Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

Cuba Eterna
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 BANDERA DE CUBA 
 MALECÓN Habanero 
 *BANDERA GAY 
 EL ORIGEN DEL ORGULLO GAY 
 ALAN TURING 
 HARVEY MILK 
 JUSTIN FASHANU FUTBOLISTA GAY 
 MATTHEW SHEPARD MÁRTIR GAY 
 OSCAR WILDE 
 REINALDO ARENAS 
 ORGULLO GAY 
 GAYS EN CUBA 
 LA UMAP EN CUBA 
 CUBA CURIOSIDADES 
 DESI ARNAZ 
 ANA DE ARMAS 
 ROSITA FORNÉS 
 HISTORIA-SALSA 
 CELIA CRUZ 
 GLORIA ESTEFAN 
 WILLY CHIRINO 
 LEONORA REGA 
 MORAIMA SECADA 
 MARTA STRADA 
 ELENA BURKE 
 LA LUPE 
 RECORDANDO LA LUPE 
 OLGA GUILLOT 
 FOTOS LA GUILLOT 
 REINAS DE CUBA 
 GEORGIA GÁLVEZ 
 LUISA MARIA GÜELL 
 RAQUEL OLMEDO 
 MEME SOLÍS 
 MEME EN MIAMI 
 FARAH MARIA 
 ERNESTO LECUONA 
 BOLA DE NIEVE 
 RITA MONTANER 
 BENNY MORÉ 
 MAGGIE CARLÉS 
 Generación sacrificada 
 José Lezama Lima y Virgilio Piñera 
 Caballero de Paris 
 SABIA USTED? 
 NUEVA YORK 
 ROCÍO JURADO 
 ELTON JOHN 
 STEVE GRAND 
 SUSY LEMAN 
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
 
 
  Herramientas
 
General: Misiles rusos para Cuba; ¿se olvidaron de la crisis del 62?
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 1 en el tema 
De: CAMPESINO2  (Mensaje original) Enviado: 30/11/2018 14:01
CUBA = SOCIOLISMO
Las verdaderas necesidades de la Isla son más pedestres. Y los bolos, tan animaditos ahora por sus tres posibles bases, ¿no recuerdan la Crisis de Octubre del 62 y el vergonzoso papel en que dejaron al Gobierno cubano, especialmente a Fidel Castro? Y eso de que los misiles ¿“contribuirían a la seguridad cubana”?…

 MISILES RUSOS PARA CUBA
¿SE OLVIDARON DE LA CRISIS DEL 62?
Jorge Dávila Miguel | cubaencuentro
Vladimir Putin ha prometido ayuda a Cuba para modernizar y reformar su economía. Qué cosas tiene la vida. A cada rato sobrevolamos los puntos de partida.
 
Después de 30 años de sabor soviético en 2015 La Habana tuvo su breve noviazgo con el “norte revuelto y brutal”, y ahora —Trump mediante— 25 años después de que el imperio soviético se desmerengó alejándose de Cuba, Moscú le vuelve a dar créditos militares a La Habana. Concretamente 50 milloncitos. Con eso no se resuelve mucho, es verdad, pero también va a poner en la Isla un sistema de posicionamiento global que se llama Glonass, que es similar al GPS y son los sistemas que usan los autos para llegar a su destino y también los misiles.
 
Y saltaron los titulares: Cuba podría de nuevo alojar cohetes rusos si Trump —que se retira de todas partes— al fin se retira del tratado de cohetes intermedios INF firmado entre Ronald Reagan y Mijaíl Gorbachov en el año 1987. Ya lo dice un orondo experto “bolo”[1] , Igor Korotchenko: “Tenemos que volver a Cuba, necesitamos allí tres bases militares. Una de inteligencia electrónica para poder controlar y entender qué hace EEUU. Una base para nuestros submarinos nucleares multifuncionales. Y, si EEUU se sale del Tratado INF, podríamos desplegar allí sistemas de misiles adecuados, lo cual contribuiría a la seguridad cubana y a la lucha antiterrorista internacional”.
 
De seguro la espléndida prensa cubana no publicará nada sobre estos comentarios. Le dedican primeras planas completas en periódicos de cuatro páginas al aniversario del Ballet Nacional de Cuba y a la “desaparición física” del legendario Camilo Cienfuegos. Desaparición física. ¿Se habrá creado algún nuevo cielo en los lineamientos del Partido Comunista de Cuba donde residan eternamente los espíritus de los héroes? ¿Podríamos averiguar con el Héroe de Yaguajay si “vamos bien”?
 
Pero debían publicarlos. Para que la población supiera —que de nuevo su destino, que ya se movió una vez entre la dependencia norteamericana y la dependencia rusa puede verse de nuevo como diente en quijada de una de estas dos potencias.
 
Y los bolos, tan animaditos ahora por sus tres posibles bases, ¿no recuerdan la Crisis de Octubre del 62 y el vergonzoso papel en que dejaron al Gobierno cubano, especialmente a Fidel Castro? Y eso de que los misiles ¿“contribuirían a la seguridad cubana”?…
 
¡Ay!, inefable camarada Korotchenko. Tus sueños son los mismos sueños, pero al revés, de los James Bolton y los Marco Rubio. Música para sus oídos. La perfecta excusa para apretar a Cuba. Aunque francamente no parece que a Bolton, asesor de seguridad nacional, le quede mucho tiempo para deleitarse en las melodías de la Casa Blanca; la primera dama le tiene enfilados los cañones.
 
Bolton, de quien se dice es un “halcón”, queriendo decir que es muy fiero, efectivamente está a favor de todas las guerras del mundo, como también lo estaba el senador John McCain, célebre por haber caído prisionero cuando bombardeó Hanói. Pero la diferencia entre los dos es que Bolton nunca disparó ni un chícharo. Evadió olímpicamente el servicio militar en Vietnam. Incluso declaró: “Confieso que no tenía deseo alguno de morir en un arrozal del sudeste asiático”.
 
Bolton es un entusiasta de que Trump se retire del Tratado INF. Y por las estepas rusas habrá también quienes quieran demostrarles a los americanos que sus cohetes y sus gónadas son mejores y más grandes. Como se dice por éstas a menudo agradables “entrañas del monstruo”, ambos están ansiosos por una especie de pissing contest, pero donde las respectivas micciones tuvieran un letal contenido radiactivo.
 
Y la Siempre Ansiosa Isla de Cuba ¿querrá ser parte de esa competencia? ¿Tan lejos del cielo y tan cerca del Comando Sur americano?
 
No faltarán tampoco los Bolton isleños que añoren las épocas en que Cuba era un factor de influencia continental e incluso mundial. Cuando crear dos, tres, muchos Vietnam era la consigna. Cuando el príncipe de las guerrillas gobernaba allí. Nuevos héroes de imposibles gestas, socialmente hambrientos por pertenecer a la gloria.
 
Pero qué le vamos a hacer, mis queridos proto héroes, las verdaderas necesidades de Cuba son lamentablemente más pedestres. Y no vendría nada bien el viable lanzamiento de los coheticos del camarada Korotchenko. Relanzar la producción de ladrillos y malanga sería más heroico y glorioso, diría yo. Aunque entendiblemente, más difícil.
 
[1] “Bolo”, cariñoso y despectivo epíteto popular en la época de la hermandad cubano soviética para designar a los ciudadanos rusos.
Fuente: cubaencuentro


Primer  Anterior  Sin respuesta  Siguiente   Último  

 
©2025 - Gabitos - Todos los derechos reservados