Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

Cuba Eterna
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 BANDERA DE CUBA 
 MALECÓN Habanero 
 *BANDERA GAY 
 EL ORIGEN DEL ORGULLO GAY 
 ALAN TURING 
 HARVEY MILK 
 JUSTIN FASHANU FUTBOLISTA GAY 
 MATTHEW SHEPARD MÁRTIR GAY 
 OSCAR WILDE 
 REINALDO ARENAS 
 ORGULLO GAY 
 GAYS EN CUBA 
 LA UMAP EN CUBA 
 CUBA CURIOSIDADES 
 DESI ARNAZ 
 ANA DE ARMAS 
 ROSITA FORNÉS 
 HISTORIA-SALSA 
 CELIA CRUZ 
 GLORIA ESTEFAN 
 WILLY CHIRINO 
 LEONORA REGA 
 MORAIMA SECADA 
 MARTA STRADA 
 ELENA BURKE 
 LA LUPE 
 RECORDANDO LA LUPE 
 OLGA GUILLOT 
 FOTOS LA GUILLOT 
 REINAS DE CUBA 
 GEORGIA GÁLVEZ 
 LUISA MARIA GÜELL 
 RAQUEL OLMEDO 
 MEME SOLÍS 
 MEME EN MIAMI 
 FARAH MARIA 
 ERNESTO LECUONA 
 BOLA DE NIEVE 
 RITA MONTANER 
 BENNY MORÉ 
 MAGGIE CARLÉS 
 Generación sacrificada 
 José Lezama Lima y Virgilio Piñera 
 Caballero de Paris 
 SABIA USTED? 
 NUEVA YORK 
 ROCÍO JURADO 
 ELTON JOHN 
 STEVE GRAND 
 SUSY LEMAN 
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
 
 
  Herramientas
 
General: La dualidad monetaria parte en dos los Carnavales de La Habana
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 1 en el tema 
De: cubicheporelmundo  (Mensaje original) Enviado: 28/08/2018 14:39
 PAN Y CIRCO, SIN DINERO
La división por monedas recuerda a los primeros años de la dolarización de la economía cubana, en la década de los 90.  La medida de separar la venta en CUC y CUP contrasta con el progresivo avance en la red de comercios minoristas de la aceptación de ambas monedas. La falta de lugares para disfrutar sentado los festejos también fue uno de los puntos más criticados.

LA DUALIDAD MONETARIA
PARTE EN DOS LOS CARNAVALES DE LA HABANA
     Zunilda Mata | 14yMedio
Las largas colas anunciaban este domingo donde se vendía la cerveza dispensada en los carnavales de La Habana, el producto más buscado por los clientes de pocos recursos. En su último fin de semana, la dualidad monetaria se hizo sentir con fuerza en la fiesta popular más importante de la capital cubana.
 
"No se acepta moneda nacional", rezaba un cartel en un kiosco con bebidas enlatadas, algunas importadas y otras nacionales. Las autoridades han preferido mantener divididas las ventas según la moneda en que se efectúa (peso cubano o peso convertible), una decisión que generó múltiples molestias.
 
"Ha sido una decisión de la Empresa de Carnaval y la Dirección Provincial de Cultura de La Habana", aclaró el empleado de un kiosco bautizado con el nombre del barrio de Mantilla. "Nosotros solo hacemos lo que nos dicen y aquí solo podemos vender en pesos cubanos".
 
"Tuve que comprar el pollo frito en un kiosco y la cerveza en otro porque uno era en moneda nacional y el otro en chavitos", lamentó Sandra, una habanera de 37 años que llevaba años "sin poner un pie en el carnaval porque no vale la pena". Este domingo decidió aventurarse pese a que el evento le resulta peligroso.
 
Las riñas son frecuentes en los festejos habaneros que se han ganado una reputación de conflictivos y riesgosos, a pesar de la estricta vigilancia y las normas que prohíben portar armas blancas. En los últimos años la presencia de familias con niños ha disminuido notablemente como consecuencia de la violencia.
 
La división por monedas recuerda a los primeros años de la dolarización de la economía cubana, en la década de los 90, cuando los festejos populares quedaron partidos entre las pobres ofertas en CUP y las más variadas en dólares o pesos convertibles. Con los años, sin embargo, la venta se fue unificando y en los últimos carnavales se podía pagar indistintamente al cambio de 1 CUC por 24 CUP.
 
La medida de separar la venta en CUC y CUP contrasta con el progresivo avance en la red de comercios minoristas de la aceptación de ambas monedas. "En casi cada tienda se puede pagar en una o en la otra moneda, pero cuando llegas al carnaval funciona de otra manera, esto no hay quien lo entienda", lamentaba un frustrado cliente.
 
A diferencia de la enlatada, la cerveza dispensada, la bebida más barata en oferta, se vendió en pesos cubanos a un precio de 9 CUP el vaso. "Es la única posibilidad de tomar una cerveza a este precio porque el resto del año no se vende dispensada en CUP en ningún lugar", apunta Sandra.
 
Las críticas también recayeron en la poca variedad de la comida ofertada. "En todos los kioscos hay lo mismo, cerdo asado, pollo frito o pan con lechón", detalla Randy. "Si te pones de suerte te puedes encontrar una mazorca de maíz pero nada más, este carnaval no evoluciona gastronómicamente, siempre es lo mismo".
 
Cerca de Randy, unos extranjeros intentaban explicar a un vendedor que querían un poco de picante para agregar a unas brochetas de cerdo cocinadas al carbón e insertadas en un trozo delgado de madera de pino. "No, no tenemos ninguna salsa ni con picante ni sin picante", respondió tajante el empleado.
 
La falta de lugares para disfrutar sentado los festejos también fue uno de los puntos más criticados. Solo el área de las gradas y los palcos tenía asientos. A diferencia de otros años, donde también se instalaron cafeterías o zonas gastronómicas con mesas, en esta ocasión todo el consumo de bebidas y alimentos se despachó en kioscos y barras.
 
En la zona del Parque Maceo las familias tomaron los bancos, pero en otras áreas los participantes tuvieron que quedarse todo el tiempo de pie. "En una buena parte del trayecto no hay acceso al muro del Malecón porque han puesto los kioscos ahí o han colocado barandas para que la gente no pase", explicó un jubilado.
 
Los guardias de seguridad justificaron la medida como una manera de "controlar mejor la situación en una sola área", precisó un agente. "No es lo mismo tener gente a un lado y a otro de la calle por donde desfilan las carrozas y las comparsas que poder mantenerlos de un solo lado".
 
La inusual escena de un muro del Malecón completamente vacío se repetía en los alrededores de la calle 23, una zona muy concurrida y con varios kioscos de comida y bebida.
 
Unos pocos vendedores privados se aventuraron con sus chucherías, especialmente para niños. "Hay muchos controles para no dejarnos vender en estas áreas porque dicen que le hacemos competencia a los kioscos estatales", explicó Michel, un comerciante de rositas de maíz y maní tostado.
 
A pocos metros de su carrito de ventas, en una entrecalle de la avenida Malecón, decenas de policías se preparaban para entrar en los festejos. Cerca de las 7 de la noche cada uno recibió una caja de cartón con algo de arroz, un pedazo de cerdo y papas fritas. "Coman rápido que ya está cayendo el sol", gritó un oficial.
 
Los uniformados devoraron la comida a toda velocidad y se fueron incorporando en grupos a la zona de los festejos, donde en las largas filas frente a los kioscos la gente seguía indangando si aquello era una cola para comprar en CUP o en CUC.
ZUNILDA MATA,  DESDE LA HABANA 2018    
   Fuente: 14yMedio
©CUBA ETERNA 9 AÑOS CONTIGO
 


Primer  Anterior  Sin respuesta  Siguiente   Último  

 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados