Reinaldo Miravalles
Considerado por muchos como el mejor actor
Cubano de todos los tiempos, falleció a los 93 años en La Habana
Las autoridades cubanas exigen a la familia
$10.000 dólares para que el cuerpo sea trasladado a Estados Unidos
Protagonista de filmes memorables como "Las doce sillas" y "El hombre de Maisinicú", el actor cubano Reynaldo Miravalles falleció el lunes 31 de octubre en Cuba, donde se encontraba de visita; Miravalles fallecio"víctima de una neumonía y complicaciones derivadas de varios padecimientos", citando a fuentes familiares.
"La situación es bien compleja", la familia está desconsolada. Las autoridades cubanas exigen $10.000 dólares para que el cuerpo sea trasladado a Estados Unidos.
Nació en el Callejón del Chorro, de la Plaza de la Catedra de La Habana Vieja, un 22 de enero del año 1923, la primera manifestación artística por la que se inclinó fue la pintura, por lo que se matriculó, cuando tenía 17 años, en la escuela anexa de San Alejandro en su curso nocturno pero la difícil situación económica que atravesaba le impidió seguir estudiando, hasta que debutó en 1944 en la radio cubana con el programa humorístico "La voz de los ómnibus aliados". A partir de esa fecha, trabajó en casi todas las emisoras radiales de La Habana.
En 1951 dio el salto a la televisión, medio en el que interpretó a cientos de personajes, aunque el más popular fue el campesino Melesio Capote, "el guajiro Melesio" con el que alcanzó una altísima popularidad. Seis años más tarde, en el año 1957 se inició en el cine con el filme venezolano Papa Lepe.
En teatro también actuó en multitud de obras, aunque sin dudas fue en un clásico cubano, Santa Camila de la Habana Vieja, donde logró su mayor éxito.
Tras el triunfo del régimen de Castro, participó en algunas de las películas más destacadas en la década de los 60 en Cuba.
Participó en varios filmes de Tomás Gutiérrez Alea, El herido (1960), El joven rebelde(1961) y Las doce sillas, entre otras. A partir de 1970, actuó en películas como Una pelea cubana contra los demonios, también de Gutiérrez Alea, y en El hombre de Maisinicú, de Manuel Pérez.
En la década siguiente, tras su participación en Polvo Rojo (1981), de Jesús Díaz, y en El Señor Presidente (1983), versión cinematográfica de Manuel Octavio Gómez de la conocida novela homónima de Miguel Ángel Asturias, Miravalles protagonizó, en 1984, una de las comedias más populares de esos años: Los pájaros tirándole a la escopeta, de Rolando Díaz.
Más tarde en 1991 el actor participó en una de las películas más polémicas del cine cubano, la comedia de humor negro Alicia en el pueblo de maravillas, de Daniel Díaz Torres.
Exiliado en los Estados Unidos desde mediados de los años 90, estudia el idioma inglés a la edad de 83 años, logrando firmar algunas peliculas para la industria cinematográfica estadounidense de Hollywood... Miravalles interpretó el papel de un veterano agente de la CIA, junto a actores de fama internacional como Saffron Burrows y Harvey Keitel,... tambien participo en la película española de Gerardo Herrera El misterio Galíndez, basada en la novela de Manuel Vázquez Montalbán.
En el 2008 protagoniza el filme Cercanía, de Rolando Díaz, que trata sobre la vida de los emigrantes cubanos en Miami, pero su último trabajo fue en el 2012 con el filme "Esther en alguna parte" una coproducción cubano-peruana (2013), por el que obtuvo numerosos premios, lo protagonizó en La Habana bajo la dirección de Gerardo Chijona, siendo su primera participación en el cine cubano después de 18 años de ausencia..
En su larga vida Reynaldo Miravalles solo tuvo la oportunidad de filmar 19 películas, muy pocas para un actor tan excepcional, otra seria su historia cinematográfica, si en la decada de los 60 cuando era joven hubiera salido al exilio.
En una de las muchas entrevistas que dio Miravalles, afirmó que, si bien emigró a Estados Unidos hace varios años, dejó "la mitad de su corazón en Cuba", amo a Cuba, pero vivo en otro país, por necesidad que tengo y porque tengo otra forma de vivir. Esta es mi patria. Dondequiera que viva, esta es mi patria.
Reynaldo Miravalles fue uno de los actores más versátiles, consistentes y expresivos de su época. Era un actor natural, con una capacidad de asombro permanente y una disposición innata para aprender. El trabajo era su método para sacar adelante cualquier personaje.
Su dimensión como intérprete rebasa las fronteras nacionales y cobra impacto iberoamericano.
Al momento de su fallecimiento se encontraba de visita en la isla, donde le sobrevive parte de su familia.
Este martes el diario Granma, Organo Oficial del Partido Comunista de Cuba (Dinastia de Castro) le dedica un párrafo. Un párrafo que Miravalles no necesita. Y eso que estamos en una “época de cambios” y de “nuevas perspectivas” en la prensa cubana.
Las autoridades cubanas exigen a la familia $10.000 dólares para que el cuerpo sea trasladado a Estados Unidos, su cadáver debe retornar a Miami para recibir honrosa sepultura. Ojalá y los trámites burocráticos que al parecer están entorpeciendo el proceso logren rebasarse para que la ciudad que lo acogió termine rindiéndole el homenaje póstumo que merece.
"El legado de Reynaldo es insuperable, es uno de los íconos que nos quedará a los cubanos"
QUE EN PAZ DESCANSE
