|
De: CUBA ETERNA (Mensaje original) |
Enviado: 23/05/2017 16:28 |
Nunca se vio con tanta claridad el verdadero rostro de Donald Trump
Trump ataca los programas sociales y propone recortar 3,2 billones en una década El proyecto de presupuesto recorta las ayudas a los desfavorecidos, aumenta la partida militar y destina 1.400 millones al muro con México
JAN MARTÍNEZ AHRENS - WASHINGTON
Nunca se vio con tanta claridad el verdadero rostro de Donald Trump. Bajo la promesa de restaurar el sueño americano, su Administración presenta este martes su gran proyecto de presupuesto. Un plan de 4,09 billones de dólares (3,6 billones de euros) para 2018, que solo permite el aumento de las partidas destinadas a defensa y seguridad nacional, incluyendo el muro con México, pero que propone recortes de tal magnitud (3,6 billones de dólares, 3,2 billones de euros, en una década) que dejarán los programas sociales y sanitarios para los más desfavorecidos al borde de la asfixia.
Bautizado con el ampuloso nombre de Nuevo Fundamento de la Grandeza Americana, el presupuesto exhibe tanto esa ambición torrencial que caracteriza al presidente de Estados Unidos como sus prejuicios. Los inmigrantes sin papeles, los desfavorecidos y sus hijos, la población subsidiada y hasta los discapacitados pasan por la guillotina contable. Ya no se trata solo del recorte del Obamacare, la reforma que amplió el seguro médico a 20 millones de estadounidenses, sino de la caída de los grandes programas que han logrado dar estabilidad a una sociedad con más de 40 millones de pobres.
“Hasta ahora se pensaba solo en quienes recibían dinero. Eso se ha terminado. Hemos dado un giro y elaborado unos presupuestos poniéndonos en los zapatos de quienes pagan ese dinero, en el contribuyente. La compasión ya no se mide por el número de subsidiados o el dinero gastado, sino por aquellos que vuelvan a trabajar”, glosó el director de la Oficina Presupuestaria, Mick Mulvaney.
Las magnitudes presupuestarias son astronómicas. En 10 años Trump y sus asesores prometen que su proyecto reducirá el gasto en 3,6 billones de dólares, liquidará por completo el déficit (ahora situado en 600.000 millones) y rebajará la deuda publica del 76% del PIB al 59%. Todo ello bajo un constante aumento de los ingresos, que pasarían en ese decenio áureo de 3,65 billones a 5,72 billones.
Para lograrlo, el presidente y sus economistas confían en un crecimiento sostenido del PIB. Una imparable subida que el año próximo sería del 4,4% (la mayor de este siglo) y que en 2027 alcanzaría un aumento del 55% respecto a 2018. Esta es la piedra angular de su proyecto y, a su vez, su punto más débil.
Trump hace descansar esta formidable expansión en su reforma fiscal. El plan, del que solo se han facilitado pinceladas de trazo grueso, propone la rebaja de la carga impositiva para los más ricos (del 39% al 35%), facilitar la repatriación de capital, simplificar el IRPF de siete a tres tramos y sobre todo, reducir el impuesto de sociedades del 35% al 15%.
Pese a que este diseño implica una caída fuerte en la recaudación (dos billones en 10 años, según Tax Foundation), el presidente y sus consejeros confían ciegamente en que la rebaja impositiva detonará un crecimiento tan poderoso que compensará las arcas públicas y elevará la economía americana a su máxima potencia. Es la curva de Laffer. La teoría que, desde su enunciado en 1974, ha extasiado a los liberales de todas las galaxias pero que nunca ha superado la barrera crítica, y que, en el caso de la actual economía estadounidense, con un crecimiento medio en los últimos 10 años del 1,3%, parece muy alejada de cualquier meta realista.
A las dudas sobre la sostenibilidad del presupuesto se añade su polémica configuración ideológica. En consonancia con las promesas electorales, Trump apuesta por la seguridad. La partida militar aumenta un 10% (54.000 millones) y permite sumar 56.400 soldados al servicio activo, así como adquirir 84 aviones de combate y 8 naves de guerra. También se refuerzan las fronteras con 2.600 millones para tecnología y nuevas infraestructuras. Entre ellas, el denostado muro con México al que se destinan 1.600 millones (1.423 millones de euros).
Frente a este fortalecimiento de la seguridad, la guadaña cae con fuerza entre los más débiles. Trump propone una reducción de 800.000 millones en 10 años de los fondos destinados a la cobertura sanitaria para los pobres (Medicaid). También plantea un recorte de 193.000 millones en el mismo periodo para el Programa Asistencial de Nutrición Suplementaria. No es un golpe al azar. Bajo este nombre burocrático se parapeta la entrega de cartillas alimentarias para los desfavorecidos. Una iniciativa a la que en 2016 se acogieron 46 millones de personas, un 15% de la población.
El hacha golpea asimismo las ayudas a familias necesitadas (21.000 millones) y el sistema de apoyos por hijo menor (40.000 millones), del que además se excluye a todos los inmigrantes sin papeles y a aquellas personas que no estén autorizadas a trabajar en Estados Unidos. “Este presupuesto lucha por reemplazar la dependencia por la dignidad del trabajo", se justifica el documento.
El ataque a la médula de los programas sociales marcará el pulso de la contienda parlamentaria. El presupuesto muestra al Trump más descarnado y feroz. Aquel que cumple no solo su promesa de desmontar el legado de Barack Obama, sino que da pábulo al sueño conservador de asfixiar el incipiente Estado del bienestar americano. Esta radicalización, ejemplificada en el rechazo a subvencionar entidades que faciliten el aborto, le asegura al presidente el apoyo de los halcones de su partido. Pero tiene un efecto negativo.
En noviembre del año que viene se renueva toda la Cámara de Representantes y 34 de los 100 escaños del Senado. Ante el miedo a perder cabe la posibilidad de que los congresistas republicanos se dividan y que, como ya ocurrió con el primer proyecto de reforma sanitaria, Trump no logre mayoría. Para atraerse el voto moderado, el presidente ha insistido en que el proyecto no altera las pensiones ni la cobertura sanitaria para los mayores. Pero los recortes son de tal calibre que es difícil para los más centristas aceptar estas cuentas. Y, desde luego, ofrece a la oposición un blanco fácil. La batalla del presupuesto no ha hecho sino empezar.
|
|
|
Primer
Anterior
2 a 3 de 3
Siguiente
Último
|
|
Trump elimina a Cuba de su propuesta de presupuesto Recorta la ayuda económica que destina EEUU a toda Latinoamérica
Estoy totalmente de acuerdo con esta propuesta,...
...¿por qué ayudar económicamente a esos países cuando siempre estan critícando y pegandole a la mano que los ayuda a comer... Además en nuestro país hay muchos pobres que deben recibir ayuda y se les quiere quitar, además segun dice no hay dinero para la salud pública... eso SÍ, para las armas y bombardiar a otros países lejos del nuestro si tienen el dinero.. Cubanet20
"Una nación que gasta más dinero en armamento militar que en programas sociales se acerca a la muerte espiritual"
— Martin Luther King —
Agencias | Washington | Cubanet La primera propuesta presupuestaria del presidente de EEUU, Donald Trump, incluye un sustancial recorte a la ayuda exterior a Latinoamérica, con reducciones a la asistencia proporcionada a todos los países del continente, un cambio que podría notarse especialmente en México y Centroamérica. La administración también eliminó la partida de 20 millones de dólares destinada a Cuba, que fue aprobada bajo el Gobierno de Obama.
El presupuesto -que se presentó este martes, debe ser aprobado por el Congreso y podría sufrir cambios- concede 37 600 millones de dólares al Departamento de Estado, de los cuales 1.093 millones van a parar a las operaciones en el continente americano y el Caribe, un descenso de 614 millones de dólares respecto al año fiscal 2016.
“Hay una reducción, pero aún así se está dando prioridad a los programas centrados en complicar la actividad de las organizaciones criminales trasnacionales, fortalecer la seguridad fronteriza y combatir la corrupción”, dijo el director de la oficina de ayuda exterior del Departamento de Estado, Hari Sastry, en una conferencia de prensa telefónica.
El desglose país por país del presupuesto para el año fiscal 2018 muestra recortes en todas las naciones de la región y elimina las partidas dedicadas a Cuba, y a Venezuela, que ese año obtuvo 6,5 millones de dólares y esta vez no tiene fondos específicos.
No obstante, a los fondos para cada país deben sumarse las cantidades dedicadas a los programas de seguridad, democracia, lucha contra el narcotráfico u inmigración, que tienen cuentas conjuntas para todo el continente y reparten fondos según se juzgue necesario.
De salir adelante este presupuesto, México recibiría 87,7 millones de dólares, un recorte del 45,3 % con respecto al año fiscal 2016, cuando obtuvo 160,1 millones (72,4 millones más).
El recorte a Centroamérica es también sustancial y reduce la ayuda al desarrollo y al fortalecimiento institucional que había potenciado el anterior Gobierno del demócrata Barack Obama.
Guatemala obtendría 80,7 millones de dólares, frente a los 131,2 millones que recibió en el año fiscal 2016; Honduras se quedaría con 67,8 millones (frente a los 98,2 de 2016), y El Salvador con 46,3 millones de dólares (frente a los 67,9 anteriores).
Nicaragua recibiría 200.000 dólares (frente a los 10 millones del año fiscal 2016), Costa Rica obtendría 400.000 dólares (frente a los 1,8 millones del año fiscal 2016) y Panamá recibiría 1,2 millones (frente a los 3,3 millones anteriores).
Colombia, por su parte, recibiría 251,4 millones de dólares, una cantidad no demasiado inferior a los 299,4 millones que obtuvo en el año fiscal 2016 pero sí notablemente menor a los fondos aprobados por el Congreso para el periodo 2017, un total de 391 millones de dólares contemplados en el plan “Paz Colombia” para el posconflicto.
Sin embargo, es posible que haya más fondos para Colombia en las partidas dedicadas a operaciones regionales en todo el continente (300 millones de dólares), temas de narcotráfico y seguridad en todo el mundo (167 millones) o ayuda humanitaria y promoción de la democracia a nivel global (2.679 millones de dólares).
A Perú llegarían 49,6 millones de dólares (frente a los 74,9 del año fiscal 2016), mientras que Chile recibiría 500.000 dólares (frente a los 670.000 dólares anteriores); Argentina tendría 500.000 dólares, Uruguay obtendría 400.000, la misma cantidad que Paraguay, y Brasil recibiría 815 000 dólares (frente a los 12,8 millones de 2016).
La propuesta también elimina los fondos específicos para Ecuador, que en 2016 recibió dos millones de dólares, y concede 10,5 millones de dólares a la República Dominicana (frente a los 21,6 millones de 2016) y 157,4 millones de dólares a Haití (frente a los 190,7 millones de 2016).
El presupuesto incluye además 587 millones de dólares para luchar contra las organizaciones criminales trasnacionales a nivel global, 189 millones de dólares menos que en el año fiscal 2016.
Sastry, el funcionario estadounidense, prometió además que Estados Unidos seguirá “haciendo frente a las causas de raíz” que generan la emigración en el triángulo norte de Centroamérica, como la pobreza o la corrupción, a pesar de los recortes.
Trump propone eliminar ayuda a la disidencia El presupuesto propuesto por la Casa Blanca elimina toda la partida para Cuba, que en 2016 recibió $20 millones para la sociedad civil y los derechos humanos
La primera propuesta presupuestaria del presidente Donald Trump, que se presentó el martes, elimina los fondos destinados a los asuntos vinculados con la sociedad civil y los derechos humanos en Cuba.
La propuesta también incluye un sustancial recorte a la ayuda exterior a Latinoamérica, con reducciones a la asistencia proporcionada a todos los países del continente, informa la agencia Efe.
Se elimina toda la partida para Cuba, que en 2016 recibió $20 millones en asuntos relacionados con la sociedad civil y derechos humanos. Y también desaparece el programa específico de ayuda a Venezuela, que obtuvo $6,5 millones en asuntos relacionados con la gobernanza y el respeto democrático, detalla el diario español El País.
El desglose país por país del presupuesto para el año fiscal 2018 muestra recortes en todas las naciones de la región.
No obstante, a los fondos para cada país deben sumarse las cantidades dedicadas a los programas de seguridad, democracia, lucha contra el narcotráfico o inmigración, que tienen cuentas conjuntas para todo el continente y reparten fondos según se juzgue necesario.
“Hay una reducción, pero aun así se está dando prioridad a los programas centrados en complicar la actividad de las organizaciones criminales trasnacionales, fortalecer la seguridad fronteriza y combatir la corrupción”, dijo el director de la oficina de ayuda exterior del Departamento de Estado, Hari Sastry, en una conferencia de prensa telefónica.
El presupuesto debe ser aprobado por el Congreso y podría sufrir cambios, concede $37.600 millones al Departamento de Estado, de los cuales $1.093 millones van a parar a las operaciones en el continente americano y el Caribe, un descenso de $614 millones respecto al año fiscal 2016.
De salir adelante este presupuesto, México recibiría $87,7 millones, un recorte del 45,3 % con respecto al año fiscal 2016, cuando obtuvo $160,1 millones.
El recorte a Centroamérica es también sustancial, y reduce la ayuda al desarrollo y al fortalecimiento institucional que había potenciado el anterior Gobierno de Barack Obama.
Guatemala obtendría $80,7 millones, frente a los $131,2 millones que recibió en el año fiscal 2016; Honduras se quedaría con $67,8 millones (frente a los $98,2 de 2016), y El Salvador con $46,3 millones (frente a los $67,9 anteriores).
Nicaragua recibiría $200.000 (frente a los $10 millones del año fiscal 2016), Costa Rica obtendría $400.000 (frente a los $1,8 millones del año fiscal 2016), Panamá recibiría $1,2 millones (frente a los $3,3 millones anteriores).
Colombia, por su parte, recibiría $251,4 millones, una cantidad no demasiado inferior a los $299,4 millones que obtuvo en el año fiscal 2016 pero sí notablemente menor a los fondos aprobados por el Congreso para el periodo 2017, un total de $391 millones contemplados en el plan “Paz Colombia” para el posconflicto.
Sin embargo, es posible que haya más fondos para Colombia en las partidas dedicadas a operaciones regionales en todo el continente ($300 millones), temas de narcotráfico y seguridad en todo el mundo ($167 millones), o ayuda humanitaria y promoción de la democracia a nivel global ($2.679 millones).
A Perú llegarían $49,6 millones (frente a los $74,9 del año fiscal 2016); mientras que Chile recibiría $500.000 (frente a los $670.000 anteriores); Argentina tendría $500.000, Uruguay obtendría $400.000, la misma cantidad que Paraguay; y Brasil recibiría $815.000 (frente a los $12,8 millones de 2016).
La propuesta también elimina los fondos específicos para Ecuador, que en 2016 recibió $2 millones; y concede $10,5 millones a la República Dominicana (frente a los $21,6 de 2016) y $157,4 millones a Haití (frente a los $190,7 millones de 2016).
El presupuesto incluye además $587 millones para luchar contra las organizaciones criminales trasnacionales a nivel global, $189 millones menos que en el año fiscal 2016.
Sastry, el citado funcionario estadounidense, prometió además que Estados Unidos seguirá “haciendo frente a las causas de raíz” que generan la emigración en el triángulo norte de Centroamérica, como la pobreza o la corrupción, a pesar de los recortes.
(EFE) Fuente Cubanet
|
|
|
|
Gracias Jorge por traernos con objetividad esta dolorosa pero esperada noticia por venir del fantoche trump....
|
|
|
|
|