuerza que se basta y se sobra».

«Cinema» supone una vuelta a la rama romántica de Bocelli, con toques pop -en el disco firma un par de duetos, uno de ellos con la estrella estadounidense Ariana Grande, con quien canta un tema de ‘Érase una vez en América-, y un parón en su actividad operística. «Necesitaba un descanso», reconoce Bocelli, que ha grabado recientemente «Turandot» y «Aida» con Zubin Mehta y «Manon Lescaut» a las órdenes de Plácido Domingo. En el escenario, sobre todo en la ópera, no se puede elegir entre cantar con el corazón o con el cerebro. «Hay que hacerlo con ambos, porque sin el corazón no hay arte, pero sin el cerebro existe el riesgo de no llegar al fondo de la música», asegura.

Bocelli canta con los ojos cerrados, como lo hacen los cantaores flamencos cuando rebuscan el fondo del alma. ¿Es cantar mirar hacia dentro? «Eso es cierto en todos los géneros musicales. Cuando la música propone algo al alma, cuando la quiere hacer crecer o dilatar, siempre es introspectiva».

El flamenco lleva la conversación a España, donde Bocelli estuvo la pasada primavera. Cantó en la Sagrada Familia de Barcelona y se compró un caballo andaluz, una de sus pasiones. «Llegó a mi casa la semana pasada», celebra con una amplia sonrisa. También tuvo tiempo para otra afición, el «calcio». «Me encanta el fútbol español, es un espectáculo y cuando veo el juego de Messi o Ronaldo es algo muy divertido». Deja claro que no le guarda rencor a ese deporte. Aunque tuvo problemas de visión desde su nacimiento, perdió la vista por completo en un partido de fútbol, a los doce años, jugando de portero.

«Tenemos que vivir de recuerdos», reconoce Bocelli. Pero no habla de su ceguera -«no es interesante», sino otra vez de fútbol. «El 2006 todavía está en el corazón. Y también 1982, ¿eh?», dice sobre los últimos Mundiales que ganó la escuadra «azzurra», y ríe, se atusa su pañuelo de seda multicolor y parece que se le ilumina la mirada detrás de sus gafas de aviador.
 
FUENTE ABC
  
Interview__Andrea_Bocelli.jpg (620×374)
Nueva York


Primer  Anterior  Sin respuesta  Siguiente   Último  

 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados