Los caminos del señor son inescrutables y el destino guardó una sorpresa inesperada a John Smid, un cristiano estadounidense que se dedicaba a ‘curar homosexuales’, en Oklahoma, y finalmente se enamoró de un hombre. Aunque niegues la evidencia durante dos décadas, los sentimientos no se pueden ocultar. ¡Salió del armario por la puerta grande! Mejor tarde que nunca.
Smid fue ‘pastor’ durante casi veinte años de un grupo llamado Love in Action que estaba decidido a erradicar la homosexualidad del mundo, y que trataba algo natural como si fuera una enfermedad (un “arma que usa Satán para destruir al ser humano“). ¡Vaya toalla!
Sin embargo, ‘el predicador’ sintió algo en su interior que le hizo abandonar su lucha. Se dio por fin cuenta de que el grupo, después de tratar a decenas de gays, no había logrado curar a nadie (lógica aplastante). “El poder de Dios no pudo con la ‘enfermedad’. Sentí que el Señor me había abandonado“, según comentó en una entrevista.
Pero como el roce hace el cariño, parece que el relacionarse con tantos homosexuales durante años hizo aflorar sus deseos más profundos, esos que trataba de enterrar con su ‘cruzada antigay’ (como el militar de American Beauty). Y así, el amor llamó a su puerta con nombre y apellido: Larry McQueen. Un hombre que conquistó su corazón y con el que se ha casado después de tres años de feliz noviazgo.
“A mi edad no tengo tanto tiempo por delante, así que no puedo vivir con esta mentira toda mi vida, a ver si te enteras, David John, que se nace gay, concluyó Smid. Entre tanto, David Jones, el nuevo director ejecutivo de Restorarion Path (antiguamente Love in Action) sigue enarbolando la Biblia para curar las desviaciones sexuales de sus feligreses. A ver cuánto tarda en salir del armario.
Solo espero que ahora se convierta en un activista por los derechos de los homosexuales y haga entrar en razón a sus excompañeros. Rectificar es de sabios.